Mi lindo peluchito

Capitulo 8

Al final no tuve potestad, el se quedo durmiendo con Alex, estaba enojada no quería que durmiera en mi casa por Dios el tiene su propia casa, además no quería que durmiera con Alex sino conmigo pero, no quiero volver con él. Me acosté y no podía dormir, sentí que la puerta de mi habitación se abrió a las 3:00 am, era Adam,  pensaba que estaba dormida, se metió en mi cama, me abrazo y me beso la mejilla

-Que mierda haces aquí? –dije enojada. Realmente enojada por hacerme la fuerte no porque realmente quería que se fuera

-No puedo dormir -respondió

-A mí que me importa que no puedas dormir, lárgate de mi cama, Adam es que no entiendes no quiero verte, no quiero amarte, vete de aquí! -Lloraba como una niña- lárgate! –dije enojada

-Amanda yo aun te amo, déjame demostrarte todo este amor que tengo por ti

-Que me lo demostraras, pasando una noche más conmigo, luego dejarte llevar por tu madre y tener otro bebe, que quieras que esta vez tenga que irme a África, lejos de tu vida –dije ya fastidiada

-No digas eso -dijo acercándose a mis labios

-Qué? me besaras? y luego qué? –respondí enojada, lagrimas y lagrimas brotaban de mis ojos como un lago, estaba loca por perdonarlo pero no quería hacerme la débil

-Me voy con Alex -dijo parándose de la cama y dirigiéndose a la puerta, estaba arrepentido y yo también arrepentida de no dejarlo quedarse

Me volví a acostar pero no pude dormir como ya era Sábado Alex no tenía que ir al colegio gracias a Dios podía levantarme a las 8:00 am porque tenía que supervisar la empresa, aves creo que era mejor quedarme en Oregón que venir aquí.

-Adam podrías llevarte a Alex? mas tarde lo pasare a buscar a tu casa

-Claro, luego te veo -se acerco a mí para robarme un beso y no lo logro, solo me beso en la mejilla- Adiós –rio al ver mi cara de enojo

-Adiós mama –dijo Alex mientras salía agarrado de la mano de Adam

-Adiós peluchito –le tire un beso, cuando vi su mano note que tenía el peluche que Adam le había dado

Llegue a Symses, hoy había poca gente por lo cual podría aprovechar y salir temprano, fui a varias tiendas a comprobar los precios con los míos para dejarlo cómodo a los compradores, mientras caminaba vi una tienda llena de peluches hermosos.

Sorprendida entre, parecía un paraíso de lindos cariñositos, aparte habían otros más grandes y diversidades de colores y tamaños, tome uno, no escogí el más grande sino uno que se adaptara a mí. Adentrándome más encontré uno de una madre con su bebe en la mano, solté el que tenía en la mano y compre ese.

Ya Alex olvidara el tonto peluche de Adam y lo dejara sufriendo espero que eso suceda para que Adam deje de molestar en casa

-Donde esta Alex? –pregunte cuando Adam abría la puerta

-Está allí, pero estoy cocinando, quieres quedarte a comer? –una sonrisa se poso en sus labios

-No –dije fastidiada- odio estar contigo

-Mami quiero comer aquí –Alex empezó a hacer pucheros, tan lindo

-Está bien, me quedare pero solo por hoy –señale a Alex advirtiéndole que no lo volviera a hacer

-Gracias Amanda –Adam rio victorioso

Creo que todo estaba planeado