esclavo por elección - riren

primer encuentro

holis, bueno empecemos espero les guste :3 

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Capítulo 1: "Mejor morir luchando por la libertad que ser un prisionero todos los días de tu vida." (Bob Marley)

"Cuando era recién un niño de 10 años mis padres murieron, nosotros formábamos parte de una revolución pero nadie tenía fe en mí, un día de estos estaba decidido que demostraría que soy capaz de hacerlo, acabaré con todo...."

-pasado seis años, en un esplendoroso agosto, se encontraba un castaño ojiverde viendo el cielo, el cual le ofrecía tintes de azul incomparable mientras derramaba nubecillas de oro, ya por el sur flotaba aun las nieblas, dichosos los ojos vivaces que contemplaban cada rincón oculto de su alrededor, el abrí de las gazanias* era por la estrella reluciente que aparecía por el oeste, el viento soplaba haciendo que la  jacaranda*, que cubría con su sombra al castaño, moviera sus hojas y con ello el pelo del muchacho, el canto del cenzontle* ,era la sinfonía que disfrutabas con los ojos cerrados, mudo ante tal belleza y paz estaba el joven de ya 16 años mirando el horizonte, descansaba recostado en el suelo al lado de las raíces, mucho no duro eso pues una voz gruesa lo llamó, otro joven alto, rubio con barba como el astro saliente en ese momento, de buen cuerpo y unas gafas redondas que cubrían sus ojos, se acercaba al castaño, al cual se lo llevó de la mano, durante el camino tuvieron que meterse en las alcantarillas, un lugar pequeño y maloliente al llegar a si a su destino, eran las ratas de la ciudad, al llegar dejó al castaño en su habitación y salió pero antes-

Eren escúchame no puedes salir así, si te encuentran o saben quién eres el plan de la liberación no serviría -el castaño sabía eso perfectamente y no discutiría más con su hermano, solo se limitó a sentarse en el borde de su cama ya gastada y mirar el techo blanco –

Lose no lo volveré a hacer -hay estaba la voz monótona, cuando el castaño volvía a ese lugar todo su brillo desaparecía, el brillo de sus ojos verdes desaparecía, pero ese día dejaría pasar todos los sermones que le dieran ya que tenía pensado dar un paseo por la ciudad con su mejor amigo. Pasado el mediodía tocó la puerta un chico de cabellos amarillos con el rey astro que estaba en la cúspide, contextura delgada y dueño de unos ojos lindos de mirar cuál infinito azul zafiro, era Armin-

Te demoraste en venir –contestó abriendo la puerta de madera para dar pase al rubio-

No es tan fácil conseguir disfraces pero sigo diciendo que es una mala idea –apretando más la bolsa y pasando-

Claro que no –cerró la puerta y le arrebató la bolsa, rápidamente tomo la ropa y se la puso-

No soy quien para detenerte y si lo intentara no me harías caso –imito la acción de su amigo-

-ambos chicos salieron a escondidas y pasaron varios callejones para llegar a un pequeño suburbio, el castaño tenía el brillo en su mirada y una amplia sonrisa que adornaba su rostro, mientras corría por las calles, pasajes y parques, era algo que para los de su clase era difícil de acceder, tomó asiento en un parque, tenía al lado de las bancas Naranjos recortados en cilindro, en cada esquina del parque que era de forma cuadrada Ficus australis* más alejado había una pileta grande casi ocultado por Lagunaria* , todo el parque estaba cubierto por arbustos y tenían una cancha de futbol cerca de la entrada, el castaño entro y se sentó en una banca para entablar una charla con su rubio amigo, todo era normal pero de pronto se escuchó el llanto de un bebé, lo cual llamo su atención y se dirigió hay, casi por el centro del parque junto con la pilita de mármol había una mujer de rodillas protegiendo a su criatura y al lado de ella unos hombres de aspecto intimidante y bien uniformados, la razón de su discusión la desconocía el castaño, pero era claro que no se quedaría con los brazos cruzados por lo que intervino y aunque el rubio lo intentara detener igual fue y se interpuso, poco le duró eso porque lo golpearon pero aun así seguía volviéndose a parar, fue en ese momento cuando un carro negro de lunas polarizadas se detuvo y de este bajo un azabache, de baja estatura, peinado militar; usaba un traje Classic fit* de color negro y tenía una mirada penetrante, se acercó a ellos, los hombres que estaban ahí se agacharon en señal de respeto, lo que dejo en claro que era alguien importante, aun así al castaño eso no le importaba y miraba a la señora quien por suerte solo había recibido una golpiza al mirarla más de cerca pudo notar por sus ropas que era de su misma clase, eso le hizo hervir la sangre; el azabache era seguido por 2 guardaespaldas y al estar cerca miro todo el panorama, para al fin hablar-