♥⚪Te Busca Mi Corazón⚪♥

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⚪Capítulo 3⚪

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Actualmente...

Mafu sostenía la mano de Soraru, que temblorosa apretaba con fuerza la contraria...
Habían estado esperando 1 hora para la consulta en un laboratorio, que aseguraba ser una clínica especial para embarazos. En el tiempo que habían estado inquietos, de sí era o no una buena opción encontrarse hay, una enfermera de aspecto dulce se acercó a ellos...

--¿Soraru y Mafumafu?--. Pregunto sus nombres con una sonrisa, mirando a ambos jovenes.

--Si...--. Respondió el albino levantando su cuerpo del asiento de la sala de espera.

--El doctor me ha mandado a llamarlos para su consulta...--. Comentó señalando un pasillo de blanco puro. --Así que, siganme por aquí...--. Pidió con una sonrisa, dándoles la espalda a ambos jóvenes y dirigiéndose al consultorio del doctor.

Mafu dio un suspiro, volteando así Soraru tirando suavemente de su mano, en señal de que tenían que avanzar. Sin resistencia, el peliazul se puso a la par del ojicarmín, y aún con pequeños espasmos, caminaba por aquel pasillo interminablemente largo, y girando de vez en cuando su cabeza hacia el rostro decidido del albino, aquella expresión lograba darle cierta protección, porque desde que habían llegado a la clínica, se sentía completamente inseguro y asustado de saber la respuesta que ya sabía, pero que aún le era difícil de digerir...

Pronto los tacones de la mujer se detuvieron y sólo el rechinido de la puerta siendo abierta resonó en sus oídos; deslumbrante eran los rayos de la luz que se proyectaban directamente hacia sus ojos al estar completamente abierta.

--Pasen por favor--. Amablemente les señaló el interior del consultorio, extendiendo su mano y haciéndose a un lado.

--Gracias...--. Débilmente Mafu agradeció, con una pequeña reverencia.

Y así, ambos chicos entraron, sus manos sudando por lo que sea que les deparaba en esos momentos con la persona que estaba frente a ellos...

--¡Buenos días!--. Alegremente los saludo un hombre de cabellos azul claro, con enormes espejuelos redondos. --Es un placer conocerlos, mi nombre es Faneru...--. Se presentó exteniendoles la mano, y recibiendo el saludo por igual. --Y díganme... ¿Con quienes tengo el gusto?--. Pregunto sus nombres ensanchando aún más su sonrisa.

--Dilculpe... Mi nombre es Mafumafu, pero puede decirme solo Mafu--. Entrando en ambiente, el ojicarmín respondió. Pues no sentía alguna incomodidad o peligro hacia el doctor.
--Es un placer conocerlo, me llamo Soraru...--. Tajante habló el ojiazul, retrocediendo un paso.

Viendo la acción de Soraru, sonrió aún más, tratando de darle una mejor confianza. --¡No hay porque estar tan nervioso!--. Trato de demostrar que no había preocupación alguna. Sin penas alguna aplaudio fuertemente y soltó una carcajada, llamando la atención de sus pacientes. --¡Bien!... Tomen asiento por favor--. Pidió a la parejita, dándoles la espalda y acomodándose también en su sillón.

Y una vez los tres sentados, comenzó la consulta...

--Por lo que veo, ustedes aún son estudiantes de preparatoria... ¿O me equivoco?--. Cuestionó a ambos mientras buscaba un bolígrafo y hoja para anotar ciertos datos.