ACTUAL
¿Qué se les viene a la cabeza cuando piensan en una niña de 16 años? Aparte de la apariencia física, de la juventud, de los rasgos obvios ¿qué piensan que estaría haciendo?
Yo pienso que debería estar soñando, viviendo esos sueños, también sufriendo, enamorándose, saliendo con sus amigos y preocupándose de todo y a la vez de nada. Para mi, una niña de 16 años debería estar afuera en el mundo, conociéndolo y queriendo comérselo, viviendo todo intensamente.
Eso es lo primero que se me viene a la cabeza, pero mi realidad es otra. Hoy es mi cumpleaños número dieciséis, 5 de marzo del 2046, y para nada vivo todo lo que acabo de describir.
Mi mamá, Cecilia, me contó todo lo que ella hacia cuando cumplió mi edad, fue la primera vez que vivió el amor, no la primera vez que se enamoraba porque dice que siempre fue muy enamoradiza.
- Te juro, cada año me enamoraba de alguien nuevo. O eso creía, hasta que conocí a mi primer amor, y me di cuenta de que solemos usar la palabra "enamorarse" por cualquier cosa – me dijo ella mientras preparaba la comida para mi festejo
Yo iba a cumplir 16 años y ni una vez me había enamorado, ni iba a estar cerca de hacerlo. Lo más cercano al amor juvenil era mi mejor amigo, pero para mi era más un amor de hermanos.
- Oye Val ¿Va a venir Mario? – me preguntó mi mamá mientras metía el pastel al horno
- No lo sé ma, yo creo que si. Desde que nos conocemos nunca se pierde un festejo – le dije comiendo un pedazo de queso que estaba frente a mi
- Deja de comerte el queso, es para la botana – mi mamá me dio un manazo – es un gran chico, me cae bien
- Si, es lindo – le dije tranquilamente
- ¿Te gusta? – me preguntó mi mamá
- No – me levante de la silla y me estire - ¿a qué hora empieza todo el teatro? – le pregunté
- ¿teatro? Es tu festejo amor – me volteo a ver con tristeza – y empieza a las 4 pm
- ¿Festejo? Ay ma, sabes que no me gusta festejar.
No vayan a creer que soy malagradecida, que no es por ahí. Yo sé que una niña normal de 16 años estaría corriendo por toda su casa, arreglándose, arreglando todo, viendo que les va a dar de tomar a sus amigos, emocionada.
Pero yo no soy una niña normal, no hay nada mal conmigo, es solo que desde que nací vivo en un mundo muy diferente al que les toco a mis papás. Nací en el año 2030, y como cualquier persona común no recuerdo nada de mis primeros años de vida, pero mis papás me cuentan que siempre fui una niña muy callada y obediente, pero muy curiosa y juguetona.
Cuando cumplí 5 años mis papás me regalaron mi propio limpiador de aire, ¿a ustedes que les regalaron cuando cumplieron 5 años? Seguramente una muñeca, o un peluche, o algo con que jugar, pero no, a mi me regalaron un limpia aire.
¿Porqué? Bueno, a los tres años que nací se confirmo que el 95% del aire del planeta estaba contaminado, al punto que era casi imposible respirar sin que tus pulmones se dañaran. Ese año todo el mundo estaba obligado a salir con tapabocas, más que por obligación, era porque si no lo hacías era probable que a las pocas horas acabaras muy enfermo de las vías respiratorias o en el hospital debido a un parto respiratorio.
Al cuarto año crearon los limpiadores de aire familiares, el usar tapabocas aún era obligatorio, pero en cuanto llegabas a tu casa usabas el limpiador y decían que si lo hacías podías eliminar hasta el 70% del daño provocado por la mala calidad del aire. El gobierno obligo a todos los lugares que albergaran a un grupo de personas, escuelas, centros comerciales, restaurantes y por supuesto hospitales, que tuvieran por lo menos 50 limpiadores, y de ahí para arriba dependiendo la cantidad de personas que entraban y salían de sus establecimientos.
YOU ARE READING
Resiliencia
Science FictionLa vida nunca es fácil, y mucho menos cuando estas en un mundo nuevo lejos de todos los que amas. Mi nombre es Val y mi vida nunca ha sido normal, y entre más pasa el tiempo menos normal se vuelve. ¿Será que estamos destinados a ser más fuertes de...