01.Último día de clases

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Hoy es un día demasiado atariado, tengo que arreglar varias cosas en el instituto y la verdad mi hermano no ayuda en nada, Santiago o como le digo, Thiago, es un chico de 15 años, alto, de tez blanca, cabellera rubia. Un chico problemático y rebelde pero nos llevamos bien.

¿Entonces cuál es el problema de hoy?, es que hace media hora está en el baño y no sale, es la quinta vez que toco a la puerta, a veces pienso que la naturaleza debió mandarme una hermana, tal vez ella tardaría menos.

- Thiago, sal de ahi o tiro la puerta, ¿no puedes apurarte?.-La puerta se abrió, Aleluya, gracias Dios, como siempre mi hermano sale con su expresión divertida, lo cual siempre me saca de quicio

- Ya está, es todo tuyo

- Idiota.-Me encierro en el baño, quito la ropa y enciendo la regadera, hoy el agua está demasiado fría, maldito Thiago, se ha acabado la caliente, lo voy a matar en cuanto salga, si eso haré.

He tenido que darme un baño express, como siempre me he colocado el bendito uniforme del colegio, una falda negra de tablones corta, una camisa polo blanca, una chaqueta con el escudo del colegio, calcetas blancas y zapatos negros, no se quien rayos inventó el uniforme, pero es un asco. Recogí mi cabello en una coleta, al fin he salido del cuarto de baño, espero que algun día se dignen en colocarme un baño para mí sola, pero por ahora tengo que soportar compartir el baño con Thiago.

Al bajar las escaleras puedo mirar como mamá prepara el desayuno y le acomoda la corbata a papá, ellos parecen ser felices, pero no es mi concepto de una vida feliz, no me imagino estando en una casa cuidando de los hijos de un hombre.

Mi madre es una mujer de 33 años, alta, delgada, de cabellera negra que llega hasta la cintura, ojos color miel, reservada, con buenos modales y valores; mi padre es un hombre de 35 años, alto, bronceado, de cabellera castaña con toques de dorado, de ojos verdes, de buen parecer.

Bajo rumbo a la cocina y tomo una manzana dandole una mordida.

- ¿No vas a desayunar?

- No tengo tiempo, quedé de encontrarme con Ian, desayuno en la cafetería del colegio.-Ian es lo que se podría llamar mi amigo con beneficios, es un chico de mi edad, alto, cabello negro, ojos azules y tez blanca, todo un adonis.

- ¿Qué es exactamente lo que son tú e Ian?.-Dice mi madre, ¿encerio?, ya no estamos en los años antigüos, ahora no es como en sus tiempos.

- Ya lo sabes, y no voy a empezar una discusión, así que ahorrate los sermones

- Emma

- No Thiago, ya no estamos en la época donde la mujer debe ser una santa

- Bien, ya no cuestionaré tu relación con ese muchacho, cuidate

- Adiós.-Me harta cuando quieren meterse en mi vida, yo no cuestiono nada sobre ellos y ellos no se meten en lo mío con Ian, así fue nuestro acuerdo, cuando mamá se enteró de nuestra "relación" se disgustó demasiado, pero aprendió que debe dejarme vivir mi vida, además ni que fuera a salir embarazada, no soy una tonta niña descerebrada, siempre lo hacemos con protección.

Ya voy de camino a encontrarme con Ian, jamás le gusta que vaya a buscarlo a su casa, ya que dice que no quiere que sus padres lo cuestionen sobre nosotros

- Em.-Esa es la voz de Ian, lo reconocería donde fuera.

- Hola Ian.-Se está acercando demasiado, pero siendo sincera amo cuando hace eso, coloqué mis manos en su abdomen y él me apegó a él besandome apasionadamente, sus besos son adictivos, demasiado diría yo, pero por suerte he aprendido a controlarme ante sus provocaciones, después de un rato me separé mirando sus ojos.

Niñera vs TwinsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora