Daddy's little boy

Daddy B.M.

Los nervios se apoderaron de marco, no le gustaba para nada usar pañales por que el es un niño grande.

Pero en este momento necesitaba uno, por que SE ESTABA CAGANDO DE MIEDO.

Un daddy molesto era peor que el diablo.

-Adelante, daddy es paciente- apretó sus manos mientras estás seguían cruzadas, tal vez no se dio cuenta pero uno de sus pies zapateaba de la molestia.

-Es que verás- dio una pequeña pausa y un suspiro -ese tal daddy B.M.- parecía tomarse mil años entre cada pequeña oración -bueno, la M es de miguel- soltó.

-Marco,ahora dime ¿quién mierda es miguel?- la voz ronca de kyle retumbó en cada pared, maldita sea marco explica bien las cosas o te va a tocar una verguiza, y no de las que te gustan.

El little y daddy space definitivamente pareció disiparse, el moreno adaptó una forma mas madura de hablar, a un daddy nunca se le miente, no, a kyle no se le miente, no lo merecía.

-Sabes de qué es la B?- El asiático negó con la cabeza, el mas bajito señalo un lado de la colorida cama pidiendo que se siente a su lado, seguramente para explicarle.

-Cuando inicié en este mundito del daddy, baby y toda la chingadera fue vergonzoso, ¿cómo le explicas a tu família que te gusta usar chupetes y ver caricaturas mientras usas ropas lindas y adoptas toda una conducta infantil?- El rivera mantenía la mirada baja, con ligera fuerza abrazaba al pequeño simi en manos, miró a kyle quien parecía imaginarse la situación.

La cara de incomodidad al imaginar la escena apoyó a marco a proseguir -exacto, ahora imaginate todo esto en México donde si alguna vez te hechas un pedo quedarás marcado como el cacas o cualquier otro apodo para siempre, son cosas que te persiguen para toda la vida, es mejor dejarlo todo como una broma y no seguir de manera sería con ellos, menos con lo que ellos consideran tabú- sin pensarlo ya estaba recostado en el chico a su lado - entonces llegó algo que reforzó mi deseo, en el pueblo abrieron un mini super, de esos sin aire acondicionado, tenían ventiladores y un olor a guardado horrible, pero había una sección infantil, lo suficiente completa para llamar mi atención-

-Y dónde entra el tal miguel?- Preguntó kyle, recibiendo un golpe de parte del peluche-toño-el-tigre.

-Estoy contandote mi historia de tragedia y aceptación a mis gustos y tu nomas con tus celotes cabrón, concentrate-

-Mis elotes?- A veces marco hablaba tan rapido y tan raro que le costaba traducir al 100% a su cerebro.

-Qu- no!, solo escucha cabrón, que el miguelito ya mero sale a escena-

"miguelito" esa palabra hecho carbón al fuego.

-Con la llegada de coco todo pareció tentarme mas, tener ropa tan linda y todo lo que me gustaba en la casa, pero no era para mi- miró al suelo, parecía un poco nostálgico, extrañaba tanto a coco, cuántos años tenía? Quizas unos 5 -entonces ahorré el dinero de mis recesos, en ese tiempo no era mucho, pero conseguí lo que pude, así, cuando llego el momento de comprar cosas nuevas para coquito, yo me ofrecí a ir por ellas, con lo poco que ahorré me compré unos platitos con utensilios, un chupete y un babero-

Se dejó caer en la cama y miro al techito de su cama, kyle hizo lo mismo.

-Llegué temprano con las compras, así pude esconder mis nuevos objetos bajo la cama, en una caja de zapatos, junto con mis otros pares, y todo hubiera estado bien. . . De no se por miguel-

La sola mención del chico hizo la plática mucho mas interesante de lo que ya era.

-Cuando terminé de guardarla escuché la puerta abrirse, mi hermano estaba parado en la entrada. "te saltaste las ultimas dos clases sin mi culero" me dijo, o algo asi, disimulé y salí del cuarto, pero ese pendejo nomas no entiende y revisó donde estaban las cosas, fue muy tonto ahora que lo creo, lo primero que me dijo muy espantado fue algo como "marco, vas a ser papá?!"-