Mongrel/ Pía y Healer.

Capítulo dos

Healer pasaba horas mirando la televisión, una cinta vieja que mostraba a un padre jugando con su hija en un parque, la escena se repetía una y otra vez, era como un bucle.
Yo lo miraba desde la oscuridad de aquella casa, no me atrevía a preguntar nada. Todo apuntaba a que esa cinta le traía nostalgia, ¿será su padre?, ¿Quién es aquella niña?
Pese a llevar una máscara, se podía sentir la tristeza que emanaba de su espíritu, por más que aparentaba ser alguien fuerte creo que era el menos fuerte entre nosotros.
Yo, al ser su mano derecha estaba más cerca de él que los demás, aunque, de igual manera nadie parecía mostrar interés alguno en los demás, cada quién venía a lo que venía y ya, quizá soy yo la única que aún conserva algo de sentimientos en su frío corazón.
El día de mañana será algo largo, habrá que presenciar más muerte, más lamentos, no sé si desee seguir con todo esto, hasta cierto punto creo que sólo quería salir de aquel sitio mas no contemple el costo, ¿seré yo la única a la que no le gusta tanta violencia? Entiendo que no estoy acá por mi buen comportamiento pero, si lo pienso mejor, yo lo hice por defensa propia aunque, aún no conozco las razones de aquellos dos sujetos, Healer no me los presentó del todo, ¿serán viejos amigos? De ser así, no tendría porqué presentarlos.
Creo que, tengo un poco de miedo, miedo de cómo terminará todo esto... No, no debo olvidar el porqué estoy acá, debo hacerme justicia, necesito saber qué pasó con mi hermano, necesito respuestas.
Quién era ese hombre, me gustaría mirar su rostro aunque fuese una sola vez.
Su voz es sumamente grave, hasta parece falsa pero hasta éste punto ¿qué es real y qué es falso? Creo que estoy perdiendo la cordura, justo como el monstruo que ayer estaban mutilando a una pareja, sin remordimiento alguno.