Aloha Oe [Iguro x Lectora]

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|...| DIAPHONOUS

    Por supuesto que nadie es igual en este mundo. Nadie es la misma persona; nadie puede convertirse en otra persona; nadie puede evitar compararse con otra persona. No puedes evitar sentir celos por esa cazadora. No puedes preguntarte cada día por qué a ella, por qué ella es así, por qué-- ¿qué te hace falta?

    Comprendes que no eres fuerte, tus músculos son tan pocos visibles. No eres ágil, en realidad eres algo torpe, torpe hasta el punto de haber caído por alguien quien ya tiene a otra persona guardada en su corazón.

    No tienes aquel color inusual de cabello como el de ella (ignorar esto si tienen multicolor); es tan llamativo que hasta tu vista pudo ser cautivado por ella, no hay duda del porque él la mira. No tienes las energías de siempre sonreír o actuar en alegría, no hay duda del porque él fue cautivado por aquella mujer; algo tan llamativo en una vida oscura. Y eso lo quieres ser: poder ser una salvación para Iguro. Poder ser su causa de seguir adelante, ser el pilar que puede soportarlo, ser su punto fuerte, y ser su mayor debilidad.

    Y un pequeño a lo mejor, él puede darte su atención.

    Así como Iguro se lo da a Kanroji.

    Pero nadie puede dar lo mismo a alguien más.

    Pero esa pequeña llama dentro de tu pecho te dice que hay un a lo mejor. A lo mejor él puede escribirte de vuelta, aún apesar de nunca haber recibido una respuesta anteriormente; a lo mejor él puede conversar contigo, aún apesar de haber sido ignorada miles de veces; a lo mejor él puede compartir su vida contigo; a lo mejor él puede sonreír para ti; a lo mejor él puede reír para ti; a lo mejor te puede escuchar; a lo mejor su mirada puede ser puesta en ti; a lo mejor él puede darse por vencido por esa mujer; a lo mejor... Sólo a lo mejor él pueda ignorar a Kanroji y darte, aún si es por lástima, su querido amor.

    Ambos de ustedes son ciegos.

    Ambos de ustedes comparten algo similar. Y tal vez es lo único que compartes con Iguro.
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    Una idea llega a tu mente, un par de horas después de que Kanroji te haya invitado a salir con ella. Era un idea bastante ridícula pero en ese momento era espléndido. Era con confianza.

    Al llegar a tu habitación decides cambiar tu atuendo, algo similar a lo que ella usaría. Decides cambiar tu estilo de cabello, algo similar a lo que ella llevaría. Y prácticas frente a un espejo en como hablar más confiable, prácticas en como sentir y dar un brillo en tus ojos como Kanroji lo hace. Y en medio de todo el ensayo, te detienes.

    Parada frente a un espejo, miras a alguien diferente. Alzas una mano, miras como en el espejo se hace la misma acción; no quieres creer lo que haces.

    Suspiras antes de bajar la mirada, tu respiración se acelera y cierras los ojos fuertemente. Tus rodillas se vuelven gelatina, las energías de poder seguir parada desaparecen, y caes al suelo. Dejas, sin él más mínimo esfuerzo, dejas a tu corazón llorar. Dejas las lágrimas salir de tus ojos mientras que tu mano pasa por tus cabellos [color]. No querer sentir más es lo que deseas ahora mismo.

    Dejas de estar agarrando tu pelo y bajas tu mano, tres de tus dedos toman tu barbilla, y tu pulgar pasa por tus labios. Te imaginas a él estar frente a ti, imaginas ser él quien hace tales movimientos, te imaginas su cálido toque en ti, como su vista sería puesta sobre ti.

    Dejas soltar un tremendo chillido.
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—¡[Apellido]-chan, te hice esperar mucho?!— la Pilar del Amor pregunta con preocupación, su ceño fruncido y un puchero en sus labios.

    Niegas con la cabeza, —¡No, para nada!

    Tal vez no te sientes ser suficiente...

—¡Kyaaa! Muy bien, además, ¡te ves muy linda hoy!— su sonrisa tan resplandeciente hace tu corazón ser apretado.

    Pero eres lo suficiente como para saber que no puedes llegar a odiarla...

| Light, translucent, and delicate. |

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