7. Sakura es la Jefa

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Sabía que Naruto perdía el culo por Kakashi, lo asumió talvez después del primer tartamudeo los pequeños sorojos y las miradas poco indiscretas.

Si, Naruto profesaba un amor irracional hacia su profesor, diría que igualaba el amor que sentía por él ramen.

Y es que ver los ojos brillantes e ilusionados de Naruto al ver a Kakashi por primera vez le recordo la  primera vez que vio al bastardo de su futuro ex novio.

Porque Sasuke no merecía ser llamado novio, no después de dejarla plantada incontables veces de poner excusas poco creíbles y de mentirle descaradamente en la cara, como si esperarle durante años no fuera suficiente ahora tenía que aguantar a la princesita emo en su fase rebelde. Sakura tenía más orgullo que eso, muchísimo más, había conseguido convertirse en una gran Shinobi, a puro esfuerzo y determinación. No necesitaba a un crío que le complicase la vida.

Quitando ese hecho, estaba segura que Kakashi y Naruto se amaban mutuamente, vamos los veía juntos y cabalgando hacia el amanecer en un campo de margaritas, no necesitaba que le refregasen por la cara su mutuo amor. No cuando ella quería clavar un kunai en la tráquea de su amado.

Por eso no entendía a Kakashi, ¿no era más sencillo confesar sus sentimientos y cerrar el capítulo?

No claro que no, era más sencillo jugar al idiota celoso y borracho estacional.

Pero todo tiene solución ¿no?

—Kakashi-sensei. —El nombrado miraba con cierto temor a la médica, no necesitaba un par de costillas rotas que hicieran juego con su hígado en fase terminal, no ahora, talvez mañana.

—¿Si? — Sakura no podía dejar de mirarlo con cierta envidia, era tan idiota, bueno los dos lo eran.

—Deberías pedirle una cita a Naruto.

—¿... una...cita...?

—Si, una cita. —Sakura dudaba de las neuronas funcionales del Hatake.

—Con Naruto...— La shinobi asintió enérgicamente.

—Si, con Naruto. —Repitió apretando los dientes mientras miraba con cierta molestia la cara de Kakashi.

Se acerco lo suficiente para intimadarlo un poco, poquito.

—Una cita con Naruto con final tipo Icha Icha Paradise...¡Por el amor de dios Kakashi no tienes 5 años!

— No es lo mismo.

Respira Sakura, estás en un hospital no puedes golpear a un paciente, no puedes hacerlo, es poco profesional.

A la mierda.

— ¡Joder! — Bien ahora podía respirar con más tranquilidad.

Kakashi masajeaba su adolorido brazo, había recibido un puñetazo sin miramientos por parte de la joven que seguía mirándolo como si fuera el idiota más grande de la aldea.

Que parte de razón no le faltaba, pero preferia dejarle ese lugar a Kiba y su nueva obsesesion por las mallas deportivas ajustadas.

Pedirle una cita a Naruto no era una idea descabellada ni mucho menos, pero si podía tener consecuencias no muy gratas, es decir, rompería la promesa con Tsunade-sama y no le apetecía un viaje de no retorno al cementerio.

[🌻]

Naruto estaba desconcertado, no entendía como alguien como Kakashi podía terminar ingresado por un coma etílico, era algo estúpido, era más lógico esperar algo así de Sai o incluso de Shino que no soportaban el alcohol de una manera muy sana, incluso él era mejor opción tenía una tolerancia zero a las bebidas alcohólicas y siempre terminaba muriendo en algún callejón a causa de Kiba y su gran boca.

No podia llegar a entender como alguien capaz de beber cinco botellas de sake sin perder las conciencia y siendo aun capaz de cantar el abecedario del derecho y el revés llegará a una coma etílico, era algo inaudito.

Naruto llevaba media hora en la recepción del hospital esperando que alguna infermera se dignara a decirle donde podía encontrar al Hokage. Tampoco podía ir como Pedro por su casa Sakura lo había regañado demasiadas veces ya.

Repicaba sus dedos con nerviosismo en el mostrador mientras una infermera tecleaba algo en el ordenador.

—¿Y bien? — la mujer levantó la cabeza para mirarlo con indiferencia y volver a bajarla a los cinco segundos para mirar con aburrimiento morbido la pantalla del monitor. —No puedo entregar información personal de los pacientes...

—Arghhhh...¡Vamos! — Naruto intentaba poner su mejor sonrisa seductora, por si las moscas.

¿A eso llamas sonrisa seductora?

— Cállate...

Era tan difícil conseguir algo de información, no estaba pidiendo su cuenta bancaria o algo así.
Pero la señorita no parecía querer dar su brazo a torcer ni aunque tuviera delante al héroe de Konoha.

—¿Naruto? — el nombrado giro la cabeza como un búho.

—¡Sakura-chan! — bien, Sakura es mi amiga, Sakura es la jefa, Sakura me podrá proporcionar información, Sakura no me dirá que no...

— No sabrás...

— Habitación 307.

¿Cómo?

— Te conozco cariño — palmeo con delicadeza al muchacho. — y te recuerdo que esto no es un hotel ¿vale?

¡Qué!

La sonrisa coqueta de la Shinobi lo descolocó un poco antes de sonrojarse con fuerza, salió, mejor dicho huyó antes de que dijera algo más.

— Este chico... — murmuró mientras miraba a la recepcionista con molestia.

—¡Oi¡ Naruto puede pedir cualquier tipo de información relacionada con el Hokage o parecido, no vuelvas a retenerlo ¿Si? — la recepcionista se encogió en la silla y asintió sin gracia.

Todo el personal médico sabía de las capacidades y cualidades de la joven nadie quería meterse con ella o buscar problemas, todos sabían que ella sería la futura jefa del hospital y el escuadrón especial de médicos Ninja, era un suicidio ir en contra de su palabra. Sakura es la jefa.






Konoha {KakaNaru} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora