Duelo Dulce

Jon

Sabes cómo se siente.

Aquel dolor que crece tan profundo desde dentro de tu corazón, y que ya no sólo queda ahí, se expande lentamente hasta que decide mostrarse; a veces como un llanto, temblores, he incluso a través de una falta de aire que te logra asfixiar.

Pequeño Jonathan, sentir aquello no es normal.

Lo sabes, ¿No es así?

Miras a través de tu ventana deseas aquello que ya no está, te  culpas en silencio de algo que ni siquiera tiene rastro de tu nombre. Bajas la mirada, cansado del mañana sombrío que te espera y del cual ya lamentablemente estás acostumbrado.

Tu mente te obliga a pensar en aquello que no tiene sentido, pero que es tu único salvavidas en momentos como estos, porque a lo único a lo que te aferras es a la culpa que crees cargar...

¿Ya no vez un futuro cierto?

Entonces... ¿para que seguir ?

Damián ya no tendría a su estorbo.

Lois ya no tendría que mal gastar su dinero cada mes en aquella pensión.

Clark podría volver a hacer su vida sin ningún problema.

Y lo más importante, ya no habría dolor, ni llanto, ni malestares. No sabía que había después de la muerte, pero eso no le importaba, porque era un ángel que no creía en un dios, ni en nada en general, un hermoso ser cuyas alas habían sido cortadas.

Pequeño Jonathan ¿estás tán seguro de que aquella es la única salida?