Hellevator Music [HyunSung;현성]

Capítulo Once

De repente el negro vació me hablaba. Escuchaba voces en mi cabeza que susurraban, se hablaban entre ellas, pero no podia verlas por la oscuridad.

《Ah.. mierda, ¿por qué lo hizo?》

《Oh por Belcebú. ¿Acaso el angelito dijo una grosería?》

《Deja de llamarme Ángel, sabes que no lo soy. No fastidies.》

《Esta viniendo hacia aquí. No empieces con tus cosas.》

《¡Tú empezaste!》

《Shh, escucha.》

ㅡ¿Hola?ㅡdije, cuando pude articular las palabras. Silencio.ㅡ¿Hay alguien ahí? ¿Dónde estoy?ㅡ¿Acaso estaba soñando y no los sabía? Seguro entré en coma. Mierda.

ㅡNo, no entraste en coma estúpido.

ㅡ¿Q-qué? ¿Quién  eres?ㅡ¿Cómo sabe lo que pienso?

ㅡNosotros lo sabemos todo. Acostumbrate y ¡ya date prisa!

ㅡ¡No lo apures! Está confundido.ㅡdijo la otra voz.

ㅡ¿Dónde estoy? ¿Dónde estan ustedes? ¿Acaso no morí?

ㅡClaro idiota, estas en el limbo porque no moriste.ㅡdijo con sarcasmo en su voz.

ㅡ¿El limbo?

ㅡ¡Deja de confundirlo!

A lo lejos una luz se divisaba, se acercaba lentamente a mi. Cuando estuvo lo suficientemente cerca lo noté, era un estacionamiento con un elevador frente a mi. Al voltear la oscuridad había desaparecido. ¿Qué clase de sueño es este?

La voz omnipresente volvió a hablar.

ㅡ¿Vas a quedarte ahí parado a que te mandemos un fax o vas a subir como las personas normales?

ㅡ¿Yo como iba a saber que tenía que subir?

ㅡEstás frente a un elevador. ¿Qué se supone que hacen los elevadores, volar?

ㅡEl de Willy Wonka lo haci--

ㅡ¡YA PASA!ㅡluego de que la tierra temblara un poco el elevador se abrió.

ㅡ¡Esta bien, lo siento!

ㅡAsi vas a asustarlo...ㅡdijo la otra voz.

Subí y este se cerró automáticamente. Los espejos de al rededor me daban escalofríos, podía verme repetidas veces y juro que vi a uno de mis yo sonreírme.
Veía los números subir, hasta llegar al número 8, luego de ahí estos se dispararon. Ya no eran solo números sino letras, el elevador comenzó a moverse de un lado al otro haciéndome caer al suelo, las luces parpadeaban. Tenía mucho miedo, sentí que moriría otra vez, ese sentimiento... era desesperante.

El movimiento paró de repente, ya no subía, no bajaba. Estaba como... suspendido en el aire. La puerta se abrió y dos personas de traje entraron junto a mi cerrándose la puerta luego de entrar.

ㅡ¿Puedes levantarte del suelo? ¿Sabes hace cuánto no lavan ese suelo?ㅡdijo el chico rubio de traje negro y corbata roja.

ㅡMínimo unos tres siglos.ㅡrespondió el otro, más alto con traje blanco y corbata azulada.

ㅡ¿Quienes son ustedes y dónde estoy?ㅡpregunté a los gritos.

ㅡPrimero y principal no grites. Segundo, levantate del piso.

ㅡ¿Y si no quiero? Ángel...?

ㅡDios mío ¿por qué todo el mundo me dice lo mismo?

ㅡEs que es el típico concepto humano, la bondad, la maldad. Angel bueno y malo, ya sabes.