Por favor, no... {VerKwan}

Capítulo 1

SeungKwan era un joven de 19 años, de 1,74cm, cabello castaño, de mejillas regordetas, pero con un cuerpo tonificado y envidiable por algunas chicas, sobretodo su área trasera. Estaba en tercer año de la universidad, su antiguo compañero de piso ya se había graduado por lo que estaba en busca de otro, de esa manera conoció a Vernon, un chico de 19 años, de 1,78cm, cabello rubio, cuerpo ejercitado pero no exageradamente.

-Boo... ¿me oyes?-preguntó el menor agitando su mano delante del rostro de SeungKwan.

-Perdón... ¿qué decías?

-Otra vez en las nubes...quisiera saber qué o quién te tiene así –comenta Vernon con una sonrisa de medio lado, viendo fijamente a su mejor amigo.

-Ya déjate de boberías, sabes que sólo pienso cómo podré pasar esa maldita materia...aish ¿por qué tiene que ser tan difícil el inglés?- cuestiona con una mueca, aunque era cierto que no le iba bien en dicha materia, la realidad era que el mayor estaba otra vez fantaseando con su mejor amigo pero jamás admitiría aquello, pues sabía que el menor sólo lo veía como una amistad.

-Ya te he dicho que dejes de dormirte en las clases y me dejes ayudar pero no, el gran Boo SeungKwan puede solito- Vernon rodea sus ojos, pues ya se había ofrecido a ayudarlo pero siempre fue rechazado.

-Estás muy ocupado con tus clases como para encima tener que ayudarme...Joshua me esta ayudando, así que no hablemos más de esto- dice terminando de beber su americano.

-¿Joshua? ¿Por qué él?-cuestiona el menor frunciendo el ceño.

-Basta Vernon, sé que no te agrada pero esta menos ocupado que tú aparte vamos a la misma clase.

-Como digas pero él quiere contigo- dice molesto y termina su bebida.

-No seas menso, él tiene novia, sólo es un buen amigo- dice frustrado de tener siempre la misma conversación cuando se nombraba al mayor.

Los años pasaron y los dos se graduaron en sus especializaciones, pero aún así decidieron seguir viviendo juntos cuando ambos encontraron empleo al graduarse. SeungKwan trabajaba como profesor en un jardín infantil y Vernon trabajaba como traductor en una importante empresa internacional.

El mayor amaba la rutina que tenían: se habían turnado los días para preparar el desayuno y el primero que llegaba debía preparar la cena, los fines de semanas se dedicaban a ver películas, jugar videojuegos, salir con sus amigos o hacer la limpieza de la casa. Sus amigos solían bromear con que eran una pareja casada, lo que termina en la discusión de quién era el de abajo, cuan verdad quisiera SeungKwan que aquellas bromas fueran verdad, pero sabía muy bien que su amigo era heterosexual, pero nunca se vio venir lo que aquel lunes después del trabajo encontró.

Al entrar en la casa, varias prendas de vestir estaban por toda la casa, un suspiro escapó de los labios del mayor, ya que no era la primera vez que Vernon llevaba a una de sus conquista a la casa, por lo que Boo fue directo a su habitación encerrándose en esta, encendiendo la computadora y comenzando a planear la clases del trimestre que venía, mientras escuchaba música con sus auriculares.

-Boo- un grito se escuchó por la habitación ante el sonar del apellido del mayor, al girarse vio a Vernon riendo con el auricular en la mano. ¿En qué momento había entrado y le había quitado el auricular? ¿Cómo no se dio cuenta? –perdón jajaja pero estabas muy concentrado- explica el menor como si le leyera la mente mientras trataba de calmar su risa.

-Idiota, te he dicho que no hagas eso- comenta quitándose el otro auricular con el ceño fruncido -¿ya puedo disfrutar de nuestra sala mientras cocinas? –pregunta guardando su trabajo y se levanta de la silla –porque tú llegaste antes- agrega antes de que el menor se negara.

-Hansollie ¿dónde están la sartén?- una chica rubia, de cabellos largos y sedosos que le llegaban un poco más arriba de la cintura se asomaba por la puerta de la habitación de Boo –oh, tú debes ser SeungKwan, el amigo de Hansol...soy Megan, la novia de Hansollie, me ha hablado mucho de ti- se presenta la chica extendiendo su mano hacia el de mejillas grandes.

SeungKwan se quedó paralizado por unos segundos, Vernon jamás había presentado a una novia, de hecho en los años que llevaban conociéndose jamás había tenido una, todas eran cosa de una noche o amigas con beneficios, pero jamás una novia. 

-H...Hola- estrecha su mano con una sonrisa amable, al soltarla ve al menor por unos segundos y suspira suave –si me disculpan me daré una ducha, fue un día duro hoy- se excusa saliendo de su habitación al baño antes de que pudieran decirle algo más. Al entrar abre la ducha y se mete bajo el agua sin importarle estar vestido, sólo quería que el agua se llevara sus lágrimas, sabía que Vernon no era gay pero siempre albergó una pequeña esperanza. Ahora se sentía como el idiota más grande del universo, era obvio que tarde o temprano Vernon traería una novia a la casa, dentro de poco también se mudaría con ella, se casaría y tendrían una familia...mientras que él, llegaría a la casa donde nadie lo esperaría, tal vez se compraría un perro para tener algo de compañía, dormiría solo, comería solo, vería películas solo, limpiaría solo. Aquellos pensamientos hicieron que más lágrimas recorrieran sus mejillas mientras mordía la manga de su camiseta para no ser escuchado por el menor y la chica.