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Por las calles de Konoha se podía observar a un rubio de ojos azul cielo y tez bronceada tratando de escapar de unos ninjas, pues al ser descubierto pintando las cabezas hokages Naruto salio huyendo pero no se esperaba que al esconderse detrás de una pared lo encontraría una joven de cabello color azabache.

—Silencio'ttebayo. —Dijo el rubio a la chica.

—¿Ahora que hiciste Naruto? — preguntó la joven al ojiazul .

—Larga historia _____-chan.

—Sabes que te atraparán ¿Cierto?

En ese momento pueden observar como llega Iruka-sensei.

—¿De camino a la academia _____-chan?— Preguntó ya que le parecía extraño verla ahí.

—Si sensei, ¿Qué lo trae por aquí? ¿Porqué no está en la academia en este momento? —Pregunta intentando ayudar a su amigo.

—Lo mismo que a ti, ¡Sal ya Naruto se que estas ahí! —Grito para hacerlo salir.

Al escuchar eso Naruto supo que no valía la pena seguir escondido, puesto que ya lo habían descubierto. Saltó sobre la cerca de madera para ver si conseguía escapar pero su sensei fue más rápido y logró atraparlo.

—¡¿A dónde crees que vas pequeño travieso!? —Exclamo al ver como trataba de escapar. — ¡Tú tampoco te irás pequeña! —Dijo al percatarse de que también se quería escapar. —Ambos limpiaran las cabezas hokages al terminar las clases.

—¡¿Yo porqué sensei!?— Pregunto con disconformidad pues le parecía injusto que la castigaran a ella, no había hecho nada solo iba caminando hacia la academia.

—Por ayudarle a ocultarse y llegar tarde, pues ya es complicidad además de que no ibas a cumplir con tu horario.

Ya no pudo objetar nada, el sensei tenía razón y no había marcha atrás. Iruka-sensei llevó a ambos jóvenes a la academia, entraron al salón y lo único que podían escuchar era como sus compañeros rumoreaban sobre qué había hecho Naruto esta vez y porqué estaba ella involucrada.

—¡Gracias a la broma que realizaron sus compañeros hoy tendremos examen!— Al escuchar eso, todos voltearon hacia ellos con miradas asesinas en sus rostros.

Ambos fueron hacia sus asientos, la Hatake fue como siempre a sentarse junto a Shikamaru.

—Buen trabajo mujer problemática. —Dijo el joven con algo de reproche en su tono.

—Calla Shikavago, no es tu asunto. —Respondió con molestia.

—Claro, es de todo el grupo ya que gracias a ustedes ahora tenemos examen. Que fastidio. —Contestó retándola.

—Silencio, yo solo venía hacia acá, me encontré con Naruto, después el sensei nos encontró a los dos y lo malentendió. —Explicó dando a entender que el problema no era suyo.

—Pero igual pudiste evitarlo. —Trató de molestarla más.

—Callaté o te juro que no vas a poder caminar. —Lo amenazó ella para tratar de callarlo, pues ya la había hartado.

—Inténtalo, yo no tengo problema en golpear a una niña. —Respondió con algo de superioridad mientras soltaba un bostezo.

Se abalanzó hacia él cayendo sentada encima suyo, al intentar golpearlo le tomo el brazo y cambio papeles estando él encima de la Hatake mientras se sostenía con sus brazos los cuales estaban uno a cada costado de su cabeza.

—¿Te rindes problemática? — Preguntó él mientras la detenía debajo suyo.

—¡No!

—¿Segura?, yo no veo la posibilidad de que ganes esta pelea.

Del odio al amor solo hay un paso (Shikamaru y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora