El Chico Y La Rebelde | Stevinel |

[1] |T u l l e g a d a|

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Estaba dormida, en un sueño tan profundo que no escuché cuando white me llamó desde la cosina, anunciandome la hora de levantarse para el colegio, agh... suspiré con pesadez y tomé la sábana colocándola por todo mi cuerpo tratando de ocultar mi rostro de la luz del sol.

- ¡Darling! -.

Volvió a llamarme pero esta vez me había retirado de un movimiento rápido la sábana de mi, dejando que la estúpida luz del maldito sol lastimara mis ojos.

- Es hora de levantarse, querida llegarás tarde al instituto, de nuevo - Agregó mientras doblaba y acomodaba la sábana en una pequeña repisa de mi habitación.

- Agh - Me quejé tratando de recuperar mi sueño.

- Vamos cariño, tu uniforme está listo el desayuno estará listo en unos minutos así que apresúrate - Avisó antes de salir de él lugar.

Seguía quejándome en mi almohada, tratando de hacer que mi sueño regrese, pero fue estúpido intentar. Con pesadez finalmente me levanté dando un gran bostezo, estirando mi cuerpo a su vez tratando de atrapar un poco de fuerzas por último talle con suavidad uno de mis ojos. Me separé de la cama y quedando a la vista del gran espejo de mi recamara, mierda, soy un desastre, comencé a arreglar mi cabello de la misma manera que lo hago tomé mi maquillaje haciendo algo sencillo, por último tomé mi uniforme y lo arregle a mi gusto.

Finalmente bajé a la cosina en dónde se encontraban white, yellow y blue como siempre white preparó el desayuno que tanto me encanta, yellow siempre está leyendo las noticias en el periódico y blue arreglando cosas de su trabajo.

- Buenos días - Dije antes de sentarme junto a ellas.

- Buenos días querida - Dijeron al unisono.

Recargue mis antebrazos en la mesa dando un gran bostezo, aún tenía sueño, pero no importaba. White me dió mi desayuno comenzando a comerlo.

- Darling - Me había llamado yellow dejando a un lado su periódico a lo que yo sólo respondí con un "¿Mph"?.

- Tenemos algo que contarte querida - Interrogó blue mientras apoyaba su barbilla en las palmas de sus manos plantando su mirada en mi.

Simplemente asentí con la cabeza prestando atención a lo que estaban a punto de decirme mientras terminaba de desayunar.

White inhaló y exhaló para después quitarse el mandil que usa para la cosina.

- Ésto es algo complicado de decir, pero- -.

- ¡Demonios llegaré tarde! - Exclamé al ver la hora en mi celular, terminé rápido de desayunar para después limpiar las pocas migajas que hallan quedado en mi boca, tomé mi mochila y salí corriendo de la cosina.

- Lo siento será para más tarde, ¡adiós! - Grité desde la otra habitación para salir por la puerta principal y correr a la estación del autobús escolar.

Después un par de minutos de tanto correr, finalmente llegué a la estación, justamente dónde Peep me esperaba cada mañana.

- ¡Hola peep! - La llamé a unos cuantos metros de ella, logrando llamar su atención.

- Hola Spini - Respondió - Valla que esta vez estás como flash - Agregó divertida.

- ha-ha muy graciosa chiquilla - Reí.

- ¿Lista para la noche de mañana? - Argumentó mientras jugaba con los cordones de su mochila.

- Más que lista peep - Contesté.