UNwavering

28:6:58

Después de manejar de vuelta a la empresa note que todo estaba vacío, lo cuál también era extraño, normalmente los medios acampaban para esperarme y acosarme, pero hoy al parecer les llego una noticia más jugosa, son como ratas, se alimentan de la basura de los demás.

Me estacione, baje del auto y comence andar hacía el elevador que me llevaría a mi oficina. Cuando se abrió el elevador vi ese asqueroso y repugnante rostro, era Sungjae sonriendo con flores.

-¡Para ti! Me enteré sobre lo que paso en la mañana, no puedo creer como te atacaron, sabes creo que hay empleados que estan disgustados y podrían estar hablando mal de ti por...- Decía tan rápido que explote.

-¡Cierra la boca!- lo interrumpí, no podría soportar un segundo más. -No estoy molesto, tampoco quiero las flores y no me interesa lo que pasó, sólo has tu trabajo y arreglalo- Expliqué.

Sungjae un poco cabizbajo me respondió con un tono más tranquilo.

-Yo no hice nada jefe, de eso quería hablarle...-

-¿Qué?- Lo miré con confusión, si no fue Sungjae, entonces no tenía idea de lo que pasó.

-También salió en las noticias, páginas que salieron de la nada comenzaron a realizar rumores de sobreexposición en la empresa, malos pagos, además de fraude y otras cosas-

-Sungjae, espera, debemos ir a mi oficina, ni siquiera he entrado al elevador y el estacionamiento no es un buen lugar para hablar de esto- Tenía que tener la cabeza fría (Como siempre) y pensar en todo, incluso en aquellos periodistas que se escondían hasta abajo de los autos solo para grabar conversaciones.

Sungjae solo asintió y se hizo a un lado con todo y sus apestosas flores, así dejandome pasar al elevador, aprete el botón y metí una llave que nos llevaría directamente a mí oficina.
Mientras subíamos pude notar que Sungjae andaba mandando mensajes a un tal SeokJ, pero como me daba igual desvíe la mirada esperando llegar pronto para comenzar a resolver lo de dichas páginas y rumores.

Se escuchó el sonido que avisa hemos llegado y rápidamente me abrí paso hasta el escritorio, seguido de mí Sungjae dejo las flores en el escritorio y se acercó una silla para ponerse frente a mí.

-Bien, ¿qué más sabes sobre las páginas y eso?-

-Bueno de ahí nacieron los rumores, pero en las redes sociales también comenzaron hacer viral dichas noticias falsas, pero hay algo extraño, no duró casi nada como normalmente sería un escándalo, fue cosa de horas y después todas las páginas desaparecieron  y con ellas todas las falsas noticias- Me miraba preocupado, como si estuviera escondiendome algo.

-¿Qué más? Conozco tu cara de perro, sabes algo más así que comienza hablar- A veces debo ser de esta forma, no por que me guste, sino, por que no me puedo dar el lujo de que me vean como un blanco fácil.

Con un gran suspiro Sungjae desvió la mirada y respondió.

-Jefe he trabajado para usted estos ultimos 2 años, sé que no es nada a comparación de otros, pero le prometo que siempre he sido completamente honesto. Me di a la tarea de ratsrear dichas páginas, pero por alguna razón decía que la IP era de Corea, concretamente, aquí, en estas oficinas- Volvió la vista a mí y continuó. -Saqué toda la información posible y lo que me preocupa es que se hicieron desde su ordenador- Dicho esto comencé a reír.

-Cuanto drama Sungjae, eso es imposible, primero por que es un dolor de culo entrar si quiera a la empresa y segundo, por que nadie tiene acceso a esta oficina, absolutamente nadie que no sea yo, y si no estoy yo no hay forma de que alguien más entre, quizás te equivocaste y ya- Parecía que intentará calmarlo, pero realmente estaba intentando calmarme a mí.

-Vamos Sungjae, vuelve a tu trabajo, cálmate, de todas formas traeré gente para que resuelva y verifique todo, puedes estar tranquilo- Le sonreí, me devolvió la sonrisa y casi como un susurro respondió "Si", en ese momento se levanto y caminó hasta la salida, pero antes lo detuve.

-¡Espera!- volteó y continúe. -¿Es por todo eso que traes las flores?- le pregunte con un tono burlón.

Sungjae sonrió un poco más.

-No jefe, no es por eso. Dicho esto salió de la oficina.

Definitivamente este día era muy raro.