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Pasada una hora y con las manos manchadas de queso y tomate por la pizza, sonó el timbre y me levanté de un salto a abrir la puerta. Wonho apareció deslumbrante ante mi, con dos estilistas detrás suya cargando con las preciosas telas que estábamos a punto de probarnos. Enseguida, y obviamente después de lavarnos, este se puso manos a la obra y empezó a tomarnos las medidas para poder retocar los vestidos. Yo me decidí por uno negro apretado con un escote en forma 'V' que hacía entrever mis pechos, me llegaba dos palmos por encima de mis rodillas y estaba decorado con un cinturón de piedras brillantes al igual que había ciertas piedrecitas por la parte superior. Halima en cambio, optó por un vestido color vino corto por delante y largo por detrás, tenía un encaje en la parte superior y era de hombros caídos. Estando todo listo ya no tenía ninguna preocupación.

Halima: ¿no crees que este vestido me hace gorda? -dijo mirándose al espejo.

Yo: Para nada Halima, te queda genial, y ya sabes a quién le va a encantar -dije moviendo las cejas pícaramente haciéndola sonrojar.

Halima: no digas tonterías.

Yo: ¿tonterías? ¡Pero si le vuelves loco! ¿Acaso no ves que se le empina al verte? -A Wonho se le escapó una pequeña risa al escuchar nuestra conversación.

Halima: ¡CLAUDIA! ¡Que a mi no me gusta! -se cubrió la cara con ambas manos y yo me reía porque sabía que el fondo a ella le gustaba o más bien, le ponía. No vamos a mentir, Jimin está como quiere.

Wonho: bueno chicas, mi trabajo aquí ha terminado. -empezó a recoger sus cosas- Mi asistenta me comentó que querrías estilistas para mañana, se pasarán a eso de las 5 de la tarde para peinaros y maquillaros. Luego os paso la factura por email. Yo me voy yendo que tengo varias cosas por hacer. Pasad una buena fiesta chicas -nos dió dos besos en la mejilla en señal de despedida y se fue.

Ya eran las 12 de la noche así que Halima y yo optamos por dormir. Mañana sería un largo día lleno de diversión.

Narra Jungkook:

Hoy era el día, ya estaba pensando en que es lo que le diría a mi padre. No es que se le pueda decir que estoy enamorado de la que fue una de las internas más rebeldes que hemos tenido en años así de un día para otro como si nada. Sobre todo después de todo lo que pasó con mi madre, y tampoco es que quiera causarle algún daño, simplemente quiero ser libre y poder hacer lo que más quiera sin tener que acatar siempre todas sus órdenes como un soldado.

Decidido me levanté de la cama y eché un vistazo a mi alrededor, estaba en mi apartamento y en cada rincón de la casa, la veía a ella. Suspiré y dirigí la mirada al móvil, inmediatamente vi la dirección que me había dado uno de los chicos, así que pensé en pasarme por la zona de manera en la que no pareciera un psicópata. Me vestí y cogí las llaves del coche en dirección a la casa de Halima. No tardé más de 20 minutos en llegar.

Eché un vistazo al navegador para asegurarme de que estaba en el sitio correcto y me asomé por la ventanilla, y ahí estaba ella, apoyada en la barandilla del balcón con una taza en la mano, hablaba animada con Halima e instintivamente salí del coche sin darme cuenta para verla mejor, fue entonces cuando vi como nuestras miradas se cruzaron y volví a meterme en el coche con las manos sudadas de los nervios. No quería que me reconociera, quería darle la sorpresa esta noche, quería decirle que estaba dispuesto a ir a por todas con ella y que enfrentaría a mi padre por ella, porque quería que estuviéramos juntos. Pero a la vez mis ganas de verla me hicieron venir aquí, no me arrepiento.

Arranqué nuevamente y me devolví a mi apartamento para ducharme, comer y después prepararme para esta noche.

Narra Claudia:

Halima: Y tendremos esta zona para las shishas...oye -me pasó la mano por delante de la cara- ¿me estás escuchando?

Yo: si si, es solo que me pareció ver a Jungkook- dije extrañada.

Halima: ¿Que!? ¿!donde?! -Miró hacia los lados y después me miro- yo no veo a nadie.

Yo: no sé, capaz me lo imaginé...bueno da igual. ¿Que decías de las shishas? -sonreí.

Halima: uuuh! -movió las manos enérgicamente- tendremos de varios sabores al igual que de lubricantes -me guiñó el ojo.

Yo: Aaahh ¡cacho sucia! con que era eso, ya sabía que tenías altas ganas de volverte a comer a Jimin!

Halima: ¿!Que!? Nonononononono, bueno si.
Pero igual TÚ TAMBIÉN TE QUIERES COMER A JUNGKOOK Y LO SABES!

Yo: Para que te voy a decir que no si si amiga -ambas nos empezamos a reír a mares. -Pero igualmente dudo que quiera algo conmigo, después de todo, ya me conoces, no voy a cambiar y no se si el estaría dispuesto a intentarlo conmigo tal y como soy.

Halima: A ver Claudia, que tú no tienes por qué perder la esperanza, quien sabe, igual aparece en la fiesta en plan ¡Surprise bitch!, tú le ves, se te caen las bragas, os vais al cuarto y ya me dices que sabor de lubricante está más bueno. -empezó a descojonarse de nuevo. Yo con la boca abierta le golpeé el hombre. -¡Aish!

Yo: ¿Me estás diciendo que tú no vas a probarlos con Jimin? Eso no te lo crees ni tú, si cada vez que le ves te cambia la cara de 'Hola soy Halima' a 'Hola te chupo el pito'. -Halima se sonrojó y rió. -A parte, Jungkook no podría aparecerse por aquí, ni siquiera sabe dónde vivimos.

Halima: Pero... ¿y si era el chico ese que viste?

Yo: A ver, que dudo mucho que haya sido él, que seguro era alguien que se parecía y ya. Esta noche me la quiero pasar bien y no dejaré que él me estropee la noche. Porque esta noche yo quiero PERREOO!! -me puse a hacer twerk.

Halima: ¡YAAASS! -gritó alzando las manos y perreándome por detrás. -igualmente recuerda que vienen más chicos...ya sabes. -Dijo riendo y moviendo los pechos.

Yo: ¡Si! Vendrán más chicos y me distraeré, que ya lo necesito. Por cierto, ¿que hora es? -Halima miró su móvil y en cuanto estaba por articular una palabra, sonó el timbre. -'las ocho' dijo finalmente sonriendo mientras iba a abrir la puerta.

Me senté en sofá a esperar a que viniera a mostrarme el buen postre. Y a los 4 minutos ya estaba viniendo hacia mi pegando saltitos por el salón. Meneó la bolsa y la olisqueó.

Halima: mmmhh... esto huele que alimenta mira -me acercó la bolsa y saqué la caja en la que venían los brownies, tenían una pintaza. Inhalé y mis fosas nasales detectaron en seguida ese olor a marihuana, los que lo habían preparado no se habían cortado un pelo en hacerlo flojo. Olía a chocolate, si, pero lo otro también se detectaba con facilidad. Entonces la idea de que todos estaríamos en el suelo a las 3 de la mañana por la mezcla del alcohol y la maría se me hizo presente. Una sonrisa se me escapó de los labios, porque se venía una noche muy divertida.

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⏰ Última actualización: Mar 25, 2020 ⏰

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Chica Mal (Adaptada) "Jeon Jungkook"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora