I Was Here

3. Decisiones

No me había dado cuenta que ya tengo medio año sin actualizar esta historia :o pensé que había sido en el mes de mi operación, pero no. Una disculpa... bueno, de nuevo aquí actualizando jaja.

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Habían pasado dos semanas desde la lamentable noticia de la enfermedad de Taehyung, la familia Jeon-Kim había decidido de manera silenciosa no comentar nada sobre el tema, tanto Tae como Jungkook pensaban que era mejor que sus hijos en el momento en que se sintieran listo volvieran a hablar de ello, por ahora era mejor fingir que todo seguía como normalmente.

Claro, eso era por parte de los hijos, el matrimonio en cambio tenía muchas cosas de que hablar, lo quisieran o no.

- Las grandes cuentas están a mi nombre en caso de que tu murieras, cosa que no pasará... así que lo mejor es modificarlas a nombre de nuestros hijos - habló Taehyung viendo algunos papeles de bancos.

- Tae... no deberíamos preocuparnos de esto tan pronto

Su marido lo miró molesto - Mientras mas pronto mejor... quiero irme sabiendo que dejamos todo listo, Jungkook - el nombrado se levantó de la mesa exasperado, ¿su esposo no comprendía que lo último en lo que quería pensar era en su inevitable separación?

Taehyung suspiró, se acercó a su esposo y tomó delicadamente su rostro con sus manos dejando un casto beso en sus labios - Sé que te duele, sé que quizá estoy llevandote al límite, pero quiero hacer esto mientras puedo, mientras tengo las suficientes fuerzas... está enfermedad puede ir lenta, pero también rápida, no sé  cuanto tiempo tomará para caer en cama, por eso te pido que me apoyes, por favor, cariño... - pidió de manera dulce, Jungkook miró a sus ojos y en medio del silencio asintió.

- Lamento hacerte eso

- Tu no estás haciendo nada, Tae

Lo abrazó y dejó un beso en la frente para después separarse y ayudarle a organizar los papeles, poco a poco se fueron organizando, tenían bastantito dinero ahorrado en dos cuentas, mas que nada para el futuro de sus hijos y bueno, del futuro de ambos, un futuro que lamentablemente no compartirían como fue planeado.

Una vez terminaron pasaron a hablar de otro tema - La casa... quiero que también la dejemos a nombre de nuestros hijos, no quiero que en un futuro ni tu ni ellos tengan que pasar por un estúpido e innecesario juicio - Jungkook estuvo de acuerdo.

Una vez arreglaron uno que otro papel, Jungkook tomó su saco para ir al trabajo - Estaré aquí para cenar - anunció, Taehyung asintió con una sonrisa.

- ¿Pasarás por Lisa? - preguntó Jungkook, temía que su esposo se sintiera mal o debil como para manejar.

- Si, no te preocupes

Jungkook se acercó y dejó un beso en sus labios - te amo, nos vemos en la noche - salió de la casa pues ya se le había hecho un poco tarde, Taehyung fue a la cocina a lavar los pocos trastes que había, intentando no pensar, al menos en esos días había estado bien de salud, al parecer el medicamento le estaba ayudando a sentirse bien.

Se dirigió al cuarto de Lisa que como siempre estaba bastante limpio y organizado, tomó la ropa sucia que estaba dentro de su respectivo bote y se la llevó a la lavadora, después pasó al cuarto de su hijo, no le sorprendió verlo bastante desordenado, sonrió divertido, Jimin no cambiaba, tendría que regañarlo...

Bueno, mejor no.

Se acercó a la cama para tenderla de manera correcta, cuando se dio cuenta que había algo debajo de la almohada, tomó el papel con cuidado y se dio cuenta que era una foto, una foto de ambos, la reconocía de hace dos años cuando se lo llevo de viaje, pues Jungkook no había podido ir por trabajo y Lisa había enfermado de resfriado, pero ambos los convencieron de ir juntos a Japón. 

