capítulo 08

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❝ un ratito más ❞

          

—¿Qué pasa, Jiminie? —preguntó Taehyung posicionándose a su lado mientras caminaban por el pasillo del instituto.

—Jungkookie aún no llegó —puchereó, suspirando con pesadez.

—Mhm —asintió con una sonrisa, el castaño era demasiado tierno—. No te preocupes, seguro no tarda en llegar —dió ánimos.

—No lo sé, Taehyung. Él siempre está aquí antes que yo. Dice que así debe ser para que él pueda recibirme con un abracito —dijo dirigiéndose a su casillero, abriéndolo.

—Ustedes son tan tiernos —suspiró Taehyung—. Deberían ser par-

—¡Jiminie! —gritó una voz conocida para el mencionado.

Lee Taemin.

Jimin giró sobre sus pies, encontrándose con un rubio yendo hacia ambos.

—Hol-

El habla del castañito finalizó cuando el fuerte abrazo que le dió Taemin lo calló, haciendo que el menor dejara de tocar el suelo y enredara sus bracitos alrededor del cuello de Taemin.

—Pequeñito... ¿cómo estás? —preguntó acariciando el cabello del castaño.

Taehyung rodó los ojos. Sabía perfectamente lo que Taemin buscaba, quería ocupar el lugar de Jungkook, quería que tuviese esa misma relación con Jimin.

—Bien, ¿y t-

—¡Jimin! —una voz interrumpió al castañito.

Taemin rodó los ojos.

Jimin abrió sus ojitos, ya que los había cerrado para recibir el abrazo, encontrándose con un Jungkook con el entrecejo fruncido yendo hacia ellos. Éste apenas llegó al par que se estaba abrazando, separó a Taemin del castaño con un poco de fuerza ya que éste se negaba a soltar a Jimin, luego de varios intentos, logró empujarlo hacia otro lado, ahora abrazando, suspirando, y sonriendo con alivio cuando pudo abrazar al castaño. A su Jimin.

—Oye, ¿qué te pa- ¡Auch! ¿por qué hiciste eso? —se quejó por el pellizco que Taehyung le había dado para que se callase.

—Luego te explico —dijo bajito, llevando a Taemin lejos para que el par pudiese saludarse en paz.

—¡Kookie! —sonrió—. Creí que no vendrías... —habló enredando sus piernas a la cadera del mayor, besando la punta de la nariz del contrario para luego abrazarlo desde su cuello con cariño, apoyando su mandíbula en el hombro del otro, como si se tratara de un koala.

—Me levanté tarde —confesó, apretujando más a Jimin en sus brazos.

—Demasiado Overwatch. Te dije que debes ser cuidadoso a la hora de dormir, Kookie. Respeta los horarios de tu madre y de tu Jimin —reprendió con una voz demasiado tierna como para ser tomada en serio, pero el azabache lo haría, porque siempre tomaba en serio las palabras de su mejor amigo.

—Sí. Lo siento — susurró—. No volverá a suceder, mamá —rió.

—Mhm... estás perdonado —sonrió, y trató de bajarse de su mayor para verlo a la cara e ir de una vez al salón de clases, pero éste al darse cuenta de las intenciones de Jimin, lo sostuvo con un poquito más de fuerza, asegurándose de no apretarlo demasiado—. ¿Kookie? —llamó extrañado ante tal comportamiento.

—Un ratito más, por favor —pidió, dejando un besito en el cuello del mencionado.

Y Jimin no podía negarse a ello. Así que se acomodó mejor en el cuerpo del azabache, abrazándolo con más fuerza y cariño.

—Un ratito más, Kookie —afirmó.

boyfriends? 丼 kookmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora