A love story [Terminada]

Cap. 25 (Penúltima parte)

Desperté temprano la mañana siguiente y me aseguré de que los chicos ya tuvieran todo listo una vez que Irene y su madre se hubieran ido de la casa. Bajé las escaleras y  me dirigí a la cocina, ahí encontré a Irene cocinando el desayuno, traía unos shorts color durazno, una playera de manga corta color blanca, el cabello suelto acomodado en una trenza y sus pantuflas de conejo, blancas; sonreí ante lo linda que ella se veía, me acerqué sigilosamente y la abracé por detrás colocando mis brazos alrededor de su cintura, ella se sobresalto y giró soltando un leve grito, el cuál me pareció muy tierno

-¡Taehyung! -Dijo en voz alta mientras me daba un ligero golpe en el pecho, la solté y me froté el lugar del golpe fingiendo estar muy adolorido, ella rodó los ojos y continuó preparando un licuado

-¿Qué estás cocinando, princesa? -Le pregunté coquetamente acercándome un poco a ella

-¿Princesa? -Me miró extrañada una vez que termino de preparar el licuado y quito la licuadora de su base

-Sí, decirte así es lindo, como tú -Continuaba siendo coqueto, me miró e hizo una de sus maneras particulares de sonrojarse, la cuál era agachar la cabeza mientras se acomodaba el cabello, me acerqué y tomé su mentón, levanté su cara hasta que nuestras miradas se encontraron y sin dejar de mirarla me acerqué poco a poco hasta que mis labios tocaron los suyos, le di un beso lento y dulce, no quería intentar algo más atrevido porque no lo encontraba correcto en ese momento

-Feliz cumpleaños -Dije una vez que nos separamos, ella me dio una amplia sonrisa y yo sonreí con ella -No deberías estar preparando el desayuno -Dije tomando la licuadora -¿Qué quieres de desayunar? -Ella me miró extrañada mientras yo comenzaba a servir el licuado en los vasos; aún con el hecho de que no me gustaba cocinar, por ella podía aprender a hacerlo

-No tienes que hacerlo, Taehyung -Dijo dulcemente, la miré y negué

-Vamos pide algo Irene, lo que sea -Sonreí dejando la licuadora en el fregadero, me acerqué a ella y la tomé de los hombros mientras la dirigía a las sillas altas que estaban del otro lado de la barra de la cocina

-Quiero unos hotcakes Taehyung -Sonrió pícaramente, mi mente se quedó en blanco al escuchar lo que quería, nunca había preparado hotcakes, ni sabía como se hacían. Ella comenzó a reír, parpadeé saliendo de mis pensamientos y la miré

-¿Qué ocurre? -Le pregunté confundido con aquella risita que acababa de soltar

-Tienes una cara de miedo Taehyung -Dijo riendo un poco más, no me molestara que se burlara de mi cara, de hecho me gustaba escucharla reír -Te pusiste pálido cuando escuchaste lo que quería

-Buenos días -Escuchamos a su madre decir en el umbral de la puerta de la cocina, ambos la miramos -Feliz cumpleaños hija -Ella se acercó y le dio un gran abrazo a Irene -Hija, ve a arreglarte vamos a salir -Dijo una vez que la soltó, Irene me miró y sonrió, se levantó de su silla y salió de la cocina, su madre me guiñó el ojo y yo sonreí