Epígrafe

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Estaba en los exámenes finales para terminar el año, cuando una llamada en pleno examen me dejó sorprendida.

Mi madre la cual no veía desde hace un año y medio me llamaba, al no llegar a contestar ya que esté era mí último examen para saber si pasaba o no.

Cuando termine el examen y me dieron la noticia que había pasado, salo feliz del establecimiento, ya que era mí último año, ya el año que viene iría a la universidad, la cual aún no sé.

Nuevamente mí madre me estaba llamando, ahora sí atendí el llamado.

—Hola, mamá —Abri la puerta del auto, tire la mochila hacia atrás y cerré la puerta.

—¿Señorita Prieto? —No era mí madre, era otra persona.

—Si, ella misma, ¿Que hace con el celular de mí madre? —Pregunte, introduje la llave y encendí el auto.

—Su madre sufrió un accidente —Me quedo estática —Lamentablemente no sobrevivió.

—¿Co...cómo? —Apague el motor del auto y apoye mí cabeza sobre la ventana.

—Lo lamentó mucho —Hablo —Tendra que venir a Blackwood —¿En el pueblo que vivía y trabajaba mí madre? —Su madre dejo un recado en la casa de los señores Underwood, la señora quiere verla lo más antes posible, ¿Podrá ser?

—Claro, me podría pasar la ubicación por mensaje si no sería una molestía —Tendria que ir a ver a mí tía y comunicarle lo sucedido.

—Claro señorita —Corto la llamada y a los segundo me mandó la ubicación, la guarde en el GPS y volví a encender el auto, lo puse en marcha.

Al llegar a la casa de mí tía, me lleve la sorpresa que ya lo sabía, cómo no se pudieron comunicar conmigo al principio le hicieron saber primero a ella, debió ser cuando llamaron la primera vez y no pude atender.

Cuando arregle todo con mí tía, arregle mí maleta ya que no se cuanto me tomaría estar allá.

Subí la maleta a mí auto y prendí el GPS para poder ir a Blackwood, me lleve la sorpresa que me tardaría mínimo cinco horas.

Llegaría a la madrugada allí.

Blackwood | Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora