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ㅡ ¿Sana? ㅡpreguntaba la morena mientras su respiración aumentaba debido a los nervios que recorrían su cuerpo. ㅡ ¿Estas aquí? ㅡsus ojos no paraba de recorrer la habitación iluminada por las tenues luces navideñas en busca de la chica desconocida. ㅡ Tengo un regalo para ti, no te conozco demasiado bien pero espero que te guste... es un paquete de hojas de varios colores, un peluche y algunas otras cosas. Sabes tuve que sobornar a una enfermera para que pudiera ingresarloㅡ comentaba entre pequeñas risas.
ㅡ ¡¡Chewy-ah!!
Antes de haber volteado su cabeza en busca de la chica alguien había tomado su cuerpo por detrás y estaba presionando para que no girará. Ella podía sentirla, sus manos eran pequeñas y delicadas, calientes y reconfortantes sobre su piel.
Quería voltear y mirarla a esos ojos que aseguraba que eran hermosos, pero no debía, ella sabía que aún no podía hacerlo pero necesitaba hacerlo ahí mismo.
ㅡ Por favor, cierra tus ojos.
Hecho.
ㅡ Chewy-ah se ha puesto más bonita que antes. Gracias por los regalos, los tendré siempre conmigo.
ㅡ Sana. ㅡahí adentrándose a su curiosidad y actuando con ella.
ㅡ ¿Qué pasa?
ㅡ¿Puedo verte?
ㅡMuy pronto lo harás Chou, creo que no es el momento.
