6. El cobarde y borracho

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Nadie podía considerar a Kakashi como alguien cobarde, no después de revisar su extensa lista de misiones de rango S y todas las situaciones verdaderamente complicadas y descabelladas en las que se había encontrado y sin olvidar claro su implacable sangre fría. Nadie puede considerarlo un cobarde, pero claro para convertirse en uno sólo hacia falta una emoción.

Ught.

Vale, puede que en este caso varias de ellas.

Y es que mezclar amor, celos, inseguridades, vergüenza, reproches... y un gran batiburrillo más de indeseadas emociones pueden convertir al mismísimo Raikage en un cobarde.

Pero bueno si a la cobardía le añadimos un par de copas de sake en un bar de mala muerte a unas horas ciertamente reprochables, "porque claro las tres de la tarde de un fantástico y soleado lunes es comprensible encontrar al Hokage borracho y al borde de un coma etílico", totalmente entendible si hablásemos de Tsunade, pero aún así la mujer cumplía sus responsabilidades antes de perderse en la bebida.

Pero claro, encontrar al Hokage más listo de la historia matando todas sus neuronas útiles era demasiado preocupante.

Y el echo de que este presunto Hokage este hablado con sus Ninken y estos lo miren como una madre a punto de ahogar a su hijo por idiota era todavía más preocupante.

Pakkun esta considerando morder a Kakashi en un lugar no muy noble.
Pero no lo hace, la imagen representada ante sus caninos ojos es demasiado miserable.

- Kakashi....- El nombrado mueve la cabeza torpemente esperado centrar las borrosas imágenes que pasan delante de sus ojos y centrar la mirada en el pequeño canido que le habla.

- Mmmm... - Intentar formular una oración era una misión imposible en ese momento, lo más ingenioso era un triste "Mmmm" escurrido de su pastosa boca.

- Refugiarte en el alchol y balbucear incoherencias no creo que ayude a mejorar la situación....¿sabes? Todavía me acuerdo de tu... Oi.. ¿¡Kakashi?! Oiii... ¡Por todos los cuencos!

Bien.

Puede que terminar con coma etílico rodeado de perros a las tres de la tarde de un lunes no sea lo más memorable que ha echo.

Definitivamente no, no lo ha sido.

[🌻]

¿Como debería sentirse? Es decir la anormalidad en su vida esta a la orden del día, al menos desde que su queridisimo padre pensara que meterle a Kurama en la barriga era una  muy buena idea.

Pero claro eso no significa nada, no ahora, no en esta situación, no está mañana.

Porqué claro es completamente normal encontrarse a los Ninken de su Sensei en la ducha.

Si, en la ducha, aunque no lo parezca Naruto se ducha y para sorpresa de sus amigos regularmente y con champú de fresas.

Y podemos recalcar que las mañanas tranquilas de Naruto Uzumaki se han extinguido.

- Pak..kkun - Bien su voz parecía el grito ahogado de Hinata. - ¿Qué hacéis aquí? Específicamente aquí en mi ducha...

- Kakashi ha tenido un problema...

Vale, problema..problema no era, lo podríamos clasificar como estupidez huama común, pero claro eso Naruto no lo sabía.

- ¡oh dios¡ ¿esta bien? - Naruto empezó a moverse a gran velocidad, saliendo del baño más rápido que el mismísimo rayo amarillo de Konoha - ¡¿Chicoooos?! ¡NECESITO RESPUESTAS!

Pakkun miraba curioso como Naruto se movía con rapidez en la sala, vistiendose de manera acelerada y un tanto daltonica.

- Esta bien... O eso se podría decir... - murmuró con desgana Bisuke.

- Respira por si te consuela...

Un chillido, si había soltado un pequeño chillido, uno obviamente masculino de agobio, mientras miraba a Bisuke y Pakkun con preocupación.

- Calmate Naruto, Kakashi esta bien solo un poco borracho. - Kakashi y borracho no van junto en la misma frase, no conocía a nadie capaz de aguantar el alchol mejor que él.

- ¿Como que borracho?

- Borrachisimo - soltaba Pakkun mientras se rasca a una oreja.

[🌻]

Sakura estaba mirando con reproche a Kakashi, mientras este se escondia entre las sábanas blancas del hospital.

- ¿Y bien? - Kakashi saco la mitad de su cabeza para mirar a su ex alumna con recelo, sus oídos pintaban y su cabeza dolía como si le golpearan con doscientos chidoris. Farfullo con desgana un que de mala manera.

Ese tono no era el adecuado, no ahora, no cuando la tranquila Sakura pendía de un fino hilo.
Sakura es tranquila, bueno a veces, normalmente si pero hoy está un pelin estresada, su supuesto novio, lo llamamos supuesto porqué está a dos miradas frías más de perder el otro brazo, y es que tratar con él en su momento de princesa emo no era lo mejor y el echo de recrminarle todo lo que hacía últimamente en su cara no era muy alentador, teniendo en cuenta que había esperado a ese bastardo durante años...

Pero esa es otra historia.

- ¿Que?¡COMO QUE, QUE! - Sakura arrancó violentamente la sábana que cubría a su sensei. Kakashi se cubrío la boca con rapidez buscando una mascarilla de infermera en la mesita de noche con desesperación.

- Se puede saber qué pasa por tu cabeza Kakashi-sensei, te has emborrachado de forma irresponsable y terriblemente peligrosa un lunes ¡un lunes! ¡a las tres de la tarde! Por dios, los niños salen de la academia a esa hora no crees que se procurarán al ver a su Hokage en un bar de mala muerte inconsciente y rodeado de perros. Si no fuera por Pakkun estarías muerto o algo parecido ¡te he echo dos lavados de estómago!¡Dos!

- ... - Se sentía totalmente cobarde.

- Sensei estoy preocupada por ti, por favor tienes que decirme que pasa..

- Naruto...

Silencio, dulce y triste silencio.

- O dios... No me digas.. Kakashi..eso es...es...

Konoha {KakaNaru} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora