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*NARRA ERICK*

Sus manos acariciaban mi piel una y otra vez, como si su vida dependiera de eso,sus labios no dejaban de moverse sobre los míos y nuestras lenguas no querían parar su guerra, en la cual, Chris iba ganando por lejos.

Sentí la cama en mi espalda, haciéndome saber que ya estábamos en nuestro lugar. Él se posicionó sobre mí, mientras se quitaba toda la ropa que le incomodaba. Estaba de más decir que a estas alturas mi cuerpo ya estaba por completo desnudo. Levante levemente mi cabeza y le mordí su pecho, para luego subir a su cuello y dar leves mordidas.

Nuestros gemidos iban en aumento con cada mordida que él le hacía a mi cuello. Sus manos bajaron por todo mi torso, hasta llegar a mi entrepierna y empezar a masajear logrando que mi ereccion vaya en aumento y que lo necesite dentro mío de una vez.

-Y-ya hazlo - dije mordiendome el labio

-Aún no bebe - me respondió con una so risa para luego empezar a bajar hacia mi entrepierna. Sus labios se adueñaron de mis muslos succionandolos como su fuera un chupetin. Su lengua recorrió toda la trayectoria hacia mí pene para que este terminará dentro de su boca.

-Dios!! - gemi arrugando las sábanas con mis manos. Chris subía y bajaba sobre toda mi longitud haciendo que su lengua debe pequeños roces - si sigues así me voy a venir -

-Y vas a ser castigado-dijo juguetón - querés que te castigue bebe? - me mordió levemente la punta haciendo que la excitacion aparezca - mojalos- meto los dedos que me aproximó para dejar una gran cantidad de saliva en ellos.

Sobresalte al sentir sus dedos en mi interior salir y entrar en un lento movimiento pero empezaron a aumentar su velocidad cuando Chris empezó a subir y a bajar más rápido

-Chris ya me ven...-no pude terminar porque tiritas finas y blancas ya salieron disparadas. Chris levantó la cabeza para que mire como se lo trago.

Se lanzó sobre mí y me besó con locura para excitarme, rozaba su dura verga con la mía que estaba despertando se otra vez. Sin separarnos, introdujo su verga en mi haciendo leves penetraciones para que me vuelva acostumbrar a ella.
Mordí nuevamente su cuello y empezó a gemir fuerte una vez más.

Sus brazos se posicionaron en cada lado de mi cuerpo para poder sostenerse de algún lado. Sus penetraciones aumentaban de velocidad haciendo que mis gemidos salgan sin vergüenza alguna.

Nuestras miradas se conectaron y creo que no había otra cosa más excita te que eso. Trajo sus labios hacia los míos mientras que sus penetraciones aumentaban. El cuarto era un lio de gemidos y el calor nos estaba sofocando. Ambos cuerpos transpira dos, ambos cuerpos con ganas de mas, ambos cuerpos que se estaban demostrando cuanto se extrañaban.

Hice que se acostar a para poder tomar el control y subirme sobre él. Empecé a dar pequeños saltitos haciendo que su polla salga y vuelva a entrar dándonos placer a ambos.

-Mhg pequeño - dijo soltando un gélido mientras que sus manos me apretaba fuerte la cadera para ayudarme.

Lleve mis manos a sus piernas para sostenerme y acelere la velocidad de los saltos logrando que la satisfacción llegue a él.

-Más rápido bebé - dijo y no me bastó pensarlo dos veces. Subía y bajaba como nunca. Ambos soltaba os los gemido que tanto extrañabamos escuchar.

No se en qué momento terminé debajo de él pero lo único que sabía, que estaba por venir. Nunca supe cómo Chris podía ser capaz de aguantar tanto pero es el mejor sexo que tuve en mi vida

-Mírame - dijo de pronto haciendo que toda mi atención vaya a él. Su mirada era tan profunda que me perdía en ella. Sus oenetraciones había disminuido pero tenía la misma intencidad logrando llegar a mi punto - te amo-

-Te amo Chris - dije antes de unir nuestro labios y sintiendo las oenetraciones de Chris quien cayó rendido sobre mi al llegar al orgasmo. Ambos acabamos a la misma vez.

-Eso fue increíble - dije apoyándome en su pecho

-Tu eres increíble - dijo mientras me abrazaba a él

-De verdad dices que acepte el trabajo? - dije mirando hacia un punto cualquiera mientras sentía sus caricias en mi espalda baja.

-Si la fotografía es algo que te hace feliz y te gusta, yo no le veo el por qué decirle que no - me miró - Erick, no te preocupes por mi. Podremos estar a miles de kilómetros de distancia pero siempre voy a estar ahí para ti-

-Me dijiste que vendrías conmigo - dije separandome un poco de él

-Eso si es que quieres que yo esté ahí - dijo atrayendome otra vez hacia él - pequeño, como dije antes, te voy a seguir hasta el fin del mundo si es necesario -

-Eso quiero y eso es lo que necesito - dije llevando mis labios hacia los suyos - te necesito cerca mio Chris -

Una Promesa Es Una Promesa - Chriserick Story Donde viven las historias. Descúbrelo ahora