Capítulo 45: Steve (2)

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Capítulo 45: Steve (2)

En la base de entrenamiento.

El personal militar organizó un escenario en forma de discurso en el centro de la plaza. En el medio del escenario, Steve Rogers hablaba a la audiencia como Capitán de los Estados Unidos. Para su consternación, hubo factores políticos involucrados.

El jefe de la base emitió una orden anticipada que obligaba a todos los soldados del campo de entrenamiento a escuchar el discurso en el centro de la plaza a tiempo. Aquellos que ignoraron las órdenes del jefe debían ser expulsados ​​del ejército. Aunque lo intrigante fue que ningún oficial asistió al discurso sino los soldados y reclutas alistados.

No solo fueron los soldados, sino también los oficiales que también se burlaron de Steve, que nunca había estado en la guerra, pero tuvieron el descaro de llamarse a sí mismo "Capitán América". Era concebible que Steve, que estaba vestido con medias con el logo estadounidense, estuviera destinado a enfrentar una fuerte resistencia de sus compañeros soldados.

"¿Lucharás contra Hitler conmigo?" Steve se subió al podio. Frente al silencio, trató de elevar los espíritus de los cientos de soldados de abajo. "¿Hay voluntarios dispuestos a pelear conmigo?"

"¡Disparates! ¿Qué estamos haciendo aquí si no somos voluntarios? "Uno de los soldados gritó con impaciencia, seguido por docenas de soldados que estallaron en carcajadas.

"¡Queremos ver bailar a las chicas!"

"Creo que solo cantarán una canción más tarde. Pensaré en qué hacer en ese tiempo extra ... "Ante el ajetreo y el bullicio, Steve respondió incómodamente.

"¡Jódete!"

"Oye, pequeña hada, ¿por qué no bailas con tus botas?"

Los soldados no le dieron a Steve el más mínimo respeto. Se volvieron más bulliciosos y entrometidos. Algunos incluso arrojaron sus frutas o botellas de agua directamente al escenario.

Peggy Carter apretó los puños al ver la horrible escena de Dios desde el escenario. Ella sabía que no había nada que pudiera hacer.

Steve no tuvo más remedio que los accesorios decorativos en su mano como escudo para bloquear el lanzamiento constante de artículos diversos debajo del escenario.

"¿Qué estás haciendo?"

Una voz fría y poderosa vino desde detrás del escenario. Los soldados en el centro de la plaza miraron con sorpresa porque vieron a un joven con uniforme de oficial parado detrás de ellos. Tenía un toque de majestad en su cuerpo mientras miraba a los soldados con un brillo agudo y frío.

"Es un segundo teniente ..." El soldado que había estado listo para discutir de repente notó el rango en el joven. Rápidamente, tragó su saliva de vuelta con incredulidad.

¿Un hombre tan joven es un segundo teniente? Nunca he oído hablar de esto.

"Se ve más joven que nosotros, ¿verdad?"

Entre los susurros nerviosos de los soldados alistados, hubo algunos que reconocieron la identidad del joven oficial. Con una voz tonal mixta, un soldado dijo: "¡Es Kyle! ¡Segundo teniente Kyle!

Segundo teniente Kyle?

Tan pronto como se dijo esto, muchos ojos se quedaron estupefactos. Se volvieron frenéticamente salvajes una vez más.

"Hey, ¿es realmente él?"

"¿Qué otro Kyle sabemos que sería capaz de convertirse en un oficial a una edad tan joven? ¡Ya vimos cómo era en aquel entonces! ¡Por supuesto que sería él!

"¡Oh Dios mío! ¡Mi héroe estadounidense, mi ídolo!

"¿Quién no lo conoce? ¡Me uní al ejército por los actos meritorios que había hecho!

Los soldados estaban emocionados, la sangre corría a su cabeza porque no sabían qué hacer. Por fin, una figura desconocida tomó la delantera y gritó: "¡Todos, levántense y saluden!"

Todos se pusieron de pie apresuradamente y saludaron al joven. "¡Saludos, teniente segundo! ¡Has trabajado duro, señor!

Ante su adoración divina al joven oficial, Kyle respondió con frialdad. "¿Así que respetas mi rango como teniente segundo, pero no Steve, tu capitán? No hace mucho tiempo, solo fui uno de ustedes con Steve. ¿Es así como tratas a tus hermanos de armas? ¡¿Es este el porte de calidad de un soldado ?! "

Los soldados se miraron con rechinar los dientes. Finalmente, se dieron la vuelta e inclinaron la cabeza mientras se disculpaban.

"¡Lo siento!"

Steve no respondió, solo miró al joven frío que estaba parado detrás de los soldados. Por extrañas razones, su corazón se sentía excitado y avergonzado. Luego, recordó el tiempo que pasaron durante su entrenamiento de reclutas. Amanecía y pronto saldría la luna. Kyle acababa de ganar el concurso de tiro. En ese momento, Kyle le dijo: "Steve, de ahora en adelante, nadie se atreverá a menospreciarnos".

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