Verónica

Capitulo V

Emiliano:

Hoy hace 1 año que recibí el mensaje de julia para decirme que Verónica estaba de parto y que iban saliendo al hospital, salí inmediatamente de la finca que estaba a 8 horas de la ciudad, estuve tratando de llamar a Julia sin éxito así que llamé a mis padres para que se adelantaran, cuando llegué al hospital me recibieron mis padres y mis suegros, todos lloraban, sentí que el mundo se venía abajo.

-¿Dónde están?- pregunté, no quería pensar mal, el llanto era de alegría por nuestra hija, debía ser por eso.

-Mi amor lo siento - dijo mi madre

-Qué está pasando- mis suegros se acercaron-

-Hijo, Verónica... ella...- me miró mientras sus ojos se llenaron de lágrimas.

-Dime que paso madre

-Ella... se ha ido mi amor - sentí como el corazón se me hizo mil pedazos, debía ser una broma

-Dime que es mentira- les exigí mientras los veía

-No lo es- dijo mi suegro quien tenia el ojos llenos de lágrimas

-No es cierto, no lo es - grite, comencé a darle golpes a la pared, mientras mis lágrimas caían - Ella no pudo dejarme - gritaba, entonces me gire- ¿dónde está mi hija? - cuestione -

-Ella está bien - fue Julia quien respondió con lágrimas en los ojos, estaba herida y con golpes en la cara- es una niña sana, no hubo problemas con ella...

-¿Que te paso?

-yo... Emi lo siento, tenía que cuidarla... fue mi culpa, de verdad lo siento tanto - se arrodillo pidiéndome perdón mientras sus lágrimas caían, no entendía nada-

-Que demonios paso?

-Mientras Julia venía al hospital con Vero sufrió un accidente, como vez Julia está lesionada, pero el impacto fue del lado de Vero por lo que llegó aquí en estado grave, le hicieron cesárea de emergencia, pero ella... no sobrevivió... tu hija si lo hizo.

-Dónde está Veronica, quiero verla - tenía que verlo con mis propios ojos

-Le diremos al médico que llegaste - respondió mi padre

Espere unos minutos que se me hicieron eternos, estaba ahora frente a la puerta que me dividía de el amor de mi vida, tomé valor y entré, ahí estaba mi ángel recostada sobre una cama, este lugar era frío, su rostro tenía golpes y cortadas pero parecía dormida, me acerqué para abrazarla pero el calor había abandonado su cuerpo.

-Mi amor- le susurre al oído- perdóname por no quedarme a tu lado - y llore, porque la había perdido- perdoname mi amor, por favor, no debí dejarte sola, tenía que estar contigo y con nuestra hija, perdoname - no se como explicar el dolor que siento ahora, la abrace mas fuerte y llore sobre su cuerpo, mi novia, mi compañera, la mujer que amo se ha ido para siempre y esto me esta quemando por dentro.

-Emiliano - era la voz de Julia- por favor perdóname

-No fue tu culpa, fue del quien las choco y a quien voy a refundir en la cárcel por la muerte de mi mujer

-Quien nos chocó se dio a la fuga, yo no alcancé a ver las placas porque caímos a un precipicio y mi prioridad fue ella, perdóname por no poder protegerla - decía mientras lloraba- perdoname

-No tienes que pedirme perdón, la culpa es mía por no estar con ella , yo debía protegerla.. 

-Claro que es mi culpa, te prometí cuidar de ella y no lo hice - decía mientras lloraba- 

-Por favor déjame solo con ella, solo quiero estar con ella ahora.

-Lo siento... - dijo mientras salía de la habitación.

Pase varios minutos con ella, pero era difícil aceptar que estaba muerta

-Sr. Emiliano, ya es hora de llevarnosla

Mire al señor que había entrado, ahora solo me quedaba despedirme de ella.

-Mi amor, te prometo que cuidare de nuestra hija, que le hablaré de ti, que nunca te dejare de amar... -bese sus labios por última vez- te amo mi amor...