Mónica Turpin.
Una adolescente de 16 años vive en un pequeño pueblo donde no habita mucha gente. En aquél pueblo se rumora una historia antigua y muy poco creíble para ella,aquella historia que parecía patética para Mónica consistía en qué en el bos...
Mi nombre es Mónica Turpin,tengo 16 años y vivo en un pueblo muy pequeño llamado Boulevardgüy aquí no habita mucha gente por lo cual es agradable para mí, siempre está lloviendo y con mucho frío,tanto frío que hasta sabe nevar en temporadas "Calurosas" entre comillas por qué aquí nunca hace calor.
Vivo con mi madre,ella se divorcio de mi padre hace un año por razones las cuales no sé ni me importaría saberlas,mi madre trabaja en un supermercado y su función allí es de cajera ella está en la tanda de noche así que todas las noches estoy sola en casa.
En este pequeño pueblo se rumora una historia bastante estúpida para mí,cerca de mi casa o más bien detrás de mí casa hay un enorme bosque,las personas dicen que allí habitan criaturas extrañas que no son humanas. Lo raro y estúpido de todo esto es que yo nunca eh visto nada raro en ese bosque,la ventana de mi cuarto queda frente a frente y nunca eh visto nada fuera de lo normal y de hecho en días que estoy aburrida me pongo a observarlo,sea de día o de noche y no veo nada raro.
Son las 6:45 de la noche,mi madre ya se fue al trabajo y me a dejado total mente sola,como siempre.
Hoy es sábado así que no voy al instituto y aunque fuese lunes tampoco iría por qué estoy de vacaciones. Luego de llevar días meditando eh decidido hacer una visita en aquél bosque y ver lo que tanto la gente rumora,lo sé,soy una loca desquiciada.
Llevo una mochila equipada con todo lo necesario: Botiquín de primeros auxilios, linterna de batería, celular con batería llena al 100%,una botella de agua,algo para comer por si me da hambre y por si a las "Criaturas extrañas" también se les antoja comer. ¡Listo!.
Debo regresar a casa antes de las 5:30 de la mañana así mi madre no se da cuenta de mi salida al bosque.
-Bueno Mónica,te deseo suerte a ti misma-Me dije a mi misma en un susurro poco audible que solo yo podía escuchar. Salí por la puerta trasera de mi casa por si mi madre le había dicho algún vecino que me echará el ojo.
Me introduje al bosque con cuidado así ninguna rama me cortaría la piel. ¡POR DIOS! Llevo como media hora de camino y solo veo árboles y ramas secas,bueno era de esperar Mónica,estás en un puto bosque. Caminé y caminé y nada,caminé otro poco más y ¡NADA!, Mejor me recuesto de un árbol así almuerzo algo y luego sigo.
-¿Que hace una chica tan bonita sola por aquí?-Escuhe a alguien preguntar por entre los árboles,creo era masculino por qué su voz era muy ronca.
-Lo mismo te preguntaría pero no te....-Espera,estoy "Sola" en un bosque,de noche,se supone que no hay nadie.- ¡AAAAAAH!.-Grite lo más que pude y me eche a correr, más no pude seguir por qué tropecé con una maldita rama y caí al suelo.¡Mierda!.
Escuché unos pasos acercarse a mí y luego me sujetaron del cabello y me alzaron haciendo que quede de espaldas a aquél susodicho.
-No me respondiste la pregunta, preciosa-Me susurro al oído.
Una lágrima recorrió mi mejilla izquierda,es obvio que llore ahora,seré violada y asesinada en medio de este estúpido bosque.
-¡No me hagas daño por favor!-Suplique entre sollozos.
-Eso lo hubieras pensado antes de venir aquí. Dime algo preciosa,¿Que viniste hacer aquí?-Me pregunto con una voz muy escalofriante.
-Vine en busca de un resort que está cerca de por aquí-Respondi sarcástica acompañado de una carcajada.
-¿Me estás tomando el pelo?-Hizo el agarré de mi cabello más fuerte haciendo que grite de dolor-¿Que quieres estúpida humana?-
¡¿Que?,¿Que?! ¿HUMANA?.
-¿Humana?, Y tú qué eres ¿Un ovni?-Ok Mónica,te estás pasando.
Obvió hice enojar al agresor y terminé lanzada al suelo, causando que chocará mi cabeza con una roca y terminé desmallada.
-¿Está despertando?....¡Sebas!.... está....-Escuchaba voces hablar pero no entendía nada,la cabeza me dolía y sentía un lado de está arder,¡Mierda! Al parecer me desmayé.
Fui abriendo los ojos poco a poco y al fin los pude abrir,¿Que?....¡¿Que?!....¿Dónde estoy?.
Me encontraba en una habitacion muy diferente a la mía, acostada en una cama que no era la mia y a mi lado había una chica como de 19 o 20 años y por la puerta entraba un chico como de la edad de la chica.
-Hola,preciosa-Me dice aquel chico que acababa de entrar. ¿Preciosa?.
Lo observó acercarse a mí y se sienta en la cama a mi lado.
-Estas en mi casa-Dice-Anoche estabamos en una plática la cuál no terminamos.
¿Que plática? ¿De que rayos me habla? ¿Por qué no estoy en mi casa?
-Dejala Sebas,está desorientada. ¡Además fuiste muy fuerte con ella! Casi la matas. No sabes en el lío que nos íbamos a meter si el Sr. Flech se entera de lo que le hiciste-Le grito al pobre chico.
-¿Que me hiciste?,¿Por qué me duele tanto la cabeza?-Pregunte aún con el dolor de cabeza matándome.
-Como te decía preciosa, anoche estabas en el bosque y yo te encontré. En fin lo que quiero saber es ¿Que buscabas en el bosque?-
-Lo siento pero no recuerdo nada,solo sé que me dirijía al bosque y no se más nada. Lo juro.-
-Bueno, descansa-Me ordenó la chica. Los dos salieron del cuarto dejandome totalmente sola.
Luego como de 10 minutos la puerta se volvió abrir,era sebas pero está vez vino solo y con una bandeja con comida.
-Toma-Dice pasándome la bandeja a mis manos para luego sentarse en la cama a mi lado-Ya emos sido demasiados buenos contigo,¿Que buscabas en el bosque?-
Por qué la misma pregunta? A el que le importa lo que allá estado haciendo en el bosque,total esto no es territorio suyo.
-siento decirte ésto pero,el bosque no es suyo y lo que yo haga en el o no,es no les debe de importar,por qué....-
-Silencio-No me dejó terminar-Te equivocas. ¿Nunca has escuchado de aquella historia que de rumora por el pueblo?-me pregunto con una expresión en su cara como de una persona desquiciada.
-Si-Asenti con la cabeza.
-Bien,esas criaturas "Raras" como les llaman ustedes los humanos somos nosotros. Bueno Princesa,creo que no te gustaría morir Hoy,¿O si?-Me preguntó alzando una ceja,negué torpemente a su pregunta.
Su rostro se fue acercando al mío y sin preguntar unió sus labios con los míos dándome un beso cálido y despacio
Mónica Turpin
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