P.O.V de (T/N)
Una semana... Ese es el plazo en el que llevo aquí, en Elmore, pintoresca ciudad con habitantes interesantes, que algunas veces me hace titularme como: la persona más aburrida que haya pisado esta metrópoli.
De la escuela, ni hablar. Intenté hacer amigos, pero no pude, toda la semana estuve muy ocupada, haciendo y entregando los trabajos y tareas asignadas durante el tiempo que no estuve, todo con el fin de estar al ritmo de mis compañeros. Incluso tomé los recreos y módulos libres para hacer aquellos deberes.
Por suerte para mí, hoy era sábado. Por fin había podido descansar y ser feliz por unas cuantas horas, a pesar de que aún tengo pendientes. El resto del día estaba destinado para echar flojera en el sofá, ver la televisión y comer un montón de comida chatarra, sin embargo, una llamada hizo cancelar mis planes.
Era una del señor Vicent. En resumen, me dijo que me preparara porque íbamos al centro comercial a "convivir como padre e hija". Hice caso a sus indicaciones, me bañé, me puse mis mejores prendas para la pequeña salida y esperé a que llegara.
Pero, no tuve que esperar tanto tiempo, porque él ya había llegado y para anunciar su arribada, sonó la bocina de su camioneta, por lo que salí de la casa con mi mochila, cerré la puerta con seguro y corrí hasta su nave.
"Hola", saludé y me subí a la camioneta roja. Él señor Vicent me sonrió y me mostró una chamarra.
"Mira lo que te compré, espero y te guste" , me dijo mientras me entregaba la prenda. No me gustó, pero de todas maneras me la puse para no herir sus sentimientos.
Después de esa pequeña interacción, Vicent encendió el vehículo y nos fuimos a nuestro destino.
»»————- ☠ ————-««
Cuando llegamos al centro comercial, lo primero que hicimos fue meternos en el supermercado. Las puertas automáticas se abrieron dándonos paso, entramos y tomamos nuestras canastas.
"Muy bien calabacita, vamos a dividir la lista como siempre lo hemos hecho" , me entregó un pedazo de papel y continúo con su explicación. "Y alguna que otra cosa que tú quieras o necesites, la tomas... pero no te excedas. Nos vemos en este mismo lugar en media hora"
Con eso aclarado, nos separamos en el supermercado. Tomé mi propio rumbo, paseando por los pasillos donde se encontraban los víveres de mi lista. En lo personal, esta es la mejor parte de estar en el supermercado, buscar los productos.
Después de un tiempo ya tenía mi canasta un poco llena. Pronto llegué al área de frutas, buscando cuál escoger. Y la que yo quería, lamentablemente estaba cara, pues no era temporada de aquella fruta. Entonces decidí que no iba a llevarme ninguna... Hasta que, vi un cartel que promocionaba a las sandías. Están al 50% de descuento... No creo que a Vicent le importe si me llevo una.
Me acerqué para ver cual me llevaba... Las observé. No soy una experta en sandías, pero creo que una pequeña sería el tamaño perfecto para dos personas. Cuando encontré la ideal, por alguna extraña razón quise sentirla, así qué puse mi mano sobre aquella fruta. La sensación de frío de la cáscara era lo mejor. Pero, inmediatamente sentí una presencia, ¡una mano encima de la mía! Entonces retiré inmediatamente mi mano. Levanté la mirada para ver quién era el o la invasora.
Me sorprendió ligeramente ver a un compañero de mi escuela. Era... Ay, ¿cómo se llamaba?
"Hola." , dijo aquel cíclope, con una pequeña sonrisa.
Sonreí torpemente y respondí al saludo también. "Hola."
Ahora, ¿quién se supone que debe seguir la repentina interacción para no dejarla morir? ¿Él o yo? Estaba a punto de hablar hasta que me interrumpió.
"¿Vas a querer la sandía o...?" , su mano seguía puesta en la fruta.
Le hubiera dicho que no, pero el sentimiento de que yo la vi primero no me dejó. "Sí, por algo la toqué"
"Pero no la agarraste"
"¿Y eso qué?", esta vez, me sentí un poco más altanera y me di cuenta de eso, por lo que desvíe la mirada. "Yo... no importa... ¡Quédate con la sandía!"
El chico esbozó una ligera sonrisa. Acto seguido empezó a analizar la fruta, la agitó y también intentó adivinar su peso.
"Ahí hay una báscula, ¿sabes?" , señalé lo que mencioné. ¿Quizás ser un cíclope te hace semi ciego?
"Ya sé, no creas que no la vi" , por último, olió la fruta y asintió.
"Entonces apruebas MI sandía" , no pude evitar recordar el hecho de que yo había encontrado esa fruta primero.
Él asintió y la puso en su canasta "Dijiste que ya no te importaba, así que aproveche mi oportunidad" , pero de un momento a otro sacó la pequeña sandía "Pero si quieres te la puedes quedar"
"¿En serio?" , pregunté con incredulidad "Si es así, gracias, Roy"
Después de eso el chico se me quedó mirando por unos largos segundos, antes de suspirar con mucha frustración, "Olvídalo, es mi sandía" Se dio la vuelta y se fue. Yo le llamé otra vez, pero no me hizo caso y dobló en un pasillo, desapareciendo de mi vista
"No pues, adiós... Supongo"
¿Por qué se fue así de la nada? ¿Acaso dije algo malo?
P.O.V de Rob:
¿Me llamó Roy?
¡¿ROY?!
¿Qué tan difícil es aprender mi maldito nombre? ¡Solo son tres letras!
No cabe duda de que es igual que el resto... Una decepción total.
Chavos y chavas, aquí esta el capítulo.
Lamento no haber actualizado rápido, pero aquí esta
Al final de cada capítulo les haré una pregunta, pues aquí les va
¿De qué país son?
Por cierto, feliz día de San Valentin atrasado :v
Sin mas que decir, hasta la próxima.
McGarden
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❝𝐇𝐞𝐚𝐫𝐭 𝐀𝐭𝐭𝐚𝐜𝐤❞ [Rob x Fem!Reader] (Tawog)
FanfictionMi primera historia ♡ '*:;,.★ ⌒ ☆・:.,;* Los personajes de Tawog que aparezcan en la historia, no me pertenecen. Son de Ben Bocquelet, a excepción de (T/N), que eres tú. Los dibujos, imágenes y/o letras de canciones que utilize aquí, no son míos, cré...