Club de la Ducha [NANBAKA]

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- permiso. -dice suavemente el joven peliverde, pasando entre los reclusos 15 y 99, sintiendo una suave tensión, pero poco le importó.

Entró a las calientes duchas.

No le perturbó escuchar algunos jadeos y choques de pieles, a estas altura no tiene porqué sorprenderse. Ya vio mucha mierda.
Entró a una de las duchas que estaban solas y allí comenzó a darse su propia ducha con tranquilidad.

Sabía que sus amigos estaban ocupados con sus propios asuntos, no iba a interferir en eso.
No juzga a sus amigos, sería tonto si lo hiciera, puesto que su propio historial con drogas le impedía hacerlo. Son humanos, tienen debilidades y eso lo entiende, no es niño. Sabe que parece uno, le gusta saber que su físico es joven y que así será, es más, Uno le envidia por eso.
No tiene porqué envidiarle, piensa él, pues a parte de eso, es completamente normal. Lindo, sí, lo reconoce, pero no guapo como Uno, tanto así que las mujeres le pueden llover. O como los reclusos 0382 y 0303, no les llegaba ni a la sombra.

Sigue desvariando en su mente, hasta que sale de esta.

Sale de sus pensamientos por un grito que escucha en una de las duchas que están cerca de la suya. Es allí dónde pone más atención al ambiente. No se gira a ver, solo escucha.

Escucha los sonidos tan sucios y placenteros que escapan de sus labios, el como las pieles se encuentran con violencia, el agua cayendo sobre las baldosas y los cuerpos...
Tiembla en su lugar, puede sentir como su corazón late con fuerza y como por sus venas corre cierta excitación.

Su joven mente no evita pensar en lo excitante y placetero que sería coger otra vez... O ser cogido. Saber porqué gritaban de placer, porqué se retorcían de placer aquellos reclusos que estaban contra la pared. Le daba curiosidad y le excitaba la idea.

Suspira con pesadez, bajando la mirada con vergüenza para confirmar lo que ya sabía: estaba excitado.
No es como si nunca se hubiera excitado o masturbado, pero le empieza a frustrar que ya no es suficiente, que su propia mano comienza a cansarle y sabe que en cuanto comience a tocarse (otra vez) no terminaría satisfecho.
Vuelve a alzar la mirada, dejando que su cara se mojara directamente otra vez y trata de ignorar la excitación y el ambiente a su alrededor, mas es difícil. Su mente sigue visualizando distintas y excitantes situaciones con personas sin cara y eso no ayuda a bajar la temperatura de su cuerpo.
Siente escalofríos al imaginarse siendo embestido contra una fría pared, siendo penetrado violentamente en cuatro, siendo cogido suavemente bajo la luz de la luna, montándose sobre el pene ajeno... Distintas fantasías sin un rostro en concreto.

Suspira con pesadez.

Es difícil oprimir sus impulsos y aun más cuando es joven en un ambiente tan sexoso. Es difícil, mas no imposible. Respira hondo y logra calmar su cuerpo, justo antes de que tres golpecillos se escucharan en la pared.
Nico se gira y ve a su gran compañero de celda.

- ¿Estás ocupando la ducha con alguien más? -pregunta con tranquilidad su mayor.

- no no, adelante, Rock. -responde con una sonrisa, haciéndose a un lado para dejar el agua libre.

- ugh gracias, -expresa con alivio, entrando y colocándose bajo el agua.- todas las duchas están ocupadas, y ya sabes como son aquí: o coges o no te bañas, prácticamente. -habla con algo de molestia, pero en verdad intenta alivianar el ambiente.

Nico no responde, y no es necesario, solo sigue con su rutina de aseo y sus pensamientos de una formas más tranquila, ya no piensa como un adolescente calienturento, sino como un chico curioso y dudoso e inexperto.
Él no es como Rock, quién ya es un adulto que ha vivido bastantes cosas, mucho más que él mismo. Él sabe de experiencias.

- Rock. -le llama débilmente.

- ¿Qué pasa, pequeño? -le vuelve a ver el mayor.

- ¿Cuándo...? Dios ¿Cuándo voy a tener mi primera vez?

Sus movimientos se detienen en seco mientras sus ojos se abren con sorpresa y se mueven con incomodidad. Sabía de la virginidad del chico, pero nunca lo habían hablado así.

- bueno... Cua-ando tú quieras. -dice con un poco de obviedad.- cuando te sientas preparado y sepas con quién hacerlo, hazlo.

- pero... ¿Cuándo? Todos aquí ya lo tuvieron y-

- Nico, es comprensible que lo quieras y sí, entiendo tus ganas de eso pero yo no puedo hacer más que aconsejarte que esperes tu momento y lo hagas especial. No lo vayas a volver algo sucio como lo hacen aquí.

- ¿Cómo tú? -se le escapa ese comentario que logra hacer reír al mayor.

- exactamente. Encuentra a alguien especial que te haga sentir en las nubes. Hasta entonces, ten paciencia.

- paciencia, sí. -suspira con pesadez.- ya estoy cansado de esperar Rock, quiero hacerlo.

- ¿Y qué quieres que haga? -le responde con molestia.- ¿Qué quieres, que coja contigo? Por dios, solo te puedo aconsejar porque eso es lo que debo hacer como amigo...

Nico deja de prestarle atención a lo que dice mientras su mente le vuelve a jugar sucio, muy sucio.

Su mente vuelve a imaginarse siendo embestido contra una fría pared, siendo penetrado violentamente en cuatro, siendo cogido suavemente bajo la luz de la luna, montándose sobre el pene ajeno... Distintas fantasías y ahora había un rostro.

¡Claro! ¿Cómo pudo ser tan tonto como para no tener esa idea?

- Rock, -lo calla, tomandole por los hombros y acercándolo a él.- cógeme.

[ c o n t i n u a r a ]

Heeey, I'm alive

So feliz navidad (y esas huevadas), si puedo actualizo antes del nuevo año y x.

¿Vieron la serie que les dije? La coreana que les dije en el apartado 03, espero que sí porque estoy trabajando en un nuevo fanfic que está a nada de salir. Y como no lo apoyen, dejo de escribir esta huevada.

-laugh in evil-

Y recuerden chico, amenacen para que lean sus otras historias.
¡Y hasta la proxima, chicos!

-se va a amar a Kyung dios Hoon y a esperar la nueva temporada de Saiki K.-

-LittleCrazyX3