camisetas, JUNO

sandías

Chan se encontraba esperando a Jun en la puerta del colegio hace unos 30 minutos.

Se estaba empezando a molestar, ¿donde carajos estaba el chico? se iría a su casa si no aparecia en 2 minutos. Y hablando del rey de roma, apareció con una muchacha de piernas delgadas y rostro sereno.
Algo en su interior rugió, era por qué no había almorzado, se olvidó de traer su billetera con el dinero para poder pagar el almuerzo. ¿Creyeron que era por celos? Quizás, no sé sabe.

Jun se despidió de la chica con una sonrisa y miró hacía Dino.

ㅡ Lamento la demora, la chica de recién me había invitado a salir con su grupo de amigos, pero recordé que debía ir contigo para hacer el trabajo práctico.

ㅡ No pasa nada, ¿vamos? ㅡ apuntó con uno de sus dedos a la salida.

ㅡ Claro.

Empezaron a caminar rumbo a la casa de Chan, y era bastante incómodo, por qué ninguno formulaba una palabra.
Hasta que Jun decidió hablar al recordar algo.

ㅡ ¿Tienes mi camiseta?

ㅡ Oh sí, lo siento. Había olvidado por completo traerla, es que dormí tarde.

ㅡ ¿Por qué dormiste tarde?

Chan no podía decirle, "Me quede pensando en el olor que desprendía tu camiseta, normal."

ㅡ Insomnio. ㅡ Artículo rápido.

ㅡ ¿No deberías tomar píldoras?

ㅡ Se me acabaron. ㅡ Mintió.

Y volvió ese silencio incómodo, pero por suerte ya habían llegado a la casa del menor, entraron y lo primero que Jun notó, fue que no había nadie, no había ni un solo ruido, muy silencioso.

ㅡ ¿Tus padres? ㅡ Jun preguntó con curiosidad.

ㅡ De viaje, no están casi en casa.

ㅡ Perdón por preguntar.

ㅡ Basta de disculparte, Jun.

Asintió siguiendo a Chan, que subía las escaleras y se adentró en la habitación del pequeño. Se sentó en la silla del ordenador y comenzó a sacar las cosas necesarias para poder realizar ese trabajo y Chan lo imitó.

ㅡ Bueno, nuestro tema trata sobre la mitología griega, soy un experto en estos casos, ya que me gustan bastante los libros mitológicos. ㅡ Comentó Chan con una hoja y un lapicero.

Jun se levantó y se acercó a Chan, quedando muy cerca de su rostro.
Chan se quedó plasmado, ¿qué estaba haciendo Jun? Se alejó y lo miró nervioso.

ㅡ Tenías una pestaña en la mejilla. ㅡ dijo Jun mientras con sus dedos rozó la piel de Chan para poder quitarle la pestaña, el menor se sonrojó violentamente. ㅡ Pide un deseo y sopla. ㅡ sonrió distraídamente.

Chan pidió un deseo en su cabeza, y sopló.

[ ... ]

ㅡ Estoy cansado, ¿podemos descansar? ㅡ A Jun le dolía la cabeza de tanto pensar, mientras que a Chan le dolían los dedos de tanto escribir.

ㅡ ¿Quieres comer sandía?

ㅡ Claro.

Dino bajó las escaleras dejando sólo a Jun en su habitación, busco la sandía en el refrigerador, y lo cortó en pedazos triangulares. Mientras tanto Jun paseó por el cuarto de su compañero de clase, vió varias fotos, pero una le llamo bastante la atención.

Era Chan con un chico de cabellos blancos tomados de la mano en pleno invierno, por qué veía nieve detrás de ellos.

Dino entró a la habitación con un plato lleno de sandía, habían como seis pedazos. Los colocó en la mesita y recogió uno, empezando a comerlo.

ㅡ ¿Eres gay? ㅡ salió de la nada por parte de Jun.

Nuestro pequeño Chan se atragantó con lo que comía y tosió un poco fuerte.

ㅡ ¿Por qué la pregunta?

ㅡ Vi una de tus imágenes, estas sosteniendo la mano de ese peliblanco.

ㅡ Oh, era mi mejor amigo, eramos muy confianzudos.

ㅡ ¿Era? ㅡ Jun plasmó una mueca medio triste.

ㅡ Murió.

Jun tragó en seco, lo había tomado por sorpresa. ㅡ Lo siento tanto.

ㅡ ¿Qué habíamos dicho de las disculpas? ㅡ Sonrío Chan hacía el otro.

ㅡ ¿Cuál era su nombre? ㅡ Dijo Jun ignorando el hecho de que se disculpaba mucho.

ㅡ Hansol, es americano.

ㅡ Oh, lindo. ㅡ Comió un pedazo de sandía.

ㅡ El trabajo práctico ya esta terminado, solo faltan unos renglones, puedo hacerlo solo luego. ㅡ Dijo Chan.

ㅡ Está bien. Pero, no respondiste mi pregunta.

ㅡ Ah, no. No soy gay. ㅡ Mintió de nuevo.