Aladas jóvenes bañándose en el valle de cristal, alumbrando con sus doradas luces y cautivando a los viajeros con sus hermosos cantos, donde la delicadeza y la inocencia aún existe, bellos seres fantásticos que cuidan de los sueños y cumplen los más profanos deseos
La divinidad es casi real y sus figuras majestuosas se pueden ver volando, surcando el firmamento y coloreando de dorado los cielos, donde los nimbos se mezclan a la perfección con coloridas auroras, la calma se puede sentir, sin embargo existen sus más grandes enemigos, los malditos seres humanos los cuales somos veneno para las hadas
Bajo las aguas caudalosas del río se pueden ver cadáveres de hadas, las cuales fueron asesinadas por los sentimientos impuros y de odio que viven cotidianamente entre los seres humanos, los cuales destruimos todo a nuestro paso y las hadas no se salvan de ello, nosotros siempre fuimos y seremos veneno para ellas y los destructores de un perfecto valle de cristal
Los animales del bosque lloran la pérdida de esos seres mágicos alados, los cuales van muriendo a falta de sentimientos buenos, decepcionadas por todo el odio de este mundo, sus corazones mágicos no pueden soportar sentimientos tan malditos y tras explotar y dejar una estela dorada en el cielo un hada más ha muerto
Pequeñas ninfas de luz, aun cuando han sido traicionadas por el ser humano no dejaran de hacer su trabajo y de proteger la tierra, siempre y cuando alguien siga creyendo en su existencia ni el odio ni el rencor podrán exterminarlas, malditos somos y veneno para las hadas siempre seremos
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Maldiciones de un alma en pena
Thơ caSe podría decir que es el volumen 2 de El Oscuro Rostro de la Muerte Poética, ya que de nuevo se trata de mis perturbados sentimientos y de mi maldito corazón con ese toque colorido y acido que se mantiene en esta triste y depresiva alma que lo únic...
