Capitulo 11: lo mejor para ti SOY YO

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Cuando sintió que él cerró la puerta que daba al salón, pudo liberar sus emociones, realmente estaba sufriendo por dentro, le sucedió de nuevo, cuando quizo decirle que lo amaba ya era muy tarde, comprendio que debió actuar rapido, ahora no tendria ninguna oportunidad de nuevo, pero Arimi Takahashi era mucho mejor para él y su familia, asi solo podría vivir en tradicion, no lo atormentarían mas y tedría una vida llena de paz, ella no sería una carga.

Lloró, sollozó, pero todo se calmó cuando una tibia mano se posó en su hombro, no sintió miedo, solo se impactó con la belleza de aquella mujer, era la madre de Inuyasha.

No llores, ven – sonrió- hablemos…

Se encontraban en la cocina, tomando ambas una taza de té junto con un un dulce que había preparado kaede, Kagome tenía dificultades aun para tomar la taza de té, por ello Izayoi acercó una bombilla hacia la muchacha.

Haz avanzado mucho… muy pronto volveras a ser la de antes.-

Nno, nnun-ca vvol-vve-re a sser la de ann-tes- miró tristemente la taza de té- ha-bbla-re assi ppor siemm-pre.- la miró.

Eso no importa, me refiero a que volveras a ser aquella chiquilla revoltosa que entrenaba con mi hijo llenandolo de golpes.

La muchacha cerró los ojos llena de vergüenza y sonrió ante el recuerdo de sus combates de Inuyasha el joven no quería lastimarla por ello nunca la golpeaba fuerte, al comienzo, despues ya era otra historia.

Te sientes mejor… - la chica asintió- kagome soy la madre de Inuyasha no la Reina Isabel, asi que mirame como a una tía, se que nunca nos vimos pero yo si se muchas cosas sobre ti.- eso asusto un poco a la muchacha.

Ssa- bbe que yo –ffu-i l-la ca-usa dde que I-nnu-ya-sha dde-ja-ra a Ki-kkyo-

Y fue lo mejor que pudo hacer, lo mejor para ambos… no se querían, desde que tu caiste enferma Inuyasha se dio cuenta de muchas cosas, de su vocasión ademas de donde pertenecía su corazon.- tomó una de las manos de su hija- mi hijo te ama.

Yo ssoy unn es-ttor-bbo, ari-mmi ess u-nna chi-ca re-ffi-nna-dda, dde u-nna bbue-nna fa-mmil-lia.

Pero no ama a mi hijo, y ellos no seran felices, no sirve de nada que sea de una de las familias tradicionales si ambos viviran un infierno- recordando el principio de su matrimonio- tu lo amas, lo se , se te ve en la mirada.

Tenía que hacerle ver a la señora Izayoi que ella era aun muy dependiente, que no podría jamas entrar en las tradiciones de la familia Sohuma, su cuerpo no se lo permitiria sabía muy bien que siempre correría el riesgo de caer nuevamente en aquel estado e Inuyasha sufriria de nuevo, no quería que por culpa de ella viviera lo mismo.

Ttenn-go el ri-ess-go dde ca-er enn ess-tte estta-ddo de –nnue-vvo… a-yer aya-mme - comenzó a lagrimear nuevamente, el susto aun no pasaba, si Sango no hubiera llegado, quizas que hubiera sucedido y ¿si ella lograba tener hijos? Correrian peligro, ante este pensamiento las lagrimas salieron con mas fuerza.

Kagome, tu estabas allí con ayame fuiste capaz de hacer la llamada… no llores hija, me da mucha pena verte así.

Mmis sue-ños – fue lo ultimo que dijo-

Aun puedes cumplirlos, tu decides.

En su corazon, sabia que lo queria recuperar, pero su mente prefirió dejarlo tranquilo

Kagome trata de dar un paso- ginta veia los avances increibles de su paciente, el hijo de miroku se había adelantado un mes, por lo que el hospital le concedio un mes de vacaciones para que ayudara a cuidarlo, veia como la muchacha se esforzaba en cada paso, habían puesto unas pesas en sus tobillos para darle estabilidad, esto le ayudaba demasiado, con dificultad caminaba por la baranda, pero al menos lo hacía. – bien hecho kagome chan- saltaba de felicidad- ahora solo tenemos que practicar y pronto caminarás.

=RESILIENTE=Donde viven las historias. Descúbrelo ahora