Shed A Tear.

Capítulo 5

Nota de autora: Ey, les traigo un nuevo capítulo hoy en navidad y con bastante angst. Sepan perdonar pero es necesario para la trama 💫

Advertencia: Este capitulo en particular puede tener contenido muy sensible. Las personas que tengan o hallan tenido algún trastorno alimenticio no deberían de leerlo a menos que se hallan tratado. Y sólo diré para los demás que hacer este capitulo fue muy fuerte para mí pero quise hacerlo de todas formas porque debía mostrar como aquellas personas se rompen. Cuál duro es para todos los que rodean a tales personas y como de duro es para esas personas el tener aquellos trastornos. Y es que a veces unas simples palabras, unas simples frases, pueden destrozar a una persona y volver su vida un caos. Trata a la gente con amabilidad 💖

Hoy comenzaban las clases y Alan no podía estar más emocionado. Se fue muy temprano ya con todo arreglado hacia la academia.

En el camino se encontró con Donovan y no lo soltó del brazo (y también de los labios) hasta que llegaron a la academia. Ese primer día era más para ver la dinámica de los grupos además de pasos bastante sencillos. Por lo que Mike por esa ocasión, no fue.

Sus compañeros eran muy amables. Y no saben cuanto alivio provocaba en Alan aquel hecho. Las chicas eran un amor y algunos chicos viendo que estaba ocupado, en cuanto a relación se refiere, se mantuvieron amistosos aún cuando les hubiera atraído bastante Alan o Donovan.

En clases estaba obviamente junto a Donovan como compañero y junto a todos esos chicos y chicas maravillosos, Alan se alegraba, y es que al albino no siempre le tocaba lo bueno de la gente.

Hicieron ensayos, probaron distintas coreografías y la pasaron bastante bien entre todos.

Lo malo fue cuando...

Oh, bueno, quizá Alan exageraba. Pero le había dolido bastante que ya en su primera clase y después de enterarse de que Donovan era su pareja, uno de los instructores fuera tan malo con el y su cuerpo.

El instructor le dijo cerca de su oído que no era lo suficiente delgado y que con una pareja como el, pronto sería dejado por el otro chico que ya tenía a muchas chicas detrás de él. Si es que no adelgazaba lo suficiente, también podrían los demás bailarines dejarlo de lado, pues no aceptarían a alguien que no se pudiera mover fluidamente.

Aquel ser tan brillante y alegre que solía ser el albino siempre, se rompió.
Puf, así de simple.

Alan, por primera vez se miró con otros ojos.

Por primera vez, pareciera que no era suficiente ante sus propios ojos. ¿Que? Parecía haber un poco de grasa extra debajo de sus brazos. ¿Eh? Sus muslos no eran tan delgados. Quiza, ¿tenía un poco de peso de más? Quiza ¿debía preocuparse un poco más de lo que comía?

De repente un veneno le fue inyectado y no logró ser capaz de sacarlo lo suficientemente rápido como para que no le afectará.

Donovan no escuchó lo que le dijo el instructor gracias a que aquel tipo se encargo de decirlo en voz baja para que solo él lo escuchara. Aquel instructor se siguió comportando amable con los demás mientras a él detrás de aquellas sonrisas le decía que no era suficiente, que quizá nunca lo sería. Era un doble cara que lo lastimó, y que hirió algo que amaba mucho como era el mismo. Su persona y su cuerpo.

Donovan le preguntó si había ocurrido algo, pues tenía una cara algo extraña. Alan contestó que no había ocurrido nada y que solamente estaba pensando en algunas cosas de clases. Donovan aceptó por el momento aquella respuesta aunque dudase bastante de la verdad que había en ella.

Algo había cambiado en Alan. Y parecía ser que no sería para bien.

Las continuas críticas del instructor estaban rompiendo a Alan. Cada día, no podía faltar un comentario criticando su cuerpo y su forma de ser. Y cada día, el albino se sentía más débil. Alan no quiso decirle a sus parejas porque creyó que podría lidiar sólo con aquello. Eso fue un error, uno de los primeros que cometería. Y es que el sabía que no debía caer en lo que aquel tipo le decía pero...