fideos con salsa

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abril 8, 2019.

Chan se volteó levemente hacia adelante, para poder observar a su nuevo compañero de clases, había llegado hace unas horas y tenía toda la atención de las chicas, bueno, había que mencionar que era guapo.
Wen JunHui era su nombre, por el apellido supuso que era de orígen chino, y fue confirmado cuando le escucho hablar al presentarse, no hablaba del todo bien, pero algo se le entendía.

Le dio pena el hecho de que todos se le quedaban mirando, nadie se atrevió a acercarse e intentar sacar conversación con el chino, así que fue el primero en tomar charla con el azabache.

ㅡ Hey, JunHui. ㅡ Susurré, y en un instante el chino se giró en la dirección del menor y respondió un simple ㅡ Oh, Hola... Tú. ㅡ Comento con una mueca.

ㅡ Soy Lee Chan, un gusto. ㅡ Mostró sus dientes en una linda sonrisa a lo que Jun respondió con un "Igual."

Luego empezaron las malditas clases de Geografía, hablando sobre algo que a Chan le chupaba un huevo, pero tenía que aprobar de todas formas la materia, si no iba a vivir debajo de un puente.
Pasado el tiempo, el timbre vibró provocando el sonido del cielo, "Hora del almuerzo"

Chan se levantó con entusiasmo y fue a la cafetería del colegio, el dia de hoy estaban dando fideos con salsa, una total delicia.
Un feliz Chan caminaba con una bandeja de fideos hacia una mesa libre, pero algo sucedió, alguien choco con el, haciendo que esos riquísimos fideos acabasen en su remera blanca.
Casi se larga a llorar, era su comida favorita y ahora estaba toda esparcida por su ropa. El menor elevó la vista para ver quién había sido culpable de esto, y sus ojos chocaron con los de Jun.

ㅡ Discúlpame Chan, iba distraído, por dios, lo siento tanto, dejame prestarte una camiseta ㅡ El mayor miro apenado hacia Chan esperando una respuesta.

ㅡ No te preocupes, solo es una pequeña mancha. ㅡ Comento con una sonrisa falsa el menor, tenía unas ganas de llorar.

ㅡNo, por favor, insisto. Encima se acaban las clases ya, vayamos a mi casa, esta cerca.
Chan asintió sin poder negarse y le siguió el paso a Jun, al total de unos minutos llegaron a la casa del chino, la cual no era gran cosa, era una simple casa en el vecindario de al lado del colegio donde iban.

Entro con timidez y observo la casa, por dentro era muy acogedora y cálida, mientras miraba toda la casa con interés, la mirada del rubio se cruzo con un señor adulto de cara seria, por lo que se asusto un poco, tenía mirada matadora.

ㅡ Oh, hola señor. ㅡ hizo una reverencia de 90 grados. Jun le dirigió una sonrisa al señor, supuso que era su padre.

El señor cambio el rostro al ver la sonrisa de Jun, y los saludo amenamente con una pequeña reverencia.
Jun le comento que había manchado la remera del rubio, y que le prestaría una, por lo cual el padre salió del camino y dijo que les vería después.
Entro a la habitación del castaño y se sentó en la cama del otro, Jun le lanzo una camiseta color azul marino, y apunto una puerta de color bordo, se dirigió hasta allí, era un pequeño baño con espejo, vio su rostro, se veía un tanto muerto por las ojeras. Salio del baño con una diminuta sonrisa dirigida al mayor, que al ver como le quedaba la playera, se rió un poco. ( por que le sentaba enorme. )

ㅡ Te la devolveré mañana limpia, ¿esta bien? ㅡ A lo que Jun asintió sin darle interés, acompaño a el menor hacía la puerta de roble de esa pequeña casa y se despidió diciendo que le vería mañana en el colegio.

Chan arribo su casa en unas horas, y directamente se echo en la cama totalmente cansado, debía de hacer tarea y cocinarse algo para cenar, ya que sus padres casi nunca estaban en su casa, el rubio aprendió a manejarse solo con el dinero que le dejaban sus progenitores.

Luego de cenar, mientras realizaba su tarea, se dio cuenta de que tenía puesta aún la remera de Jun, liberaba un aroma bastante hipnotizante, olor a él. Se detuvo y se golpeo mentalmente por pensar esas cosas, no podía razonar cosas así de un hombre.

Después de lavarla, la coloco en el patio para que se secara. Eran las 2 de la mañana, fue rápido a su habitación para tratar de dormir, pero no podia, seguia pensando en el olor que soltaba esa camiseta, realmente olia muy bien, con eso en mente se termino durmiendo a las 4 de la madrugada.

El sol se colo entre las cortinas blancas de la habitación del menor, le dolía un tanto el estómago que le empezo a gruñir, creyó que sería hambre, así que luego de darse una ducha, fue a hacerse algo de desayunar. Se fijo la hora, 9 : 48 de la mañana, tenía clases a las 10 : 15.
Salio a buscar su mochila mas rápido que flash, y se dirigió hacia la parada de autobuses, justo llegaba uno, subió y pago con su tarjeta estudiantil y tomo asiento.

El menor se despertó por completo y se dió cuenta de que se había olvidado la remera de jun, suspiro un tanto cansado y bajo del autobus, corrio unas cuadras y logro entrar justo a clases. Tenían historia, debían de hacer un trabajo práctico oral para aprobar la materia, pero.. Un trabajo práctico oral de dos.

Chan miró rápidamente hacia atrás, donde se encontraba su amigo San para preguntarle de hacerlo, pero vio que ya tenía compañero. El profesor dijo que todos se callaran, que el iba a escoger las parejas. A chan no le gustaban los trabajos en equipo, tenía mala experiencia sobre eso, por que el terminaba haciendo todo solo.

Le había tocado con Jun un tema que le sentaba bien.

Sonó el timbre de descanzo y Jun se acercó a Chan, se sentó en el pupitre y le sonrió. ㅡ Que coincidencia, ¿no? ㅡ El menor asintió un tanto nervioso por la presencia del chino.

ㅡ ¿Que dias estas desocupado, Chan?

ㅡ Todos los dias, ¿Qué tal si nos juntamos ya hoy y quedamos libres después?

ㅡ Bueno, iremos a tu casa después de clases, por que en mi casa no se puede hoy, me voy. ㅡ saludo y se fue para afuera del salón.

Chan pensó en quien se creía para decidir de ir a su casa, pero bueno, debian de hacer ese trabajo, y la verdad que no le quería ver mucho, por el problema de anoche.

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