Era un día lluvioso el día en que ella lo conoció...
Wen caminaba de regreso a su casa después de su trabajo de medio tiempo en una cafetería..Desde la mañana el día mostró señales de que la lluvia se aproximaba con un cielo totalmente gris.
Cuando Wen iba recorriendo el atajo atravesó del parque, las nubes por fin cedieron y empezaron a caer frías gotas de agua desde ellas.
Se suponía que Wen traía consigo su paraguas, pero al revisar en su bolso se dio cuenta de que lo había olvidado en su lugar de trabajo.
Cada vez llovía más y más fuerte y Wen no pudo seguir su camino ,así que decidió refugiarse en el pequeño kiosco amarillo del parque.
Ahí se quedó , sentada, sola y muerta de frío durante unos minutos hasta que un muchacho también entró al kiosco para refugiarse de la lluvia.Estaba totalmente mojado y su camisa blanca de vestir estaba total, ente pegada a su cuerpo, a los ojos de Wen era bastante guapo.Sin darse cuenta se le quedó viendo fijamente hasta que el se dio cuenta y cruzó su morada con la de ella que inmedianamente volvió su cara sonroja.
El chico empezó a reír.
-Te estas burlando de mí?-dijo Wen con enojo.
El chico paró de reír.
-...No,claro que no...sólo me pareciste tierna-dijo con total confianza
-A-...-Wen no sabía que responder a aquello-Acaso le anda diciendo eso a cualquier persona que vea en la calle y le parezca tierna?-dijo pensando en voz alta.
-Bueno...no..no lo acostumbro..Pero tu me pareciste verdaderamente tierna.
Qu-..?-Wen volvió sonrojarse aún más que la primera vez.
Y se produjo un silencio incómodo entre los dos.El quería decirle algo más, pero no lo hacia y ella quería terminar con ese incómodo momento, pero no sabía como y le daba demasiada vergüenza como para intentarlo.Al final El fue el que término con aquel silencio.
-No crees quefa la lluvia es hermosa?
-La lluvia?...pienso que es un poco molesta.
-Te parece molesta? No lo podría pensar así, me trae paz y ? Sabes? Me ayudó a conocer a alguien interesante.-dijo mirándolo a los ojos y esta vez fue el quien apartó la cara sonroja-Em...y-yo me voy, parece que dejó de llover un poco-dijo bajando las gradas del kiosco - Por aquí cerca hay una tienda...em..por si te interesa...em...Adiós.
Y se fue del kiosco, ni siquiera se pudo despedir de el, tampoco sabía su nombre...bueno, igualmente tal vez nunca lo volviera a ver, sólo fue un encuentro casual, ahorita se olvidaría de...
En ese momento vio quien el camino del parque venía el mismo chico...
Cuando llegó al kiosco otra vez, el le dijo:
-Y-yo sólo tenía dinero para un paraguas...te quieres venir conmigo?
-S-si!
-Por donde vives?
-Como a dos cuadras de aquí, en un edificio de apartamentos
-Wow! Yo también!
-Y los dos se fueron juntos bajo la lluvia , bajo el mismo paraguas, una al lado del otro.
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Amor en relatos cortos
RomanceMomentos comunes de la vida que encierran un gran significado para pocas personas.