A la mañana siguiente, Yoko despertó a las 8:00 de la mañana.
Se levantó y vistió apropiadamente para recibir sus clases en casa.
Sebastián tocó la puerta y desde dentro escucho a Yoko pronunciar un -pase- a lo que Sebastián obedeció y le dio el desayuno que sostenía en su mano izquierda.
Al cabo de unos minutos Yoko término el desayuno.
-my lady, le recuerdo que debemos establecer sus normas y el asunto de su venganza- habló Sebastián fijando su vista en Yoko.
-lo se Sebastián... - habló con cierto desánimo y enorme enojó, por no poder disfrutar su mañana alegremente.
Narra Yoko:
*Si cometo un error, mi venganza no podrá ser completada y este demonio comerá mi alma*.
*Bueno si es que tengo una*....
-no me mientas, es la primer normal, si no la acatas bien, no te daré mi alma nunca- el solo sonrió y asintió *que irritante*. -si te lo ordenó tu tendrás que obedecer, no importa que, ¿está claro?- el asintió. -me serás fiel solo a mi, no quiero que agas otros contratos mientras sigue mi contrato en pie.-
-con todo respeto ama, yo no acostumbró a ese tipo de situación- dijo serio y sin quitar sus ojos de mi.
-bién- dije y dimos por terminado este primer asunto importante.
Continuará.......
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MalunaLoveless: pasen a ver mis otras historias y regalen me una estrella que nada les cuesta, comenten y tengan un feliz año nuevo.
