青柠 (Limerent) [+18]

Mal portado

Sehun corría por el pasto, tan sólo tenía 8 años, sus cabellos negros y ondulados se meneaban al son del viento mientras emprendía camino a casa. Sehun vivía en una feliz casa hogareña con papá y mamá. Mamá horneaba pasteles mientras que papá trabajaba. Papá siempre fue duro y frío con él, siempre lo miraba raro; todo lo contrario a mamá ella era hermosa y muy dulce con él.

Quitó sus pequeños zapatos para poder entrar a casa y comer ese delicioso pastel que mami había cocinado con amor. Buscó en la cocina y mamá no estaba, en el patio, en la lavandería, habitaciones. Mami no se encontraba por ningún lado, se asomó en la cochera y el carro de papá estaba ahí; papá ya había llegado. La llamó. Ella nunca respondió. Se dio por vencido pero recordó que le faltaba una parte: el sótano. Ese oscuro lugar al que papá le tenía prohibido entrar.

Tal vez si buscaba ahí la encontraría.

Y no se equivocó.

Mami y papi se encontraban en el sótano. Mamá estaba desnuda mientras que papá estaba completamente vestido de negro.

El pequeño se escondió en un peldaño roto de la escalera observando lo que papá le hacía a mamá. Tenía una pequeña navaja suiza con la cual trazaba un pentagrama en su estómago, no veía bien debido a su estatura, trató de asomarse un poco más pero debido a que la escalera estaba en mal estado provoco un chirrido agudo.

Sehun estaba asustado.

Papá lo descubriría.

Se quedó en silencio rezando por que Chanyeol no se hubiera percatado de ello.

Error.

Papá miró fijamente en su dirección y sólo le sonrió de forma ególatra, se acercó con parsimonia a él.

—Shh pequeño, mami se molestará— Le susurró al oído— Ahora ella no será un impedimento entre tu y yo.

...

12:55 pm

Sehun se despertó sudando. Era la cuarta vez en el mes que había tenido esa horrible pesadilla; y era pesadilla por que su mamá murió de causas naturales hace siete años según le contó su papá. O eso creía.

Quizás un vaso de leche tibia le ayudaría a borrar esas pesadillas. Bajó con cuidado por la densa oscuridad debido a su nictofobia ya que su padre lo regañaba cuando encendía la luz en medio de la noche.

Solamente vestía de una playera sin mangas y un bóxer que encontró por milagro en su closet.

—¿Bebé? ¿Qué haces despierto a esta hora?— Escuchó la voz ronca de su padre en la sala.

—No podía dormir y...— respondió en voz baja, no le quería contar sobre sus pesadillas por miedo a que lo regañara o castigara.

—¿Y? Siéntate conmigo, bebé— Palmeó su muslo— Ven con papi.

Sehun amaba esa parte extremadamente cariñosa de Chanyeol: cuando lo trataba como un bebé de 17 años.

Y lo hizo.

Se sentó justo al lado de él y colocó su cabeza en sus estiradas piernas. Chanyeol se encargó de acariciarle la suave melena oscura de su adoración.

—Te amo, mi niño hermoso— Le susurró Chanyeol al oído sin dejar de acariciarlo.

—Te amo más, papi— Un bulto duro y molestoso se hizo presente en la entrepierna de Chanyeol al oír aquellas palabras dichas con inocencia.

Las manos traviesas de Chanyeol bajaron hasta el esponjoso trasera de Sehun.

—¿Te duele aún?— Comenzó un suave masaje en ese par de cachetes pálidos.

—Un poco— Susurró Sehun medio dormido.

—Las voy a tallar por ti— Metió la mano en el bóxer y la bajó lentamente observando con hambruna aquel trasero que había visto cientos de veces— Perdóname, bebé, no quería hacerlo pero te portaste mal y eso a papi no les gusta— Fue dejando besitos húmedos en ambas mientras las tallaba— ¿Se siente bien lo que hago, bebé?

—S-si— Un pequeño gemido salió de Sehun.

—Te amo tanto bebé— Dio más besos— Promete que no te volverás a portar mal y sólo harás lo que yo te diga.

—También, papi— Susurró Sehun— Prometo no volverme a portal mal y solo haré lo que tu digas.

—Buen chico— Dejó de acariciarle el trasero para tomarle el rostro y plantar un pequeño y suave beso en los labios de su bebé.

A la mierda la cordura de Chanyeol.