¿Bravucona? (Cancelado)

Padres crueles

Marinette llegó a su casa donde sus padres quienes sabían lo que había pasado, la esperaban con mucha seriedad.

La chica se asustó un poco ya que ni cuando Lila hizo que la expulsen aquella vez los vio tan enojados.

¿Será qué la iban a meter a un internado?

-No puedo creer que le rompiste la nariz a un compañero de clases, estoy muy decepcionado de ti, jovencita.- dijo Tom con seriedad.

La ojiazul agachó la mirada, sin decir nada.

Merecía éso.

-Yo no te enseñé defensa propia para que seas una bravucona.- habló Sabine, enojada y Marinette tembló.

¿Su madre estaba enojada?

Está vez sí que lo arruinó a lo grande.

Su madre era la persona mas dulce y calmada que conocía y se se enojó con ella, era lo peor.

Seguro que ahora le dirían que junte su ropa y se vaya, que ya no era más su hija.

-Estás castigada por el resto de la semana, sin internet, videojuegos ni ningún otro entretenimiento.- exclamó Tom con autoridad.

Marinette miró a sus padres con sorpresa al oír éso.

¿Entonces no la iban a echar de la casa?

Tom, se ocultó detrás de su mujer al ver que su hija lo miró.

-¡¿También me vas a golpear a mí?!- preguntó el hombre con miedo.

Marinette se asustó y negó con la cabeza y brazos.

-¡No, yo no lastimaria jamás a mis pa...

-¡Suficiente, a tu habitación, a reflexionar en lo que hiciste!- gritó Sabine mientras protegía a su esposo.

Marinette hizo pucherito pero no discutió, sólo se fue corriendo a su habitación.

¡Era un monstruo!

Ahora hasta sus padres le tenían miedo.

Al llegar a su habitación, se sacó su mochila y de esta salió Tikki quien se alejó, sin mirar a su portadora.

-Tikki... ¡Sniff!... ¿qué hago ahora?- preguntó Marinette mientras se limpiaba un par de lágrimas.

Oficialmente ya era el ser más malvado del universo.

Tikki se detuvo y dio un suspiro profundo.

-Lo siento mucho, yo no habló con bravuconas.- dijo la kwami antes de irse al balcón a reírse por todo lo que había pasado pero Marinette no lo supo.

La chica sólo se arrodilló, destruida.

Hasta para Tikki era un ser malvado.

¡¿Qué es lo que sigue?!

Mientras que en la cocina.

-¡Jahahahahah!

Tom y Sabine se reían a carcajadas por ver la reacción de su hija antes de que se vaya a su habitación.

-¿No crees... no crees que nos pasamos?- preguntó Tom mientras recuperaba el aliento.

Su mujer la miró pensativa y luego negó.

-No, fue divertido hacerle creer que estábamos enojados y que ahora le tenemos miedo.- dijo la mujer antes de los dos volver a reír.

Y así, vemos como hasta Marinette puede tener padres crueles.

Continuará...
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¡Hola!

Pobre Marinette, se divierten con su inocencia.

Espero que les haya gustado el capítulo.

Gracias por su tiempo.

Volveré...