Taehyung sintió las lágrimas acumularse en sus ojos al entender el porque de la foto debajo de la almohada, su hijo sufría en silencio, su hijo había estado actuando tan normal como si nada pasara, pero estaba mas que claro que tenía mas que presente la situación.

Observó a su alrededor el cuarto de Jimin, recordando cuando ayudo a pintarlo, le dolía reconocer su situación, saber que en unos años probablemente el cuarto cambiaría nuevamente, pero él ya no sería parte de ese cambio, ya no estaría.

Y, aunque intentaba resignarse, estaba muy lejos de hacerlo.
Odiaba el tener esa enfermedad, odiaba aceptar que no podía hacer nada para evitarlo.
Odiaba ser el motivo del sufrimiento de su familia.
Odiaba estar sentenciado a muerte.

***

Jungkook intentaba concentrarse en su trabajo, pero le era imposible, no con todos aquellos sentimientos de impotencia controlando su mente y corazón, y es que parecía imposible que cada días que pasaba era uno más cerca para decirle adiós al amor de su vida, no podía aceptar que en unos meses o en un par de años, aquel hombre que alumbraba su vida se apagaría para siempre.

- Jungkook... estás llorando - escuchó a Mingyu, su compañero de trabajo.

Reaccionó al sentir sus mejillas húmedas, rápidamente procedió a secarlas, Mingyu lo miró preocupado - ¿Hay algo en lo que pueda ayudar? - preguntó consternado, nunca había visto a su compañero de ese modo.

- No... lamentablemente no hay nada por hacer

- ¿Que sucede, Jungkook? - preguntó ahora más preocupado al notar como la voz del azabache se quebraba al hablar.

- Mi esposo... tiene leucemia 

Mingyu abrió los ojos con sorpresa, conocía a Taehyung, había convivido con él, le parecía muy agradable, no podía creer que tuviera tan horrible enfermedad - Yo... lo siento - ahora comprendía el estado deprimente que acompañaba a su amigo.

- Intento ser fuerte, lo intento, pero siento que esto va a destruirme, y no puedo permitirme caer, me necesita más que nunca y mis hijos también, pero no creo ser lo suficientemente fuerte para soportar todo lo que viene, sin embargo... quiero hacerlo feliz, muy feliz en lo que le queda, pero no sé, no sé como hacerlo, no cuando me siento tan miserable 

Mingyu no supo que más hacer que abrazarlo y dejarlo que se desahogara.

***

La familia cenó de una manera bastante cordial, platicando de su día y de diversos temas, en cuanto terminaron de cenar, Lisa se ofreció a lavar los trastes sucios y Jimin a recoger la mesa, cosa que sorprendió a los padres, pero asintieron comprendiendo las acciones de sus hijos.

Una vez terminaron dieron las buenas noches y se fueron a sus respectivas habitaciones, Jungkook se bañó mientras Taehyung acomodaba la cama y se ponía la pijama, una vez los dos estuvieron listos para dormir se acomodaron en la cama, el azabache pasó su brazo por la cintura de su pareja, haciendo que quedaran recostados en "cucharita" dejó un beso en la nuca de Taehyung susurrando un "te amo" Taehyung sonrió y le contestó "también te amo, buenas noches, amor" y así a los pocos minutos pudo sentir como su esposo se quedó profundamente dormido.

De la manera mas suave que pudo afianzó el abrazo, pensando en que algún día sus brazos estarían vacíos, que no escucharía la respiración de su esposo y que un lado de la cama estaría completamente frío, las lágrimas no tardaron en salir nuevamente, calló sus sollozos, amaba como a nadie a su marido y la vida se lo estaba arrebatando.

En ese momento juró que su esposo no volvería a verlo triste, no, tenía que ser su fortaleza, esa era su decisión, iba a hacerlo sumamente feliz, ya después tendría toda una vida para llorarle.

Pero mientras su amado Taehyung respirara, él llenaría sus días de felicidad.

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Me enfoqué en el sufrimiento de la pareja, sobre todo en la de Jungkook
porque los próximos capítulos trataran de Taehyung y su relación con sus hijos.
¡Gracias x leer!