No había nada que pensar si o si tendría que entrar a esa operación, si no lo hacia la vida de ambos estaba en peligro.
Después de firmar las responsiva de la operación, el personal me preparo para la cesaría, paso una hora, pero para mí fueron 5 minutos. Cuando desperté estaba en la habitación Jenny sentada en el sillón reclinable y Jackson de pie a si lado izquierdo, ambos observaban a al do derecho a Dante que llevaba un pequeño bulto rodeado de cobijas blancas en sus brazos.
–Ya nació el bebé—pregunte mi voz sonaba un poco más ronca de lo usual.
Jenny sonrió—su nombre es Max, utilízalo–dijo poniéndose de pie para quitarle de los brazos en niño a Dante— ¿puedo? Quiero que Isis lo vea, es un niño hermoso
Dante asintió y lo puso con cuidado en los brazos de Jenny.
Jenny camino hasta mí, por mi parte trate de enderezarme en la cama, gracias a Dante pude hacerlo más fácil. Me corrí un poco hacia un lado para dejarle espacio a Jenny.
– ¡Mira es un niño muy lindo!—dijo sentándose y tratando de pasármelo—el medico dijo que todo estaba bien, Max podrá iré a casa hoy lo que estaba causando esa anomalías era que este pequeño enrollo en cordón umbilical en su cuello, suerte lo detectaron antes de que fuera peor.
Puse mis manos frente a mí— ¡no! Sostenlo tú, se ve muy pequeño lo puedo lastimar
–No lo lastimaras—dijo y lo empujo contra mí, acomodándolo entre mis brazos—vez no es tan difícil, solo sostén bien su cabecita
Por primera vez vi a mi hijo, esa personita que solo había visto en las ecografías. En este momento no sabía lo que sentía, Solo viendo su carita el que diga que los bebés recién nacidos son bonitos es porque son los padres o están mintiendo, el bebé estaba rojo, su cara hinchada y desde que Jenny lo puso en mis brazos parecía no estar cómodo porque seguía haciendo gestos pero para mí era el niño más hermoso del mundo—creo que no está cómodo, mira cómo se mueve ¡ten!—intente ponerlo de nuevo en sus brazos—¿están seguros que ya se puede ir? Su cara se ve roja, solo han pasado 5 min desde la operación.
Jenny rio—eso es normal y la operación duro 1 hora, estuviste durmiendo por tres horas—agrego Jenny— ¡Isis! Jackson y yo estuvimos hablando, te parece quedarte a solas con Max unos minutos, sería bueno para ambos Dante y tú podrían despedirse.
No escuche casi nada de lo que Jenny dijo, en ese momento toda la atención era para el niño en mis brazos.
–sí, eso estaría grandioso, media hora estaría bien—contesto Dante por ambos
No supe cuando ellos dejaron la habitación ni cuando Dante se sentó junto a mí en el lugar que Jenny estaba, fui consciente de la mano gigante Dante sobre la mía solo cuando una gota cayó sobre la frente del bebé haciéndolo retorcerse y hacer gestos me di cuenta que estaba llorando, la lagrimas solo brotaban. NO estaba consciente de lo que sentía, las lágrimas solo salían como cataratas
– ¡Isis!—llamo Dante
–No sé, las lágrimas solo salen—gire mi vista hasta que mis ojos encontraron los de Dante. Él estaba llorando, muy en el fondo sabíamos porque llorábamos era por l niño que ninguno de los dos queríamos entregar, ambos estábamos conscientes de que lo veríamos de nuevo desde afuera solo como espectadores, él no nos llamaría mamá o papá, no veríamos sus primeros paso o escucharíamos sus primeras palabras.
Una parte de mi quería quedarse con él, la otra quería salir y conocer el mundo. Semanas antes de que el naciera y tuviera a todos revoloteando a mi alrededor mí, Dante ofreció casarse conmigo.
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Sin nombre
Short StoryDespués de muchos años sola, siendo una nerd de las computadoras, una tiende a escapar a un mundo virtual en el cual podría relacionarme sin sufrí pero conocí a un hombre encantador en la vida real, sabia desde un principio en lo que me metía, supon...