Sobre como no mirarte (Especial parte 5)

209, Remember 2019

Una sola vez voy a hacerte caso, y es esta.
No voy a comprar nada, porque creo que a veces es más lindo hacer uno mismo las cosas, después de todo es lo que me enseñaste (una de las tantas cosas)
Intenté escribir muchas veces esto, pero las palabras no alcanzan, o no encuentro las adecuadas para decirte todo, pero acá, otro intento, como siempre.
Prefiero empezar por el 2018, el 17 de octubre para ser específica, vos sabes lo importante para mi de ese día, vos sos parte de lo importante, y desde ahí yo empecé a ser libre, algo que te debo y que voy a recordarte de nuevo.
Después de aquel día que marcó un antes y un después, las cosas empezaron a cambiar, yo misma.
Vamos a saltarnos algunos meses..
Febrero llegó, y con él todas las materias que tenía que rendir, (ya sé, no me lo reclames, admito que fue mi error!)
Ya sabemos lo que pasó, rendí mal en marzo y todo eso llevo a que repita segundo año.
No estoy orgullosa de haber repetido, pero le agradezco a la vida que haya sucedido, así nos lleva a esto, a lo que somos ahora.
Recién el 8 de marzo comenzaba el año para mí (día que rendí mal matemática, ya sé también, soy terca)
Y ahí apareces de nuevo, un marzo intenso, nuevo para mí, necesitaba acostumbrarme a algo totalmente nuevo en mi vida, necesitaba acostumbrarme a mis propias consecuencias.
Los meses pasan, y yo te quería más, como ahora, te quiero más.
Estaba mal, lo sabés, era adaptarme a mi nueva yo, a mi nueva vida, era volver a empezar.
Estaba perdida, pero apareciste, o en realidad, yo te vi, yo me di cuenta de que estabas ahí, de que también hay personas que nos ayudan sin darnos cuenta.
Vuelvo a repetir, los meses pasan N, y en cada uno que pasó te sentí próxima, te sentí cerca, escuchandome, retandome, abrazándome, queriéndome.
El 17 de octubre otra vez se hace presente, solamente que de este año, 2019.
Este también me marcó en cierto sentido, este también fue importante, e incluso especial (estaba lloviendo, que raro).
Me había dado cuenta de que vos realmente me entendías, y que no estaba del todo sola en ese sentido.
También quiero recordar un momento especial para mí (en realidad, todos lo son), fue un gesto muy lindo de tu parte y valioso para mí, el día que leíste abajo de la lluvia uno de mis textos más importantes, más especiales.
Ese día no sabía que lo ibas a leer ahí, fue muy adorable para mí, significó que te importaba más de lo que yo creía, por eso la lluvia también es especial.
Porque cada vez que llueve algo especial pasa, cada vez que llueve me acuerdo de todo lo bueno.
No solo me voy a llevar lo bueno de todo esto, también algunas cosas malas (cuando me dijiste que perdiste mis textos), pero me los llevo porque también me enseñaron algo, aunque en realidad no lo creas.
Este año fue uno de los más lindos, uno en el que maduré más de lo que creía posible, uno en el que aprendí las cosas no son eternas, en el que aprendí a querer(me), en el que aprendí que siempre tengo que estar con la cabeza en alto, que siempre tengo que priorizarme, amarme.
Fue un año en el que me enseñaste otra forma de ver las cosas, de verte.
Un año en el que escribí mucho, canté mucho, y (te) quise mucho.
Este año fue intenso, pero maravilloso.
Puedo decir que no me arrepiento de absolutamente nada, de hacer las cosas mal y que me lo reclames, de hacer todo lo que hice, porque sin aquellos pequeños momentos, nada de esto pasaría.
Voy a decir algo muy fuerte, y por ahí creas que es demasiado, pero tampoco me arrepiento de lo que me pasó, si pudiera cambiarlo no lo haría, no me arrepiento de absolutamente nada, de haber esperado años para contar todo tampoco.
No me arrepiento de nada a lo que me lleve a vos.
Por eso este año es especial, porque aprendí a quererte sabiendo que no sos eterna, y que vos también sabes volar, como las mariposas que tanto amo y admiro.
Gracias por este año, y espero que el que viene sea incluso mejor, para vos, y para mí.
Espero que esté lleno de textos, de abrazos y de muchísimos te quiero; espero que esté lleno de momentos para recordar, de enseñanzas, de cosas buenas.
Espero que el año que viene, recordemos el 2019 con una sonrisa a pesar de todo lo malo.
Y espero, que el 2020 esté lleno de vos.
Te quiero muchísimo, N.