Mientras avanzaba por la acera veía el largo camino de cemento, contemplé mi futuro cercano. Ya tenía una idea aproximada de cómo sería mi fin de semana: ver televisión, pedir pizza y, por supuesto, cuidar a Sarah.
Golpeé la puerta oscura con el puño varias veces y esperé. Después de solo unos segundos, se abrió.
"Hola Alex. Gracias por atender a nuestro llamado rápidamente haha". La Sra. Foreman dijo disculpándose cuando me hizo señas para que entrara a la casa.
"Está bien. Siempre estoy feliz de ayudar", respondí con voz alegre.
Mis ojos escanearon la gran sala de estar y no vieron un cambio ni nada nuevo, igual que de costumbre: un sofá marrón ligeramente descentrado, una pequeña mesa con el televisor en la pared del fondo y una larga alfombra circular en el centro de la habitación.
Rápidamente encontré a Sarah jugando en el descanso de las escaleras.
"Los números de emergencia están en la never, como siempre, también hay algo de dinero en el mostrador para que ordenes pizza. Nos vemos el domingo por la noche". El Sr. Foreman dijo un poco incómodo antes de que él y su esposa cerraran la puerta detrás de ellos.
"Solo tu y yo." Le dije a Sarah, aunque sabía que no me estaba prestando mucha atención.
Después de un minuto suspiré y me dejé caer en el sofá, agarrando el control remoto. Presioné un botón y la pantalla se encendió, abriéndose a un canal de compras.
"Ew. Aburrido" Dije mientras apretaba el botón para subir el canal
"No me interesa". "No me gustan los deportes". "Demasiado grande para ese espectáculo". "No hablo inglés"
Al escanear cada canal me di cuenta de que no había nada bueno, presioné el botón Atrás varias veces hasta que encontré un canal que había rechazado anteriormente.
"Supongo que también podría ver esto". Dije cuando vi a Elmo dando una conferencia sobre la letra G.
Se distraje por varios minutos y mi lengua me trajo de vuelta a la realidad pidiendo líquido.
"No he tomado ni un trago de líquido hoy". Me grite a yo solo, luego me puse de pie y me dirigí a la cocina.
El gabinete con las tazas estaba en la pared del lado izquierdo, así que fui directo a ese. Cuando lo abrí, sin embargo, solo encontré el vacío, literalmente, no había nada. Busque por todos lados en la cocina y no pude encontrar un solo vaso en ningún lado. Estaba derrotado, mis ojos se dirigieron al mostrador, donde se encuentra un biberón rosado, recién lavado.
"Bueno, esto es lo único disponible aquí, pero no soy un bebé" Discutí conmigo mismo por un tiempo hasta que me di por vencido y agarré la botella y me alejé
Cuando abrí el refrigerador, me encontré con una gran cantidad de jugos para escoger, tomé el de naranja lentamente y llené cuidadosamente la botella rosa.
Observé a Sarah para asegurarme de que no se lastimara o se fuera de la sala.Para mi deleite, no lo hizo; Después de poner la tapa en la botella del jugo de naranja, encontré otro y se lo ofrecí a Sarah
"Aquí tienes". Me acercaba mientras lo ponia a su lado, Sarah agarró la pequeña botella y con avidez comenzó a chupar el jugo.
Ella solo llevaba una camiseta y un pañal con un estampado de Ariel de "la sirenita"
¿Esta mal que no pueda apartar los ojos de su pañal? Simplemente se veía tan ... convincente.
(Nota: no lo está mirando por el niño. Es porque los pañales de repente le interesan.)
¿Qué me pasa? ¡No debería de estar pensando en eso! ¡Tengo 16 años!
Agarré la botella rosa de jugo de naranja que hice para mí y la miré.
Umm... Tal vez?
~ ~ ~
Ahora son las 7pm.
Sarah se fue a la cama y la botella que adopté estaba casi vacía. No podía dejar de pensar en el pañal ¿Por qué no puedo sacarlo de mi cabeza? ¿Que pasa conmigo?Traté de parar pero no pude. De repente me di cuenta de a dónde iban mis pensamientos.
"¡Prueba uno!" Mi mente me gritó.
Sabía que era la única forma de sacarlo de mi cabeza, así que, de mala gana, me puse de pie y me volví hacia las escaleras, caminé en silencio hacia ellos como si tuviera que escabullirme. Lentamente, subí los escalones con mi botella en mano.
Cuando llegué a la cima, aproximadamente cinco minutos después de haber comenzado, mis ojos se encontraron con la puerta de Sarah. Extendí la mano hacia la perilla y gire fácilmente. Entré en la habitación oscura y encendí la pantalla de mi teléfono para usarla como una lámpara.
"¿Dónde están?" Me susurré a mí mismo mientras buscaba los pañales de Sarah.
Después de unos minutos de búsqueda, encontré un paquete abierto, saqué uno y lo inspeccioné, era rosa y tenía una Cenicienta en un lado y el otro lado tenía una tiara.
Mis pensamientos se volvieron locos pero rápidamente los extinguí. Salí de la habitación sosteniendo el pañal.
Entré en el baño y cerré la puerta detrás de mí con cautela. Una vez más, examiné el "artefacto" rosa posado en mi mano. Era muy suave y parecía demasiado pequeño, pero mi cuerpo también era pequeño.
Abrí el pañal y me acosté, levanté mis piernas y deslicé el pañal debajo de mí, finalmente lo levanté y pegue las cintas.
"¡encaja!" Pensé con una ligera sonrisa en mi rostro. Fue muy ... satisfactorio.
Me quedé ahí acostado solo con un pañal y una camiseta por un minuto, me puse los pantalones y bajé las escaleras. Me senté en el sofá y miré la botella vacía, mis ojos rápidamente fijaron su vista en la nevera.
Este iba a ser un fin de semana divertido.
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Espero que les haya gustado leerlo como para mí traducir este gran capítulo.
Recuerden que tengo otras 2 historias activas
No olviden dejar su ⭐ y también seguirmeLos amooo graciaaass
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Diapered weekend
Teen FictionDiapered weekend Fin de semana en pañales Alex, un niño de 16 años, trabaja cuidando niños para sus vecinos. Cuando lo llaman para cubrir un fin de semana, descubre un mundo completamente nuevo. ~~~~~~~~~~~~ Holaaa, nueva traducción, espero la dis...