⸸Me Enamore De Un Demonio⸸ Alastor y tú.

Primera Nevada.

Últimamente Alastor había estado muy callado, no hablaba mucho y no hacia sus bromas con fechas importantes como la segunda guerra mundial. Aunque técnicamente ya no había venido a verme en un largo tiempo, bueno, para cualquier persona es poco, pero para mí es mucho considerando que venía a verme todos los días en la noche, en la mañana y en la tarde.

-Señorita ____, si no le interesa mi clase le ruego que se retire. -negue con la cabeza y suspire tratando de poner atención en la clase.

El timbre sonó anunciando que nos íbamos a casa, tome mis cosas y camine a la salida pero mis amigos me tomaron por el hombro.

-¿Qué pasa ____? Ya nos has estado con nosotros. -pregunto Lisa.

-Lo siento, es sólo que he estado un poco ocupada. -les di una sonrisa y volví a mi camino a casa. Mis padres seguían fuera y faltaban 2 días para que llegarán.

Abrí la puerta y me encontré a Alastor sentado leyendo la Biblia.

-Esto es muy interesante, según aquí, una chica mordió una manzana y eso fue tremendamente grave, ¿sí como una manzana dios me matará? -pregunto acomodando su lente.

-En primera, tu ya estás muerto, y en segunda. No hay segunda pero no te matarían por comer una manzana. -abrí el refrigerador y saque jugo de uva.

-____ tenemos que hablar. -juro que ví que por un momento su sonrisa caía un poco.

-¿Qué ocurre? -pregunte tratando de sonar desinteresada.

-Pues verás. Ya que has ido al infierno y Willy Wonka se enteró, ahora está exigiendo que deje de verte porque según el me estoy "enamorando" de tí, es curioso porque yo perdí esa habilidad desde hace cientos de años. -lo mire indiferente y tome un poco más de jugo.

-¿Y qué harás? -pregunte.

-¿Qué más puedo hacer? Obviamente no lo obedecere. -reí y rodé los ojos.

-Vamos, tengo hambre. -lo tome de la mano y salimos de casa.

-Oh, cierto. Tu te quedas en casa. -me miró confundido.

-Tienes cuernos y eres color rojo. -dije obvia.

-Eso se puede arreglar, querida. -trono los dedos y se convirtió en un atractivo castaño.

-Wow, ¿así eras cuando vivías? Seguro tenías a todas detrás de tí. -susurre cerrando la puerta.

-La verdad...no. Nunca pude demostrarles cuanto las amaba así que me tomaron de un hombre que no sabe amar. -lo mire y sonreí.

-¿Alguna vez les dijiste que las amabas?

-Nunca, pero pensé que era mejor demostrarlo con hechos y no con palabras. -toque mi pecho y sentí como mi corazón salía.

-Que profundo, pero tienes razón. Es mejor. -comenzamos a caminar hacia el pueblo donde abrimos una cafetería y entramos.

-Me da un pastel de chocolate y una malteada por favor. ¿Tu qué vaz a querer? -pregunte a Alastor.

-Por ahora nada, gracias. -asentí y nos fuimos a sentar.

-Y bueno, cuéntame de tí.

๑

HACE 1278 AÑOS EN EL INFIERNO.

-Mamá, no puedo dormir. -dijo una hermosa nena con cabello rubio, a lo que su mamá la miró con amor.

-¿Quieres que te cuente una historia? -pregunto la hermosa dama.

-¡Sí! -respondio entusiasmada su hija. La tomo de la cintura y la sentó en sus piernas, mientras veían la cuidad empezó su relato.

-Hace mucho tiempo, el creador decidió que sería bueno hacer dos almas gemelas, dos almas puras que estarían por siempre. Las almas humanas tienen 20 vidas, cuando mueren siguen en su segunda vida y así sucesivamente. Al principio todo iba bien, en su primera vida se conocieron y se amaron, así la segunda vida, y la tercera, hasta que la cuarta ocurrió algo que dios no esperaba. Ellos dos no se conocieron. El hombre se hizo malo y la mujer nunca se fijaría en alguien así. Cuando el hombre murió, no volvió a la vida como su mujer destinada, al contrario, fue castigado quedándose en el infierno para cumplir su condena. Por cosas del destino, la mujer volvió a ver al hombre, ellos no sabían nada de sus vidas pasadas, pero con el tiempo todo se hacía más hermoso a su alrededor, pero un demonio no puede estar con un ángel, así que los separaron, y nunca más volvieron a verse, con el dolor de su corazón el hombre le dijo a la mujer "regresaré como la primera nevada" pero el nunca regreso. Los siglos pasaron y al ser almas destinadas se volvieron a conocer, casi de la misma forma que siempre y sin recordar nada. ¿Crees que está vez logren quedarse juntos? -pregunto la dama a su hija acariciando su cabello.

-¡Sí! ¡Porque se aman! -respondio emocionada. Unos gritos interrumpieron lo que la dama iba a decir.

-Sabemos que ellos se terminarán enamorando. Aunque lo niegues ricitos. No puedo permitirlo, una tipeja con un gran demonio como él. Yo lo quiero como yerno, podría ser uno muy bueno.

-¿Cómo crees que me siento? Un demonio con uno de mis ángeles es inaceptable. Tenemos que separarlos antes de que sea demaciado tarde, o antes de que el la bese, sí lo hace de quedarán Unidos por siempre y no habrá nada ni nadie que los separe.

-Pero tu querías hacer una pareja perfecta, ¿qué no te basto con Adán? Tremenda mierda que se armó.

Al terminar la discusión los dos salieron enojados y la hermosa rubia nego.

-Jaja, va a ser tan difícil que se den cuenta de que esos dos están destinados a estar juntos. -rodo los ojos y se fue contoneando las caderas.