Colmillos y Garras - Almas Gemelas (Seungyul - x1)

Ajustes

Hangyul tras discutir inútilmente con el director del colegio, salió dando un fuerte portazo, encontrando a su hermano envuelto en una elegante chaqueta azul a rayas que creía haberla visto antes, para suerte del pequeño, no recordaba en dónde

-¿de dónde sacaste eso?- le preguntó sentándose a su lado atrayéndolo a su cuerpo, no recordaba que hiciese tanto frío cuando salieron de su casa

-me lo dio alguien...- susurró con temor que su hermano perdiera la cabeza si se enterara que fue un vampiro

-¿algún idiota te está cortejando?, sabes que voy a cortarle la cabeza ¿verdad? ¡Las dos!– gruñó, llamando la atención de los jóvenes que pasaban por el pasillo

-no es así, un hombre pasó y vio que me estaba congelando y me la entregó, mañana se la dejaré al director por si vuelve- bajó la cabeza ocultándose en la costosa chaqueta. Para sorpresa del mayor, la prenda no poseía ningún olor conocido, ni alfa, ni omega, solo restaba que fuese un beta, un vampiro o un humano, y a Hangyul se le revolvió el estómago con siquiera imaginar que su hermano pasase lo mismo que él

-oye hyung ¿estás bien?- no supo en qué momento comenzó a hiperventilar y sus ojos se llenaron de lágrimas, solía pasarle eso cuando su lobo lo recordaba

-sí, escucha, sé que nunca habló de estas cosas contigo porque son... vergonzosas y ya sabes como soy, pero si algo te perturba o sientes que algo va mal, cuenta conmigo Dongpyo, voy a protegerte con mi vida siempre- tomó las manos de su hermano y juntaron sus frentes fortaleciendo cada vez ese hermoso lazo familiar

"lo sé hyung"

"y voy a patearle el trasero al que intente coquetearte"

Mientras tanto en la mansión, tres vampiros de rango C se hallaban sentados con arrogancia

en las elegantes sillas mientras miraban como el vampiro al mando del distrito se paseaba elegantemente de un lado a otro

-esto es inaudito señor Han, algunos tenemos empresas que atender, cheques que firmar e hijos que criar- habló uno de ellos

-qué curioso que nombres la crianzas de tus pequeños murciélagos, porque por eso están aquí- Seungwoo tomó un puntero de madera que Seungyoun a su lado sostenía con obediencia mirando un punto fijo de la pared

-como sabrán sus pequeños son algo indisciplinados, y al parecer ustedes, como sus padres, no les han dejado muy claro cuáles son las reglas y qué sucede cuando se las infringe ¿verdad?- mientras el vampiro de mayor rango hablaba, caminaba alrededor de los tres invitados que se miraban entre ellos preocupados al saber el rumbo que tomaría la reunión

Seungyoun sonrió de medio lado al darse cuenta cuál iba a ser su papel en ese malvado juego,

-¿de qué se ríe el fenómeno?-

No era novedad alguna el hecho de que un Han, un vampiro tuviese un convertido en la mansión y siendo además la mano derecha de un vampiro rango A, sólo que la raza chupasangre era algo discriminadora y muy selectiva

-tranquilos, él sólo es mi asistente, solo sigue mis órdenes- los ojos de Seungwoo comenzaron a cambiar y sus colmillos crecieron con rapidez

-haremos esto rápido así pueden seguir con sus cosas y salen de mi vista lo antes posible, disciplinarán a sus hijos, enseñándoles cuáles son las reglas del nuevo mundo, la triple alianza que hicimos con los humanos y cambiaformas y sobre todo a no desobedecer las órdenes impuestas por los vampiros de clase A- se acercó con rapidez a la mujer sentada a la derecha y tomó sus mejillas con fuerza