C H A P T E R 2

397 65 20
                                    


Desde que amanece hasta que anochece el corazón palpita, lo cual es obvio de lo contrario estarías muerto, y de vez en cuando Jimin se preguntaba si el corazón de Yoongi realmente latía


🌌

―Jimin...―Yoongi salió de la habitación ya con su uniforme puesto, sus botas lustradas y su cabello bien peina

― ¿Qué? ―Jimin estaba en la cocina preparando un par de sándwiches y dos tés para poder comer junto a su prometido, decir que estaba mal esta de sobra pero el rubio sabía aparentar muy bien.

― ¿Preparaste algo de desayunar? ―El menor asiente y hace un ruidito de afirmación con la boca, sirve los dos sándwiches en la barra de la cocina y deja él te humeante de Yoongi ente esta misma

―Ahí esta...―Regresa a la cocina y prepara una pequeña lonchera para que Yoongi se la lleva para el almuerzo o para cuando le de hambre, sabía que no lo volvería a ver desde ese día hasta bien entrada la noche, así que no cenaría juntos y por cómo iban las cosas tampoco celebrarían su aniversario juntos, ya que era entre semana y no podría verlo ― ¿Vas a pedir permiso?

La pregunta era capciosa, quería ver si Yoongi estaba al tanto de lo que celebrarían dentro de poco días.

―Acabo de llegar, tengo que ponerme al pendiente de muchas cosas, no pediré permiso para una cursilería, Jimin, tengo cosas que hacer, no sé tú.

Y faltaban pocas gotas para que el vaso se derramara, los ojos del rubio picaron al igual que su garganta, el hombre que amaba le acababa de decir que cumplir cinco putos años era una cursilería, pero ¿y que si lo era?, aquí no importaba lo cursi si no cuantos años de estar juntos tenían, años que ambos invirtieron para estar donde estaban ahora, años de lo que Jimin comenzaba a arrepentirse de seguir.

―Sí, tengo cosas que hacer, iba a salir a Tae, solo quería decirte que no me esperaras despierto, tal vez no regrese hasta la mañana siguiente ―Yoongi quien comía su sándwich con algo de apuro miro a Jimin con algo de intriga, aún era su novio y pues lo alteraban ciertas cosas

― ¿Qué harás con él?

Jimin sonrió internamente ante la pregunta de Yoongi y el tono en que lo dijo, había un poco de celos en su timbre

―Me dijo que abrieron un club por su casa, y bueno, como no estarás no me quedare hacer cosas cursis acá, iré a bailar y beber un rato en un tu nombre, Yoon― Debo advertir que Yoongi no era un hombre de jueguecitos, su mirada se oscureció y apretó la mandíbula

―Ósea que mientras yo estaré trabajando, ¿tú te iras a embriagar y bailar con un cualquiera? ―Jimin dejo la lonchera ya empacada sobre el mesón de la cocina, justo en frente de las narices de Yoongi ― Jimin, no es que no quiera venir al puta departamento, ¿entiendes?, tengo trabajo que hacer y más te vale que te encuentre aquí el veinte.

Sin más que decir Yoongi se levantó de del asiento, tomo la lonchera y salió de la casa azotando la puerta de entrada, dejando a Jimin con la cabeza gacha y ojos hechos un mar.

Y no hay que confundirnos, como lo hizo Jimin, no hubo celos por ningún lado en su pregunta solo cansancio y algo de desesperación.







Espero les este gustando...

The Feelings of a Military [EN CURSO]Where stories live. Discover now