~ UN ESPOSO DE MENTIRA ~ (Flippy x Splendid)

¡Hawaii!~

En el aeropuerto de la ciudad se encontraban un peliverde y una pelirroja sentados. El primero de estos dos estaba notablemente nervioso.

Se suponía que ya deberían estar todos allí, pero justamente ese día les había dado con llegar tarde, y eso era precisamente lo que tenía al peliverde tan nervioso. A él realmente no le importaba si iban o no, así lograría tener más tiempo a solas con su novia. Pero ella no pensaba igual. Ella quería que los demás los acompañaran para que pasaran tiempo juntos, como una familia.

Y eso era precisamente lo que le preocupaba.

¿Qué tal si a Splendid le hubiera dado una especie de revelación y decidiera no ir a Hawaii con ellos? Eso implicaría que Lumpy y Splendont se quedaran, y si se quedaba Splendont, también Fliqpy, y si eso pasaba se quedaba Petunia, y al final ninguno de los que su novia había invitado iría. ¡Sería un completo desastre!

Y mientras el se pasaba mil películas en su mente, los protagonistas de sus tragedias se encontraban ya en la entrada del aeropuerto, acercándose adonde estaban ellos para saludarlos.

-¡Hola chicos! Que alegría de que si vinieran, ¡la pasaremos increíble todos juntos!-hablo con verdadero entusiasmo la chica mientras daba infantiles saltitos de alegría.

-¡Ya lo creo!-la acompañó Petunia en su felicidad, imitando la acción de la muchacha.

-Oigan, yo volveré en un momento, iré a comprar algunas cosas-dijo Splendont para dirigirse a una tienda no muy lejos.

-¿Nos esperaron demasiado?-está vez habló Splendid, a quien le contestó con disgusto el peliverde.

-Si, y seguramente tú tuviste la culpa-le soltó con una sonrisa orgullosa.

-¡No me vengas con...!

-¡Splendid!-se escuchó un grito a lo lejos, era un grito de alegría, que pronto se fue haciendo más cercano.

Todos voltearon en esa dirección, encontrando a un joven de pelo verde con algunos caramelos enredados en este, una polera verde a rallas y unos pantalones azules, que corría a toda velocidad hacia el peliazul antes nombrado.

Este no pudo ni reaccionar cuando el chico se abalanzó sobre el, tumbándolo en el piso para luego acorralarlo e intentar besarlo. Intentar, por que en un rápido movimiento el peliazul tapó su boca evitando el casi beso.

-¡Nutty! ¡Quítate ahora!

-Que amargado eres...-hizo un puchero y se levantó para dejar al peliazul hacer lo mismo.

-Ey, Lumpy, como que deberías cumplir tu papel de novio y ponerte celoso ¿no?-le susurro Fliqpy, quien en ese momento se encontraba al lado del peliceleste.

El nombrado (que hasta ese momento había estado distraído con el vuelo de una mosca) miró al peliverde para luego mirar hacia la escena que se estaba armando.

-¡Oh, si, tienes razón!-hablo con una sonrisa para luego fruncir de forma realmente exagerada el ceño, inflar el pecho y subir sus hombros para empezar a caminar de forma extraña hacia Splendid y el recién llegado Nutty.

-Oye-hablo con una voz ronca (realmente fingida cabe recalcar)-aléjate de mi novio.

El extraño chico miro al más alto con una ceja arqueada, ¿quien era ese? ¿y por qué se refería a SU héroe como "novio"?

-¿Eh?-fue lo único que logró pronunciar al encontrarse tan desconcertado.

-Es....una larga historia, pero pasando a otro tema ¿cuando llegaste y que necesitas?-hablo en peliazul dejando de lado al peliceleste, que sintiéndose ignorado se regreso a su antigua lugar para volver a ver a esa llamativa mosca.