𝙞𝙣𝙚𝙭𝙥𝙚𝙧𝙩𝙤 ❝ auronplay.

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ㅡ hombre vegetta, ¿cómo vas?

el mencionado dió un salto mirando justo detrás de él, había vuelto a su casa después de dejar actuar un rato a lobo nocturno.

ㅡ ¿c-cómo has entrado auron?

susurró nervioso al chico que estaba sentado en un sillón que tenía por ahí mirando un diamante, este suspiró acercándose lentamente a vegetta con una sonrisa de lado a lado.

ㅡ eso no es importante, ¿lobo nocturno verdad? deberías hablar un poco más bajo cuando vas a robar ㅡpasó su mano por la nuca del dueño de casa y se acercó a su oídoㅡ a veces las sombras escuchan más de lo que puedes creer.

el de morado empujó bruscamente a auron logrando que caiga al sillón, cuando vio eso, no dudó en subirse encima y atrapar las dos manos de este con las suyas.

ㅡ ¿qué te crees para venir a mi casa y amenazarme? ㅡauron soltó una carcajada sin quitar el contacto visual que tenían.

ㅡ por favor ¿cuándo te he amenazado? solo te he dicho verdades. ㅡauron acercó su rostro al del contrario uniendo sus frentesㅡ solo he quedado un poco shockeado ¿no que eras el tío más legal de todos? flipo con los dioses, menuda m i e r d a.

unos truenos se escucharon no muy lejos de la casa, los dioses estaban escuchando y no estaban muy contentos con las palabras del que ahora, vestía de negro y mareaba con sus ojos carmesí.

ㅡ ¿sabes que si dices algo mi imagen estará dañada para siempre? ¡simplemente no puedes!

auron negó bajando la mirada mientras murmuraba unos pequeños "no, no, no" con el ceño fruncido.

ㅡ claro que puedo, pero, como tengo entendido tu eres un hombre de negocios ¿verdad? ㅡvegetta asintió creyendo a por donde iría esto, unos cuántos diamantes y se ganaba el silencio de auron.

ㅡ hombre claro, ¿cuántos diamantes quieres?

el más bajo soltó una carcajada bastante fuerte frente a la cara del pelinegro, este solo se le quedó mirando pensativo ¿qué más podría querer?

ㅡ lo siento vegetta, esos negocios ya no van conmigo. ㅡel mencionado poco a poco volvía a enojarse con cada palabra soltadaㅡ necesito que me traigas a alguien y lo dejes en mi casa.

sus ojos se abrieron y se entrecerraron en un récord de tiempo, como auron seguía sentado bajo vegetta, al último no se le hizo difícil comenzar a ahorcar suavemente al de piercings con su mano derecha, esperando a que hablara o se arrepintiera de lo que estaba diciendo.

ㅡ por dios vegetta, no creo que te convenga hacer éso, si me calentara tal vez, pero la verdad es que me haces enojar cada vez más.

el de ojos morados soltó una carcajada al verle ahí, con su mano en su cuello haciendo cada vez más presión, de veía patético e indefenso bajo su cargo, según él.

ㅡ ¿y qué vas a hacer tú, asqueroso? estás acorralado.

ahora Auron soltó una carcajada subiendo su mano haciendo un ademán en forma de saludo, pero no le miraba a él, miraba justo detrás suya.

ㅡ quizás yo no pueda hacer algo, pero él sí.

ahora su dedo índice apuntaba como podía justo detrás de él, vegetta dio vuelta su cabeza viendo a lolito con un control en su mano, un control con un gran botón rojo que se veía bastante jugoso en apretar.

ㅡ ¿¡cuándo has entrado tú!?

vegetta pensó seriamente en que se estaba volviendo loco y que esos dos individuos eran solo parte de su imaginación, quizás jugar a tener dos personalidades le estaba jugando en contra y comenzaba a ver cosas que no eran.

es que ninguno de los dos se veía como el estaba acostumbrado a verles en el pueblo, Auron estaba con un traje extremadamente ajustado gris y un poleron negro y lolito era un poco más similar, llevaba una camisa rosa con con un bozal que se podría decir que es viejo, pero que dejaba ver una sonrisa bastante tétrica, unos guantes algo largos negros y los pantalones del mismo color.

ㅡ en fin vegetta, prosigo con lo que te estaba apunto de negociar.

Auron aprovechando que estaba distraído, tiró a vegetta lejos de él caminando confiadamente hacia lolito con una sonrisa más que alegre y enferma, le encantaba la idea de tener a alguien así de acorralado cuando creía que tenía el control total de la situación.

ㅡ quiero que encierres a willy en mi casa.

Vegetta miró a cada uno cuando lolito le pasó el control a Auron con una mirada bastante seductora, joder, si no le tuvieran tan amenazado juraría que se acostaría con ellos, pero ese no era el plan, aparte de que no tenía puta idea de para qué era ese control, le estaban pidiendo encerrar a su mejor amigo.

ㅡ y lo sentimos mucho, pero no aceptamos un no como respuesta, después de todo ¿usted quiere mucho a sus animales no? ni hablar de lobo plateado, es un amor. ㅡel de morado miro incrédulo a lolito, quién era el que hablaba ahora, el bozal era un tanto grande y le permitía pronunciar bien las palabrasㅡ le cuento, el control que tiene Auron esta conectado a minas incontables que están repartidas en distintas zonas de su casa, y muchas de ellas están entre sus animales y todo depende de un no o un sí.

vegetta pensó en lo complicado que iba a ser llevarse a willy a casa de auron y dejarlo ahí, aparte que la idea de no saber lo que le harían y sentir que le dejaría en una tortura sin retorno le estaba carcomiendo por dentro.

ㅡ bien, lo llevaré, pero no le hagáis nada a mis animales.

unos aplausos se escucharon por toda la sala llamando la atención de los tantos lobos que estaban ahí, ya que seguían en la habitación de lobo nocturno.

ㅡ ¡muy bien, señor vegetta! que gran decisión, tiene 72 horas para cumplir, un gusto hacer negocios con usted.