Cerca de Mí

2.9K 257 95
                                    

-¡Despierta Temo! -Fueron las palabras que, muy "amablemente" su hermano Julio había gritado mientras entraba a su cuarto la mañana del 25 de diciembre.

-¡Julio no es educado despertar a las personas de esa manera! -escucho que decía su hermana Lupita mientras Temo trataba de enfocar su mirada en la habitación que lo rodeaba.

La noche anterior, Temo junto a su familia habían ido a pasar la noche vieja con los Córcega, los cuales, en realidad, ya también eran considerados parte de la familia.

La velada había sido increíble, Doña Blanca los había deleitado con su talento culinario, la casa había sido decorada de forma espectacular por Daniela y Linda y los niños habían entonado villancicos que lograron hacer cantar hasta al más amargado de los presentes (su queridísimo suegro, en opinión de Temo). Tenía varios recuerdos bonitos de la noche anterior. Había bailado y cantado con su novio toda la noche. Se podría decir que habían estado toda la fiesta juntos, a excepción de ese pequeño momento en el que Temo estaba platicando con Daniela y Ari estaba en una esquina hablando con su Papancho.

Temo recordó particularmente, el momento en el que Aristóteles y el habían escapado del bullicio hacia la terraza y-

-¡Temo! -Grito Julio mientras saltaba a la cama, arrastrándolo lejos de los recuerdos-. ¡Es hora de bajar! Debes abrir tus regalos.

-Julio, es navidad hoy nadie hace nada. Déjame dormir -Respondió Temo, tratando de acomodarse nuevamente en la cama.

-¿Y qué pasa con tus regalos?- Lupita preguntó.

-Eso puede ser más tarde Lupe -dijo Temo con un tono irritado. Ayer habían llegado muy tarde a la casa y casi no había dormido nada -. Váyanse que quiero dormir.

Los niños lo vieron enojados pero Temo los ignoro cerrando los ojos tratando de volver a conciliar el sueño.

-¿Entonces que le decimos a Aristóteles? -pregunto Julio y Temo abrió abruptamente los ojos sentándose en la cama rápidamente.

-¿Aristóteles? -pregunto confundido el castaño.

-Sí, está en el vestíbulo esperándote hermano- respondió Lupita mientras se sentaba junto a él en la cama-. Yo que tu, bajaría ya. Lleva esperándote varios minutos.

"Esto era imposible, no habían acordado verse tan temprano" Temo pensaba eso mientras se dirigia rápidamente al baño. Sus hermanos al ver a donde iba, corrieron a la entrada del baño, evitándole el paso.

-¿A dónde vas? -gritaron al unísono-. Aristóteles te está esperando.

-¡No voy a dejar que Aristóteles me vea así! Me acabo de despertar, no me he bañado, estoy despeinado y-

-¡Eso no importa Temo! Si es amor de verdad te querrá aun cuando se dé cuenta de lo feo que  eres -interrumpió Julio.

Cuando Temo fulmino a Julio con la mirada Lupita decidió que era momento de intervenir

-Lo que quiso decir Julio, pero, como siempre, expreso mal, es que si hay amor, las apariencias no importan.

Temo lo estaba considerando. Llevaban solo unos pocos meses juntos, pero durante el tiempo que llevaban de conocidos, Aris ya lo había visto (y olido) cuando estaba sudado después de los entrenamientos de Básquet. Quizá y no sería tan raro verlo recién levantado...

-Vamos Temo, -dijo Lupita al notar su silencio-. Esta es la prueba de amor.

Temo casi se ríe de la inocencia de su hermana, pero decidió hacerle caso y acompañarla a la sala.

Cuando por fin llego a la habitación se encontró que toda su familia estaba charlando animadamente alrededor del árbol, aun en pijama. Sin embargo, mirando en todos lados fue incapaz de ubicar a su rizado.

Cerca de Mí - Aristemo (OneShot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora