Todo puede salir mal

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-¿¡Qué!?- grité, sorprendido por la noticia.

-Yuuri, no grites- me reprendió Leo.

-Pero... Un campamento- habían pasado unos meses desde que todo volvió a la "normalidad" con Viktor y con todos, recién estaba llegando a entrenar cuando nos dijeron que iba a haber un campamento, había unas competencias importantes por venir, lo que significaba un tiempo de relajación para luego entrenar como si no hubiera un mañana.

-Sí, ¿no es increíble?- todos estaban emocionados, todos a excepción mía.

-Claro- respondí, sin ningún ánimo.

Le había prometido a JJ hablar con Otabek, aunque no estaba seguro de conseguir nada puesto que él estaba enamorado de Yurio.

Le había prometido a JJ hablar con Otabek, aunque no estaba seguro de conseguir nada puesto que él estaba enamorado de Yurio

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Pasaron unos días y... Esperen, ¿en qué momento terminé aquí? Rememoremos, le hablé a Otabek por medio de las redes sociales, él se puso sentimental porque Yurio no le hacía caso y yo terminé estando igual porque Viktor estaba en las mismas, bien, hasta ahí bien, pero...

-¿Y si comenzamos a salir hasta que Yurio me haga caso a mi y Viktor a tí? Para olvidarnos de malos amores- me parecía excelente, pero yo no era de traicionar a mis amigos.

Corrí a enviarle esa conversación a JJ y él dijo que estaba bien, que saliera con él para sacarle información, así que, así lo hice, acepté la propuesta y comencé a salir con él. Otabek era un oso pegado a mí, cuando tenía frío me abrazaba, siempre me tomaba de la mano e inclusive trató de besarme, pero ese primer beso yo lo estaba guardando para mí persona especial, así que simplemente volteé la cabeza y me terminó besando la mejilla.

 Otabek era un oso pegado a mí, cuando tenía frío me abrazaba, siempre me tomaba de la mano e inclusive trató de besarme, pero ese primer beso yo lo estaba guardando para mí persona especial, así que simplemente volteé la cabeza y me terminó besan...

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Pasaron los días y nos fuimos al tan esperado campamento, iba sentado junto a Mari, pero ella se cambió de asiento para irse con su novio, así que Otabek se sentó a mi lado, no tenía ganas de hablar con él así que le dije que dormiría. Cuando desperté nos encontrábamos en esta situación.

-¿Te digo algo?- volteé a ver a nuestras manos entrelazadas, luego miré atrás de Otabek y Viktor nos estaba viendo de una manera horrible.

-Dime- Viktor evitó mi mirada a partir de ese momento.

En verdad te amabaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora