▒ꦿ֘🎭ི͙۪۪۫۫༅𝖊𝖓𝖈𝖆𝖕𝖚𝖈𝖍𝖆𝖉𝖆 𝖈𝖚𝖑𝖎𝖆𖥾ੈ♡‧₊˚

⚘ྂ꙰ᩬ⵿⃝˖❝𝕷𝖆 𝖉𝖊𝖗𝖗𝖔𝖙𝖆 𝖉𝖊 𝖑𝖆 𝖕𝖗𝖊𝖘𝖎𝖉𝖊𝖓𝖈𝖎𝖆❞🥀ꜛི༘♡̬̬྆͡

╭ ❜› ೃ╰♯݊ᴄᴀᴘíᴛᴜʟo 1

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Escuchaba el despertador de manera lejana como si aquello no influyera en lo más mínimo, me agradaba no preocuparme ya que de por sí yo era muy preocupón según mí mamá, amigos y familia en general, analizaba todo una y otra vez, no era tan fácil de comprender y a veces entendía el porqué la gente no se llevaba muy bien conmigo, era muy cuadrado.

Conté hasta 10 segundos antes que entrará mi hermano mayor, el Gustavo, a casi darle un combo a mi celular, el loco ya no estudiaba y estaba en un año sabático deciendo que haría con su vida, mis papás eran personas muy pácificas, nuncas nos precionaban con ninguna carrera aunque yo sabía que mi papá quería que estudiaramos algo con empresas ya que él era dueño de una y obviamente, le gustaría que alguno de nosotros la maneje, por mi parte sonará ambicioso pero, me encanta la empresa de mi papá, la adoro, es mi sueño lograr trabajar en ella y crear proyectos en esta, aunque él es tan tranquilo junto a mi madre que jamás nos han dicho que quieren que estudiemos, bueno, si es que queremos, mamá siempre a dicho que si no hacemos nada ellos nos darían dinero, aunque me parecía muy rídiculo vivir como un holgazan.

─ ¿Podis callar tu weá, Cristián? Hay un ser humano con caña aquí, ¿Sí? ─ Dijo somnoliento el pelicastaño para después desaparecer de mi habitación, yo la apagué al instante para sentarme en mi cama, hoy entraba a tercero medio en el liceo, me faltaba poco para ir a la Universidad, había escogido científico como electivo, ya que tenía matemáticas, la única weá para lo que soy bueno.

Me incorporé con tranquilidad y es que yo de weón no más que me levantó a las seis de la mañana y entro a las ocho un cuarto, me gustaba bañarme por la mañana así que eso iba a hacer y era más que obvio si era el primer día de clases de 2019, el último año de la década, estaba flasheando. Caminé a la puerta de mi baño personal junto a mi uniforme escolar, me mire al espejo, tenía el cabello desordenado y mis ojos estaban muy claros, sonreí por lo tonto que me veía por las mañanas. Me quite el pijama y me dedique a bañarme, saldría en menos de 10 minutos y escuché el auto de mi papá arrancar, hombre de negocios y de seguro pasaría a dejar a mi madre a su trabajo, ella era dermatologa y una muy buena.

Salí de la ducha en el vapor comos si fuera un alien para después secarme con la toalla, me empecé a vestir antes que me encontrara el frío de marzo, de seguro el Deivid, mi primo no iría, el idiota había nacido el 5 de marzo, o sea hoy día y por lo que escuché ayer tiró la casa por la ventana en un súper carrete, al cuál no fui porque debía estar sano para hoy, siquiera por hoy día. Después de mirarme con mi uniforme escolar, me lavé los dientes, me coloque crema y al final mi bloqueador solar, siempre hay que usarlo, los rayos de sol están muy fuertes, como mi mirada, bebé.

Salí del baño y miré la hora, eran las 6:45, estaba muy bien con el tiempo, tomé mi mochila para salir de mi habitación y bajar por la gran escalera, pasé por el salón principal, la sala de estar y al lado de la bilioteca, la cocina, mi lugar preferido, era blanca, una gran cocina americana de la cuál la señora Carmen, o como yo le digo mi ñaña, adoraba.

Era mi nana desde que tengo memoria y eso que tengo 16 años, cocina como los angeles junto a su hija y su nieta, las tres trabajan en esta casa y se encargan de tenerla tan bonita, viven con nosotros, son parte de nuestra familia y por mi parte yo las aprecio mucho, miré la mesa del comedor la cuál ya estaba completamente ordenada para el desayuno, ví pasar a la Maca, la nieta de mi ñaña, tenía más o menos la edad del Gustavo, mi hermano mayor.