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En un pequeño hogar, una mujer peliverde preparaba la comida del día, irradiando una sonrisa alegré ¿La razón? Su esposo volvía del extranjero después de un largo viaje de negocios, quien llegaría en el atardecer.

Midoriya Inko estaba feliz de volver a ver a su esposo después de 7 meses fuera de Japón, la mujer peliverde camino hacia la pequeña sala del departamento, frotando su gran vientre.

Inko estaba en sus últimas semanas de embarazo, posiblemente el nuevo integrante de la familia Midoriya llegaría a este mundo en una buena estación, el verano más agradable de ese año.

Tan pronto como llegó a la sala, escuchó unos pasos fuera del departamento, al acercarse a la puerta principal, un hombre de cabello plateado abrió la puerta sosteniendo una maleta.

El hombre de cabello alborotado sonrió por la cálida bienvenida de su esposa, la cual le abrazó de la cintura, después de no haberlo visto en un buen tiempo.

Te ves tan hermosa como en el día en que parti -habló el hombre frotando suavemente la mejilla de la peliverde- Estoy en casa

Bienvenido a casa Hisashi -seguido del comentario la peliverde beso a su esposo- Me alegra que regresaras a tiempo

Inko no podría perderme en nacimiento de mis pequeños -sonrió nuevamente Hisashi llevando sus manos al gran vientre de su esposa- Quiero estar en todo momento con mis pequeños

Inko sonreía por lo que su esposo había dicho, lo que él no sabía que era que esperaban un hijo e hija, Inko no se lo dijo a su esposo por lo que el aún piensaba que son varones.

Hisashi preparé tu comida favorita -comentó inko sonriendo a su esposo-

Extrañe el sabor de tu comida Inko -dijo hisashi despojandose de su saco de vestir-

Primero, toma una ducha -comentó Inko sonriendo a su esposo-

Esta bien. Después de todo eso ayudaría a refrescarme un poco -dijo hisashi en dirección a la habi- tación-

En cuanto entro a la habitación colocó su maleta sobre la cama, para tomar algo dentro de ella, una pequeña caja que parecía contener algo.

Miraría el contenido por un momento para asegurar que estuviera intacto, suspiro de alivio en cuanto lo confir- mo, cerrando la caja suavemente evitando algún ruido.

Después se dirigió al baño que se encontraba al fondo del pasillo del departamento, aunque su espacio era pequeño, era cómodo disfrutar de la ducha.

[Minutos después]

Luego de terminar su ducha fue a la habitación, de su maleta tomo ropa la cual utilizaba de manera casual, eligiendo un pantalón de vestir negro, una camisa de vestir blanca y por supuesto, un saco color azul.

Hisashi siempre mantenía un estilo de vestir, nunca mostró interés en otro que no sea el suyo, al volver a la sala principal encontró a Inko sentada frente al comedor.

La comida se enfriará, comamos hisashi -dijo Inko mirando a su esposo- Es tu favorito, Katsudon

Nunca me negaría ante tu comida Inko -respondió hisashi tomando haciendo en el otro extremo de la mesa-

Después de terminar la hora de la comida, la joven pareja fue a la sala, durante un tiempo hisashi solo susurraba palabras al vientre de Inko.

Era una escena realmente hermosa, un padre primeriso ansioso de cono- cer a sus primeros hijos mientras que la peliverde solo sonreía de alegría ante la alegría de su esposo.

Héroe [Izuku Midoriya] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora