VI

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— Vuelve a casa— Escuchó a Daryl decir.

— No— El líder, su hijo y su novia salieron de su casa, algunas otras personas que no conocía hicieron lo mismo. Las puertas se abrieron y un hombre con bate, sonriendo cínicamente, entró.

— Quédate detrás de mi— Le ordeno el mayor, tomándola de la mano y estirándola haciendo quedar detrás de él.

— Quiero ver.

— Puedes ver desde detrás de mi. 

— Rick— Dijo el hombre desconocido pasando por un lado del nombrado— Carl— Alzó las cejas mientras miraba al ojiazul— Daryl, hombre, mi Daryl— Tomó la mandíbula de Daryl sonriendo— ¿Quién es esta chica bonita?— Se acercó a la pelirroja acariciando sus mejillas.

— Basta, fue suficiente— Habló Daryl intentando quitar sus manos de las mejillas de la chica— ¡Basta!— Lo empujó levemente, varias armas se posaron frente y detrás del hombre y la chica.

— ¿Por qué me empujas? Eres mi favorito, Daryl. No me traiciones.

— Ella...— Inhalo hondo— Es mi-mi esposa— La pelirroja lo miró sorprendida, en realidad, todos lo miraron sorprendidos.

— ¿Tu esposa? ¿eres un pedófilo o algo así?— Apuntó con el bate a la ojiverde, levantando su barbilla con este— Que bonita esposa. ¿Cuál es tu nombre, dulzura?— La chica miró al hombre que la defendía, pidiendo autorización. 

No debía de pedirla, pero al ver la manera en que se puso Daryl, se puso nerviosa

— Yo...— Sintió sus piernas empezar a temblar— Me llamó Eliza— Con sus manos en su espalda, comenzó a rascar sus muñecas un poco, se sentía... acalorada ante la mirada del hombre desconocido.

— Encantado— Alzó las cejas— Soy Negan— Extendió su mano, esperando a la de la chica, la cual llegó en unos segundos. El hombre, ahora llamado Negan, besó el dorso de su mano. Todos los presentes miraban expectantes la escena— Tu cabello es hermoso— Soltó su mano, golpeo despacio su hombro— Entonces, ¿qué tienes para mi, Rick?— Preguntó alejándose de ella. Las armas dejaron de apuntarle a Daryl y este corrió a ocultar a la chica de nuevo detrás de él.

— No te alejes de mi— Susurró mirándola por encima del hombro.



En menos de dos horas el hombre invasivo se fue, Eliza no se despego de Daryl por nada. Sus piernas flaqueaban cuando Negan se le acercaba, le daba miedo, imponía como nadie tenía una idea. Y antes de irse, se despidió con un beso en la mejilla de la chica. Las personas la miraban un poco extraño.

Había cautivado al hombre más malvado y cruel del mundo. 

— ¿Quién es él?— Le preguntó a Daryl.

—  Era Negan. No te acerques a él, es un hombre malo. Mato a dos de los nuestros, dejó a una mujer embarazada sin esposo, no es una buena persona. Me llevó con él un par de semanas, es un infierno estar en el mismo lugar que él.

— ¿Por qué me defendiste?— Preguntó insegura.

— Porque lo conozco, si no lo hubiera hecho probablemente te hubiera llevado con él. Te haría una de sus muchas esposas. 

— ¿Muchas?— Miró a sus botas.

— Sí, tiene un montón, todas en una sola habitación, encerradas— El hombre acarició su sien— Nunca estés con él a solas, quien sabe que pueda hacerte.

— Hey— Escucharon al líder acercándose junto a su hijo— ¿Están bien?— Preguntó parándose junto a ellos.

— Sí— Respondió la chica— Estamos bien, mi esposo y yo— Bromeó, Daryl sonrió mirándola mientras Rick solo alzó las cejas.

— Bien, eso es bueno. Vamos Daryl, tenemos que juntarnos— Ambos hombres se alejaron entrando a alguna casa, dejando a los chicos solos.

— Oye, yo... lo siento, de verdad— Se disculpó el chico.

— No me interesan tus disculpas. Eres un maldito.









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